Dante
Cuando amas a alguien, te aventuras por un sendero incierto, sabiendo que el corazón puede resultar herido. Lo nuestro, lo intuí desde el principio, no era una historia convencional. Ella y yo éramos como dos constelaciones distantes, brillando en universos separados.
A pesar de las diferencias, me aferré a la esperanza. Quise ser parte de su mundo y, egoístamente, deseé que ella también formara parte del mío. Pero la realidad es implacable: hay ocasiones en que dos mundos no pueden fusionarse sin desgarrarse en el proceso.
¿Cómo alejarte de alguien a quien amó con intensidad?
¿Cómo se borra una historia que dejó huellas profundas en el alma?
Gwen
Ella era luz, y yo, la sombra que se aferraba a su resplandor. A simple vista, podríamos haber sido el Yin y el Yang, dos fuerzas opuestas que se complementan. Pero la realidad es más compleja: no éramos la armonía perfecta, sino un torbellino de contrastes.
Tardé en comprender que ella era la única capaz de domar mis demonios internos. En su presencia, las tormentas que rugían dentro de mí se aquietaban, como si su amor fuera un bálsamo para mi alma atormentada. Solo ella tenía la llave para abrir las puertas de mi calma, y yo, atrapada en su luz, me dejaba llevar.
Era todo lo que estaba bien para mí. Sus risas eran el eco de la felicidad en mi corazón, y sus abrazos, un refugio contra la oscuridad que amenazaba con devorarme.
No había nadie más capaz de despertar en mí esa mezcla de vulnerabilidad y fortaleza. Ella, con su ternura y su valentía, se convirtió en mi faro en medio de la tormenta.
Pero, ¿Cómo se deja ir a alguien que se ha convertido en la razón de tu existencia?
¿Cómo rompes los lazos que te atan a esa luz, incluso cuando tus propios demonios intentan detenerte?
Dante
Las memorias persisten, como estrellas que siguen brillando aunque su luz haya viajado miles de años hasta llegar a nuestros ojos.
Quizás la respuesta está en aceptar que algunos amores son como cometas fugaces: brillan intensamente durante un instante y luego se desvanecen en la vastedad del cielo. No podemos borrar la historia, pero sí podemos aprender a vivir con ella, a apreciarla como parte de nuestra constelación personal.
Así que, con el corazón apretado, seguimos adelante. Nos alejamos, pero las estrellas que compartimos seguirán titilando en la noche, recordándonos que alguna vez fuimos parte de un mismo universo. Y tal vez, solo tal vez, eso sea suficiente para seguir caminando bajo el cielo estrellado.
Gwen
Me negaba a soltarla, a pesar de las advertencias silenciosas que resonaban en mi interior.En un instante, todo cambió. Pasé de tenerlo todo a enfrentarme al vacío. El castigo no vino de afuera, sino de mi propia alma. Perderla fue como arrancarme una parte de mí misma, como si hubiera entregado mi felicidad en un altar y luego me la arrebataran sin piedad.
A veces, el amor es una paradoja dolorosa. Nos da vida y nos arrebata el aliento.
Nos hace sentir completos y, al mismo tiempo, vulnerables.
Así que, con el corazón en pedazos, aprendí a soltarla. Agradecí cada instante compartido, cada risa, cada lágrima. Y mientras las estrellas titilaban en la noche, su recuerdo se convirtió en mi constelación personal.
Aunque ya no estuviera a mi lado, su luz seguiría guiándome en la oscuridad...
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Legacy Of Shadows "Amor y Secretos en las Sombras" [+18]
Science FictionDante, una mujer atormentada por su pasado, se debate entre dos fuerzas irresistibles: el amor que siente por Gwen y la amenaza que ella representa para su propia alma. Gwen, por su parte, es una mujer marcada por un linaje ancestral, un vínculo con...