Beso prohibido.

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Uno de los inconvenientes de que haya decidido invitar a sus amigos, es que Jungkook por el momento también lo era. Así que reclamaba mucho de su atención interponiendose hábilmente entre los escasos momentos que podía tener con Je Jae.

Cuando todos estuvieron ya presentes sentados en la mesa que les correspondía,  Jungkook no se aparto de su lado y Jae tampoco lo hizo sentándose al otro lado suyo, quedando él enmedio de ambos. Ben y Kio estaban seguidos de Jungkook mientras que Hoseok y Jimin estaban sentados enfrente suyo.

Si Jae le preguntaba algo, Jungkook atraía su atención pasándole un brazo por encima de sus hombros, obligándolo a girar su rostro hacia él y le sacaba un tema cualquiera de conversación dejando al pobre chico de sonrisa cálida con las ganas de tener tiempo con él. Aparte apenas si pudo tener un poco de tiempo con Kio porque al parecer Jimin le había extrañado también y se le había dado una pegada cariñosa, enganchado su brazo al chico japonés riendo y platicando de quién sabe que entre ellos dos, incluso él ojigris termino cambiandole el lugar al pelirrojo para estar cerca de Kio.

Mientras tanto de Hoseok no pudo dejar de sentirse enfadado. En su cabeza no dejo de darle vueltas lo que Jae le había dicho sobre él pelirrojo, y quizás era bastante obvio porque aunque Hoseok se limitaba a verle serio y no le interrumpía cuando hablaba con Jae o Jungkook, en su mirada podía sentir que le molesta tanto que les diera su atención y sostenerle la mirada por unos segundos no podía, así que en varias ocasiones le rehuyó la mirada.

Suspiro cansado. No se estaba divirtiendo para nada. No es que realmente hubiera podido hacerlo, después de todo era la boda de su padre y sabe que ellos pretendían irse a un viaje de tres días a la isla Jeju al terminar la celebración, algo así como una pequeña luna de miel. Pero esto era demasiado.

Aprovecho el cambio de luces y de la música melodiosa por una más rítmica para poder escabullirse a los sanitarios, necesitaba refrescarse el rostro. Por supuesto Jae y Jungkook le imitaron levantándose también de los asientos, pero de inmediato les paró el alto.

—Necesito un minuto —les dijo a los dos— ahora vuelvo...

Los chicos le siguieron con la mirada fija hasta que él castaño se perdío de vista por el pasillo del otro lado del salón. Entonces rápidamente giraron sus rostros para verse cara a cara, como si solo estuvieran esperando eso para poder asesinarse con la mirada ya que ninguno la bajo u aparto. Jungkook luce íntimamente siempre con sus tattoos y piercings en el labio y ceja. Su mirada es fuerte y profunda. Sin embargo Jae es de carácter fuerte, fácilmente no se intimida, es lo contrario a su semblante de un chico sencillo, amable y sonriente. Jae intuye que él pelinegro ya se dió cuenta de que tiene interés amoroso por él castaño.

Ben y Hoseok fueron los únicos que se percataron de la tensión que se traían esos dos ya que Jimin y Kio seguían riendo y platicando ajenos a lo que esos dos se traían.

—Hey, Jungkook...

Así que él peliplata se preparó por si tenía que ayudar a su amigo.

Pero él pelinegro ignoro su tono de advertencia. De la cara del chico de piel canela, Jungkook no iba apartar la vista. Entonces espero un poco, se quedó así viéndole casi inmóvil solo inclino levemente la cabeza y luego la volvió a subir con un aire duro y desafiante.

Jae sintió que la garganta se le secaba y con rapidez aparto un poco la silla de su espalda. Sentía que Jungkook de un momento a otro se le iría encima.

—¿Qué es lo que...? —quiso decirle algo, cortante y brusco para que él pelinegro dejara de verlo así pero no pudo y se interrumpió. Parpadeo una vez y carraspeó—. ¿Algún problema...?

MI PROMESA (KOOKJIN) LIBRO #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora