"Boy, you give me feelings, never felt before"
☘︎☘︎☘︎☘︎☘︎☘︎☘︎
-Bajen con cuidado las escaleras. -Un lindo rubio miraba a sus alumnos con atención de que ninguno se extraviase o cayera por su descuido.
Su pequeña excursión al centro de la cuidad ya había terminado, habían ido a diversos lugares ligados al ballet y le emocionaba mucho ver cómo sus pequeños alumnos quedaban encantados con todo lo que observaban.
Al ya estar afuera del teatro en donde habían visto uno de las tantas actuaciones que tenían programadas para ese día, los guío a un pequeño autobús. Hizo que cada uno subiera de a poco mientras contaba a cada alumno para asegurarse que estuvieran los dieciséis.
Cuando el último niño subió, soltó un suspiro y sacó su celular para sacar una última foto del hermoso edificio en el que habían estado hace algunos minutos.
- ¿Jimin? -Una conocida voz lo llamó y con sorpresa bajó su celular y miró al pelinegro a su lado.
-Hola,Yoongi. -Un pequeño sonrojo se pintó en sus mejillas y con timidez se acercó a él. Había estado deseando ver de nuevo al hombre que había conocido en el restaurante hace un par de días y se alegraba tanto de volverlo a ver.
-Hey. -Los finos labios del musculoso se posaron sobre una de sus mejillas, provocando que su sonrojo fuera en aumento. - ¿Qué haces por acá? -El pelinegro lo miró curioso y con emoción.
-Traje a mis alumnos a una excursión.
- ¿Alumnos?
-Oh, soy profesor de ballet en un estudio. -Con los nervios en todo su sistema, puso uno de sus cabellos detrás de su oreja, y aunque no quiso parecer coqueto, para Yoongi fue exactamente lo que le pareció.
- ¿Desde hace cuánto haces ballet? -El más alto solo podía sentirse encantado con esa información y por alguna razón le excitó saber eso, no tenía ni la menor idea del porqué, pero le parecía caliente.
-Desde los nueve o diez años.
-Toda tu vida al parecer.
-Se puede decir que sí, pero amo lo que hago, así que he disfrutado cada momento. -Una hermosa sonrisa se formó en sus labios y algo en el pecho de Yoongi se revolvió, no sabía qué era o el porqué se había sentido así, pero lo dejaría pasar, tenía otras cosas por las que preocuparse en ese momento.
Por ejemplo las deliciosas tetas que tenía jimin, joder, de solo verlas en ese escote le hacía imaginar tantos escenarios de él chupando y besando. Quería hacerlo gemir de placer y que le rogara que no se detuviera, algo dentro suyo deseaba al rubio.
- ¿A Woonie también le gusta el ballet? -Debía aparentar ser un hombre amable, no le gustaba, era molesto pretender ser alguien que no era, pero sabía que el lindo padre frente suyo no se entregaría a él solo porqué sí, podía tener las ganas, pero no haría nada.
Solo debía trabajar por lo que naturalmente le llegaba solo.
-La verdad es que no, dice que no es lo suyo. -Una pequeña risa salió de los labios de Jimin y como reflejo el pelinegro le sonrió.
- ¡Jimin! -Ambos adultos miraron hacia donde venía el llamado y a Yoongi no le gustó lo que vió. -Ya es tiempo de irnos. -Así como llegó se fue, desapareciendo dentro del autobús. Y aunque no fuera algo de su incumbencia, Min pudo jurar ver cómo ese imbécil le miraba los pechos al lindo rubio, no lo culpaba, él hacía lo mismo, pero era de conocimiento que Yoongi era una persona posesiva con las cosas que consideraba suyas y ese hombre lo sería.
-Fue un gusto volverte a ver, Yoongi. -Con timidez, se acercó a él y le dio un pequeño beso en la mejilla como despedida. Y por más que le hubiera gustado quedarse, sus acciones fueron más rápidas. Se dió la vuelta y subió al bus sin dejar al pelinegro responderle.
Lo hacía sentir nervioso y no le gustaba, ya no era un adolescente como para comportarse de esa forma, era un adulto que incluso tenía un hijo al que cuidar y amar.
No tenía tiempo para estar detrás de un hombre del que no sabe más que su nombre.
→→→→→→→
- ¿Qué tanto hacías que no volvías? -El pelinegro miró a su amigo con desinterés y continuó caminando hacia el final del gimnasio, en donde se encontraba su sala de descanso privada, ser el dueño del lugar le traía varios privilegios que amaba tener.
-Nada muy interesante la verdad. -Dejó la pequeña bolsa que traía en sus manos en uno de los muebles que se encontraban dentro de la habitación y con pereza se sentó en el sillón.
-Han dijo que te vió hablando con un caliente rubio.
- ¿Qué? -No pudo evitar que saliera de forma agresiva y brusca su pregunta.
-Palabras de Han. -Su amigo castaño alzó los hombros quitándole importancia y con una sonrisa se sentó a un lado de Min. -Ahora dime, ¿quién era? -Una juguetona sonrisa se formó en sus labios y con notable desinterés cogió uno de los snacks que habían en la bolsa.
-Lo conocí hace un par de días.
- ¿Y?
-Han tiene razón, es jodidamente caliente. -Se apoyó en el respaldo del asiento y con una sonrisa en sus labios recordó a jimin.
Ese hombre lo tenía mal desde el momento en que lo vió y eso lo enfermaba en cierta parte, no solía ponerse así de emocionado solo por un acostón, él no era así de desesperado.
Sabía que su reputación no era la mejor, había tenido numerosos escándalos sobre su vida sexual y lo activa que era, pero no lo podían culpar, era un hombre de 28 años que disfrutaba de su libertad y dinero.Se había esforzado por llegar donde estaba y tener todo lo que había obtenido, días, meses y años de esfuerzo que habían válido la pena. Quería disfrutar de todo sin restricciones.
Claro, tampoco era un imbécil, sabía que el estilo de vida que llevaba no era para siempre, en algún momento, si se le presentaba la oportunidad y estuviera lo bastante enamorado; dejaría su vida lujuriosa y fiestera para poder tener una relación estable y llena de esas mierdas cursis que veía en las películas, pero por ahora le gustaba como estaba.
- ¿Y qué harás? -Miró a su amigo y sin tener ninguna intención de ocultar sus deseos le respondió.
-Me lo follare, ¿que más haría, Namjoon? -Hizo girar sus ojos ante lo estúpido que se la hacia la pregunta. No quería tener una relación con ese rubio o algo por el estilo, sí, era agradable y le había gustado pasar tiempo con él, hablando y conociéndose, pero eso era todo, ahí se detenía cualquier sentimiento que pudiera surgir.
- ¿Estás seguro?
-Nam, me lo quiero follar, no casarme con él. -Ya cansado de la conversación con su amigo se levantó y salió de la sala en dirección al área de entrenamiento. Debía centrarse en lo que verdaderamente importaba.
Pero bien dicen que por la boca muere el pez.
→→→→→→→
Aquí el cap que prometi jejeje espero les guste y voten ^^
ESTÁS LEYENDO
Bᴇᴛᴛᴇʀ ᴍᴀɴ«ʏᴏᴏɴᴍɪɴ»|ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ|
Random🥊𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍━━━━━ 𝖩𝗂𝗆𝗂𝗇 𝖾𝗋𝖺 𝗉𝗋𝗈𝖿𝖾𝗌𝗈𝗋 𝖽𝖾 𝖻𝖺𝗅𝗅𝖾𝗍. 𝖸𝗈𝗈𝗇𝗀𝗂 𝖾𝗋𝖺 𝖻𝗈𝗑𝖾𝖺𝖽𝗈𝗋 𝗉𝗋𝗈𝖿𝖾𝗌𝗂𝗈𝗇𝖺𝗅. 𝖯𝖺𝗋𝗄 𝗌𝗈𝗅𝗈 𝗊𝗎𝗂𝖾𝗋𝗂𝖺 𝗌𝖾𝗋 𝖿𝖾𝗅𝗂𝗓 . 𝖬𝗂𝗇 𝗌𝗈𝗅𝗈 𝗊𝗎𝗂𝖾𝗋𝖾 𝗀𝖺𝗇𝖺𝗋. 𝖲𝗎𝗉𝗈𝗇𝗀𝗈 𝗊�...