EL HILO DEL DESTINO♥️ (KOOKMIN)

Capítulo 5 🧵

—Una fiesta —Dijo Bae, suspiro mientras veo la sonrisa en el rostro de Tae.

—Una fiesta... —Repito, dudo bastante responder, la verdad es que no me apetecía para nada.

—Vamos, por favor —Dijo mi mejor amigo, vuelvo a suspirar.

Nos encontrábamos en la cafetería, Tae estaba sentado delante de mí al igual que Bae, ambos llevaban unos minutos intentando convencerme de ir aquella fiesta. El chico de cabello rubio fue quien tuvo la idea, ya que según él no quería ir solo a la fiesta de cumpleaños de un familiar suyo.

—Por favor —Pidió de nuevo, miri a él y luego a Tae quien estaba con ambas manos en forma de ruego.

—Acepto —Respondo volviendo a suspirar, Tae pega un grito de felicidad ganándose algunas miradas de los empleados de la cafetería.

—Lo siento —Pidió Tae, con una pequeña reverencia haciendo que las personas dejaran de mirarlo y continuaran con su trabajo—. Que buen que aceptaste, hoy es noche de fiesta.

—Bueno, me tengo que ir, nos vemos a la noche —Bae se levantó con una sonrisa en su rostro y salió del lugar.

Loa siguientes en salir fuimos Tae y yo, lo acompañé donde siempre lo paso a buscar su padre. Esperamos alrededor de quince minutos hasta que vimos el vehículo negro de su padre acercándose, él se despidió al igual que yo y se marcharon, caminé hacia el lugar donde tomo el autobús.

Al llegar a mi casa suspiro mientras cierro la puerta, no soy una persona de fiestas, e ir a una me pone un poco nervioso. Miro el cuadro que está en la sala, me había olvidado unos minutos de él. Ya había pintado antes, pero esa pintura era diferente, yo la sentía diferente, para mi era especia, aunque no sabía por qué.

—¿Qué es lo que tienes que no puedes salir de mi cabeza? —Pregunté mirándola, aunque sabía que no me iba a responder.

Ignoro el simple hecho de no poder parar de pensar en la pintura o mas bien en el chico de esa pintura, camino hacia a mi habitación necesitaba darme una ducha, me desvisto y entro al agua cuando siento a esta recorrer todo mi cuerpo suspiro, todo lo que está sucediendo era bastante exhausto.

No tenía idea que solo era el comienzo.

Al terminar de ducharme, salgo y me visto con algo sencillo. Camino hacia el espejo y me observo bien, agarro el peine y comienzo a peinar mi cabello liso en forma de libro como siempre lo hago, me echo un poco de perfume olor a durazno y escucho el sonido de bocina de un vehículo.

Era Tae, habíamos quedado en que me pasaría a buscar. Tomo mis cosas y salgo a la puerta principal cierro esta misma antes de irme.

El sol ya se estaba ocultando, pero Tae y yo pasaríamos primero por Bae para luego ir hacia la fiesta, que por cierto nos quedaba como a una hora de viaje.

—Estas muy guapo —Dije, él me sonrió, y la verdad es que era cierto, Tae siempre alguien que le gustaba verse bien, siempre había algún compañero que nos hacían "bromas" diciendo que éramos pareja y no lo admitíamos en la universidad, pero nunca lo fuimos ni lo seremos, somo mas que dos mejores amigos, somos hermanos.

—¡Gracias Minnie! —Respondió—. Tú también estas muy lindo —Por cierto, Bae dijo que su novio no podía ir, pero que él irá igual porque lamentablemente tiene que presentarse.

—¿Acaso se lleva mal con su familiar? —Pregunto por pura curiosidad mientras miro por el vidrio del carro—. Y ¿Cómo hiciste para que tu padre te prestara el auto?

—Respondiendo a tu primera pregunta me dijo que sí, pero fue un problema de hace bastante tiempo, y bueno, me lo ha tenido que pagar —Respondió con una sonrisa.

Al llegar a la casa de Bae, que la verdad era bastante bonita, esperamos a que la puerta se abriera, cunado lo hizo, Bae salió de esta, tenía su cabello rubio arreglado, una ramera negra con una chaqueta, un pantalón también negro, y unos zapatos del mismo color, cualquiera que lo mirara podría pensar que iba a un velorio. Miré a Tae y al parecer él estaba pensando lo mismo que yo por lo que ambos sacamos una carcajada.

Aún así, Bae se veía muy lindo vestido de aquella manera, y su cabello rubio era lo que más llamaba la atención. El chico, se sentó en la parte de atrás del vehículo y nos sonrío.

—Hola —Saludo mientras buscaba en su chaqueta algo, cuando lo encontró pude ver que se trataba de su teléfono.

—Hola —Respondimos Tae y yo al unísono, sonreímos.

—Bueno chicos, en marcha antes de que salga mi madre y se ponga a preguntar con quién me voy a la fiesta y les pida dirección de sus casas, números de teléfonos, entre otras cosas —Bromeó causando que ambos comenzáramos a reír.

No tardó mucho para mi mejor amigo ponga en marcha el carro, pasamos todo el camino hablando de cosas casuales, como algunas cosas de la universidad, profesores que odiamos en común, materias, etc. Cualquier persona que nos viera así pensaría que los tres nos conocemos hace años por la confianza que había, pero no era así, yo solo conocía a Tae, ya ambos comenzamos a hablar con Bae hoy.

Demoramos aproximadamente una hora en llegar a la casa del familiar de Bae, el chico nos dijo que nos quedáramos tranquilos que el tema con su familiar ya estaba arreglado, y que no hay nada malo entre ellos dos, solo que él no se olvida de las cosas del pasado y aún sigue un poquito molesto.

—Llegamos, es aquí —Dijo mirando la casa en la cual se escuchaba la música a todo volumen.

—Por lo que veo tendremos una noche divertida —Podía ver la diversión que tenía Tae, él si era de fiestas, yo no. Espero que esta noche no sea tan mala—. Estacionaré el auto aquí —Dijo mientras frenaba el coche donde estaban los otros autos, para nuestra suerte había lugar libre.

Cuando entramos a la fiesta, y vi la multitud de gente que había allí dentro, sentí ganas de vomitar, no obstante, lo ignoré y caminamos con Tae detrás de Bae, quien parecía conocer bastante la casa. Al entrar a la cocina nos dimos cuenta que en ella había una chica bastante triste ¿Los efectos del alcohol? Me pregunté, aunque no parecía haber estado bebiendo antes.

—Hola, mi nombre es Baekhyun —Dijo tendiéndole la mano de manera formal para saludarla, ella sonrió y la aceptó.