Infierno día 1

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Marcó en su calendario, Yeonjun se había ido temprano así que Soobin se acomodó en la cama que se suponía sería de ambos para poder dormir y no tener problemas cuando las grabaciones empezaran, se sentía tan cálido y cómodo que se quedó dormido casi de inmediato.

— Mi amor despiértate — dijeron a su oído, pero no era ella.

Lo empujó haciéndolo caer al suelo con una expresión de pocos amigos que luego se volvió una sonrisa, su corazón saltaba en su pecho buscando salirse tal vez.

— Ah, lamento haberte asustado amor — dijo Yeonjun acercándose de nuevo, lo abrazó pero se apartó — ¿qué te pasa cariño?

Soobin salió hacia el baño desesperado, necesitaba tomar un poco de aire, la tensión y ansiedad en su cuerpo bajaban un poco pero era horrible la sensación de ahogo en su pobre cabeza y su nariz que apenas podía funcionar bien del todo.

— ¿Soobin?

— Ya voy solo... — trató de que el llanto que amenazaba con salir no cumpliera su amenaza — solo que me duele el estómago perdón.

— Está bien cariño.

Odiaba ese sobrenombre, se sentía tan vacío y a la vez... extrañamente cálido, abrió la puerta con cuidado, ya no estaba, suspiró buscando su ropa, se quitó la camisa en silencio para luego buscar una en la maleta, no encontraba aquella color carmesí con mangas medio cortas, supuso que la dejó en la otra maleta, revisó viendo hacia la puerta donde estaba Yeonjun vie...

El de cabello naranja se retiró de allí con los ojos tan abiertos que si loa abría más se romperían, su cara estaba colorada, sus mejillas calientes y con un tono rosáceo, llevaba meses sin ver un cuerpo ajeno, en especial de esa manera.

Bajó a la cocina tomando un vaso con agua, necesitaba calmarse, se recordaba a sí mismo que Soobin era idiota, que lo había hecho golpearse a plena mañana, que lo hartaba.

— Es precioso — soltó en un susurro pero se golpeó la boca.

— Y ahora que te pasa ¿enloqueciste en el primer día? — dijo Soobin sentándose en la silla del desayunador.

Yeonjun no podía dejar de pensar en lo que vio, Soobin tampoco pero fingir se le daba tan bien que incluso llegaba a creérselas el solo, Yeonjun sonrió y le lanzó un beso.

— Me emocioné de solo verte mi amor.

Soobin lo miró haciendo una mueca de asco, Yeonjun sentía ganas de darle el desayuno de una forma especial, con clavos y martillando los panques en sus manos, no, eso era demasiado.

Soobin pasó a la refrigeradora a buscar leche, una vez fuera buscó en la alacena un cereal, se asustó cuando un par de brazos rodearon su cintura haciendo que dejara caer la caja con leche en el suelo abriéndose y dejando todo tirado en el suelo.

— ¡No puedes cuidar la comida idiota! — gritó Yeonjun, trató de calmarse recordando que estaba en televisión.

— ¡No me toques entonces!

— Lo siento cariño solo pensaba que... que no estabas molesto por lo de la ropa.

¿Qué dem...

—Solo quiero desayunar en paz.

Se alejó para buscar algo para limpiar, volvió con un trapeador que pasó sobre la leche derramada y luego dejó todo de nuevo limpio aunque Yeonjun no estuvo allí para verlo, tomó una caja con jugo que había y lo empezó a tomar.

— Ya te dije que no bebas de la caja — dijo Yeonjun volviendo a la cocina, llevaba un abrigo y pantalón color crema, bastante elegante en realidad.

Marriage StoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora