Capítulo 5. Su casa

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Después de que Marie se fuera pedí dos pizzas, uno para papá y otro para mi. Llegó la hora de comer y mi padre llegó al fin. Estaba hambrienta.

-Hija cuantas pizzas pediste?

·Dos, lo mismo de siempre.

-Pide otro más, un amigo me pidió que comiéramos hoy en su casa y llevamos luego las pizzas allí. Quiere conocerte.

No tenías ninguna ganas de salir de casa y encima tener que conocer un hombre mayor de la edad de mi padre.

·Vale.

Llegaron las pizzas y mi padre pagó al repartidor. Cogimos nuestras cosas y salimos de la casa. Estaba hablando con mi padre y no me dí cuenta que la casa a la que íbamos estaba en frente nuestra.

Mi padre pegó en la puerta y en unos segundos la puerta se abrió. Y allí estaba mi vecino guapo idiota.

PORQUÉ TENÍA QUE SER ESTE SU AMIGO?? HAY MILLONES DE HOMBRES DE TODAS CLASES Y EDADES. Yo me creía que iba a ser un hombre más mayor, no este idiota.

-Hola pasen.. dijo con una sonrisa.

Cuando pasó mi padre, me vio y su cara fue de muy sorprendido.

-Túuu?

·Sí soy yo..

Entré rápido y dejé las pizzas en la mesa del salón; entre como si fuera mi casa como él hizo con la mía.

*Te presento a mi hija. Ella es Jen. Y Jen te presento a Jason mi amigo.

Jason se acercó a mi para darme dos besos, pero yo le dí mi mano como saludo. Él me agarró de la mano me tiró hacia él y me dio un abrazo diciéndome:

-Encantado de conocer a la hija de mi gran amigo.

Cuando ya estábamos abrazados me susurró "Pequeña mentirosa".

Aproveché ese momento de que estábamos abrazados para hincar mis uñas en su espalda. Me solté y le sonreí con una sonrisa irónica.

-Bueno sentaros donde más os apetezca.

Sin más cogí y me senté en el sofá, justo enfrente de la televisión. Mi padre se sentó en un sillón aparte.

-Queréis algo de beber?

*Sí una cerveza.

-Y tú pequeña?

·Yo un refresco.

*Jen, ve y ayúdale.

Tuve que levantarme y ir detrás de Jason para llegar a la cocina porqué yo no me sabía el camino. La casa por lo que llevaba viendo era normal para un chico de su edad, para un estudiante, está perfecto.

Llegué a la cocina y Jason estaba allí poniendo mi vaso de refresco.

-Quién me lo iba a decir, la niña malcriada es hija de mi amigo.

·Que no soy malcriada, y segundo yo tampoco esperaba que fueras tu el amigo de mi padre. Me esperaba alguien mucho más viejo.

Cogí mi refresco y me fui al salón. Comencé a devorar mi pizza cuando el chico llegó y se sentó a mi lado.

En unos minutos ya me había comido mi pizza entera. Notaba como Jason me miraba.

-Nunca he visto a una chica comer tanto.

*Mi hija es como su padre, somos de comer bien.

·Yo no soy la típica chica que come solo ensalada o su dieta vegana. Me encanta comer.

*Sí, mi hija es como un hijo, pero sin ofender..

·Papaaa! No es verdad...

*No digo que te vistas como un chico, solo que te gusta el fútbol y varias cosas más, pero no eres una machorra.

-Así que te gusta el fútbol?

·Sí, me gusta el Real Madrid y varios equipos más.

-Yo también soy del Madrid, no como tu padre que es del Barça.

·Lo odio por eso.. como le puede gustar ese equipo?

*No te metas conmigo por eso.

·Dejemos el tema si no quieres terminar mal.

De repente su hermosa risa hizo que yo sonriera.

-Vaya, me gusta tu hija, tiene carácter.

Cuando dijo eso me puse nerviosa. Me levanté para ir al servicio pero cuando me disponía de ir.. algo me detuvo.

·Jason me podrías indicar donde está el servicio?

-A la derecha del pasillo, puerta segunda.

Salí de allí lo más rápido que pude. Otra vez me puso nerviosa. Cómo lo hace? Ningún chico lo había conseguido. Excepto uno pero fue cuando tenía doce años. Me gustaba, me pidió salir y yo contenta dije que sí pero al segundo de decir que sí, me mandó a la mierda. Era todo mentira para burlarse de mi. Desde ese día pasé de ellos.

Me eché un poco de agua en la cara para tranquilizarme, conté hasta tres y salí. Después de que ellos terminaran de comer, nos tomamos unos cafés y volví a mi casa. Después de todo no me parece tan mal chico, es buena persona. Lo que pasa que cuando estamos solos se vuelve estúpido.

Llamé a Marie y le conté estuve en la casa de mi vecino. Ella antes de colgar el móvil me dijo que el stripper me hablaría por mensaje. Ya que antes no pudo porque le dio mi número mal ya que estaba más que borracha.

Al llegar a mi cuarto me puse a ver series por el portátil tumbada en mi cama. Terminé de ver una serie y puse otra. Tenía los auriculares puestos y estaba muy pendiente de la serie, estaba muy intrigante. De repente me cayó una bola de ping pong en mi portátil.

Me quité los auriculares y miré hacia la puerta. Estaba cerrada, no entendí nada.. pero intenté ponerme otra vez los auriculares pero me cayó otra bola, pero ahora en el hombro. Miré hacia la ventana y allí vi a mi estúpido vecino desde su balcón intentandome tirar otra bola.

Le eché una mirada fulminante y salí al balcón.

·Qué quieres? Estaba muy tranquila viendo mi serie.

-Qué serie veías?

·Sherlock Holmes.

-Wow, parece que tenemos el mismo gusto.

·Así, no me digas? Qué quieres?

-Necesito tú consejo.. que me pongo ésta camisa de cuadros o ésta azul lisa?

·Me preguntas a mi? Que soy la pequeña malcriada? Además te tengo que ayudar a vestir para que tu puedas ligar?

- No es para ligar es para trabajar. Vale retiro lo dicho de malcriada... pero lo de pequeña no. Me vas ayudar?

·Ponte el azul.

-Gracias por la ayuda. Ya puedes seguir con lo tuyo.

Amor con sus dificultades.  (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora