¡𝑺𝑶𝑳𝑶 𝑸𝑼𝑰𝑬𝑹𝑶 𝑸𝑼𝑬 𝑨𝑳𝑮𝑼𝑰𝑬𝑵 𝑴𝑬 𝑨𝑴𝑬! ||Adam||

🍃Capítulo 3.🍃

Lo primero que pensó Adam cuando iba a morir, era que podría descansar en paz.

Que equivocado estaba.

Apenas piso el suelo, fue recibido por los arcángeles, quienes les explicaban todo lo necesario. Incluso sus roles:

San Rafael, arcángel responsable de las curaciones, restaurar la salud física y espiritual, apodado como "patrón de los peregrinos" o "sanador de dios".

Su tamaño como sus facciones parecen la de un niño de 14 años, pelo gris un poco más larga que lucifer o Miguel, ojos grises con pupilas blancas, tiene algunas pecas y su piel es blanca como sus hermanos. Tiene una chaqueta blanca con bordes dorados, hasta los tobillos, pantalones blancos, botas negras de cuero y una bufanda blanca con puntas doradas a los lados. Tiene agarrado su báculo de oro, con serpientes y alas, en la punta se encuentran una esfera de luz.

San Gabriel el "Angélico de dios", quien se encarga de dar los mensajes de dios a determinadas en el mundo humano.

Pelo rubio casi llegando al color albino hasta la cintura, tiene los mismo ojos que Miguel. Su vestimenta conlleva un traje celeste pastel con mangas y camisa azul, pantalones grises como sus zapatos. No tiene tantos detalles como sus hermanos, prefiere lo sencillo para su trabajo aunque casi siempre usa maquillaje para sentirse destacado de una forma u otra.

Por último pero no menos importante, el guardián de Adam y arcángel superior:

San Miguel, el encargado de enfrentar aquellos que oponen la voluntad de Dios, como Lucifer. Cumple casi lo mismas tareas que dios, encargado del cielo cuando dios se ausenta.

Después están otros seres superiores que Adam todavía desconocía.

Rafael: ¡Verás que el cielo es un lugar maravilloso!-da un pequeño salto el arcangel  pelo gris, haciendo que su hermano Gabriel sonría. Este último se encontraba un poco más alejado de ellos.-papá lo creo para nosotros al principio pero después decidió que podrían venir aquellos que lo merezcan.

Adam: es un lindo lugar.-mira a su alrededor. Tan limpio e iluminado.-me siento indigno estar aquí.

Gabriel: padre decidió que estarías aquí, Adam.-como siempre mantiene su postura seria y fría. Se coloca al lado del primer humano.-él vió que merecías tener paz, después de tanto viaje en tu vida humana.

Rafael: aparte tiene curiosidad sobre el por qué no se despertó tu segundo género.-se coloca en frente del castaño, sonriendo y coloca sus manos en las caderas.-él cree que eres beta pero yo sé que no~

Adam: ¿Eh?

Rafael: Miguel te explicó, ¿No?-escoge los hombros, dando media vuelta y retoma su camino.-sobre los alfas, betas y omegas.

Adam: si...me habló de algo pero no le tomé tanta importancia.

Gabriel: Lilith fue alfa.

El sanador de dios hace una mueca, mirando a su hermano preocupado por nombrar a esa mujer. Mira de reojo al primer humano, quien baja la mirada, dejando de caminar.

Iba a regañar a su hermano por la falta de tacto.

Adam: eso significa...-aprieta los puños y mira a ambos algo dolido por el reciente descubrimiento.-ella...

Gabriel: es dominante Adam, nunca hubiera funcionado entre ustedes.

Rafael: wooow que buena manera de decir las cosas hermano.-mira enojado al angélico de dios, antes de agarrar las manos de Adam.-oye al menos...existe Eva, es beta pero no importa, ustedes se aman ¿verdad?

El castaño iba a contestar pero una paloma aparece, colocándose en el hombro de Gabriel, mirando unos segundos antes de salir volando el animal.

Gabriel: Miguel me necesita.-hace aparecer sus grandes alas. Blancas y las puntas de sus plumas doradas. Tan majestuosa y digno de un arcángel.-nos vemos.

Rafael: espero que no sea nada grave.-susurra, al ver a su hermano alejándose a gran velocidad. Voltea a ver al castaño con una sonrisa.-¡Bien!, tenemos que ir a ver tu nuevo hogar.

Agarra su mano para acelerar un poco los pasos. Adam ignora las palabras de su guía, mirando a donde se fue Gabriel, teniendo un mal presentimiento, solo esperaba que no lo involucren por ahora en cualquier cosa, necesitaba tener su m-

Rafael: ¡Aparte dios vendrá y podríamos pasar tiempo juntos!, a él le gust-

Adam: ¿Dios vendrá?

Rafael: ¡Claro!-suelta la mano del castaño.-cierto que lo verás físicamente por primera vez.

Ahora si que perdió la esperanza de tener un día tranquilo.

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Horas después...
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Adam termino de recorrer su nuevo hogar, una gran casa para él y cuando su familia ingresen al cielo. Una casa moderna que no está acostumbrado el primer humano, nunca vió algo asi pero sabía que el cielo ya están muy adelantados para su época.

Baja de las escaleras con lentitud. Viendo

Un cuerpo de casi 3 metros se encontraba con el arcángel. Su piel es blanco como papel, 4 ojos están flotando a los lados de la cabeza y portaba una gran sonrisa. Su atuendo consiste: un sombrero de copa blanca con un listón de oro, traje pegado al cuerpo blanco con mangas de oro, y algún que otro detalle del mismo material, guantes negros y finalizando una capa que tocaba el suelo, donde en las puntas tiene plumas, la parte exterior blanca y la inferior se muestra el cielo estrellado.

El castaño acomoda su pelo y sacude un poco su túnica, quitando el polvo imaginario. Respira hondo, diciendo a sí mismo que se calme y se acerca con una pequeña sonrisa.

El arcangel sonríe, acercándose hacia el ángel, les coloca las manos en sus hombros y mira al gran ser.

Rafael: Adam.-el de sombrero de copa sonríe, achicando un poco los ojos.-te presento a mi papá, Dios.

Dios: hola Adam.

El nombrado se queda mudo por la voz suave y cálida, es como si su tono estuviera limpiando su alma ahora, dando tranquilidad. Tose un poco, aclarando la voz y así entiendo con la cabeza.

Adam: estoy honrado de conocerlo finalmente, señor.

Dios: me hace feliz escuchar eso, hijo.-da dos pequeñas palmadas en la cabeza del primer humano, haciendo que este se sonroje.-me hubiera gustado venir con buenas noticias pero...

creo que necesitas saber algo.

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Continuará...
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