Eros, Dios del amor y del deseo sexual
Habíamos ido a vivir con papá hace poco, la verdad me sentía más cómodo y feliz, hoy, no sé porque pero Zeus le pidió a papá que lo fuera a ver, él fue y nos pidió cuidar a Atenea, cosa que Anteros y yo aceptamos
- ¿Cómo se encuentran?¿Sus heridas ya sanan? - nos preguntó Atenea mientras Anteros movía sus alas a gran dificultad y yo comía algunas uvas
- Bien, papá se ha vuelto muy bueno a la hora de curar heridas y demás cosas - dije sentándome, porque Anteros me indicó que lo hiciera
- Espero que Zeus no sea tan cobarde como para matarle cuando no lleva su lanza y está más pacífico que cualquier otro - dijo Anteros sentándose a mi lado en el sofá de mi padre
- ¿Y ya tienen en dónde quedarse? - nos preguntó Atenea viéndonos, Anteros y yo nos miramos y la volvimos a mirar - ¿No tienen en dónde verdad? - no puedo creer que fuéramos tan obvios
- No....No podemos volver al templo de mi madre ya que de seguro nos mata o nos maltratará, en tu templo tampoco podemos estar ya que tus hermanos andan yendo allí en cualquier momento en el que están libres - Anteros volvió a hablar cogiendo algunas uvas
- ¿Y no pueden ir con Deméter? - negamos - ¿Hestia? - volvimos a negar - Es que no se pueden quedar aquí ya que mi padre manda mucho a Hermes o Apolo para que vengan a asegurar que estoy sanando - Atenea nos explicó
- ¿Y cómo cuántas veces por semana los manda? - pregunté, quería quedarme allí al menos hasta que mis alas y las de Anteros sanarán
- Seis por semana y por día ya son tres o cuatro.... - volvió a decir, Anteros se levantó y se acercó a la puerta
Atenea y yo lo miramos raro, ¿Por qué hacía eso? Nos indicó que nos callaramos y asentimos, después abrió la puerta y entró papá enojado, nos sorprendidos, no notamos su divinidad pero él sí, al cerrar la puerta Anteros, Atenea se acercó a él
- ¿Qué te sucede?¿Qué te dijo padre? - preguntó preocupada, yo también me levanté y me acerque
- Me dijo que me preparara para un casamiento y lo peor es que mi madre no dijo nada, solo asentía a cada estupidez que decía ese hombre - hablaba calmado, pero se notaba su enojo
- ¿Y con quién te pidió que te casarás? - Anteros preguntó acercándose, mi padre hizo señas y Anteros asintió, Atenea y yo nos volvimos a mirar confundidos, ¿Desde cuándo se entendían? - Te está obligando a casarte con una carité ¿Verdad? - dijo, ambos nos sorprendimos, ¿Una carité? Me acerque más a papá sorprendido
- ¿Con cuál? - pregunté un poco asustado, las cárites trabajan para Afrodita
- Con Talía, como Hefesto está casado con Aglaya, me obliga a casarme con esa carité - dijo tan molesto y se sentó en su sofá
- ¿Y Hera enserio accedió? - él solo asintió ante la pregunta de Atenea - Eso es nuevo en ella.... - dijo sentándose al lado de papá
Anteros y yo nos miramos, sabíamos que mamá había sido la que le pidió a Zeus lo hiciera para no estar junto a Atenea, iba a hablar, pero Anteros me calló
- Iremos a pasear para saber en dónde nos quedaremos - dijo sonriente mientras me alejaba de allí
- ¿Si Zeus o Afrodita los ve? - preguntó papá, yo miré a Anteros - ¿Qué harán? -
- No te preocupes papá, en el poco tiempo que estuvimos aquí aprendí algo sobre defensa, protegeré a Eros - él sonrió y yo también, no suele decir eso a menudo
- No tarden ni se metan en problemas - Anteros asintió mientras me sacaba de aquel lugar, al estar un poco lejos del templo de papá lo paré
- ¿A dónde vamos? - pregunté intrigado, él odiaba salir y no salía si no era importante, él me señaló al templo de Hefesto, me extrañé y lo volví a mirar - ¿Estás mal o qué? - pregunté un poco dudoso, Hefesto nos guardaba un poco de rencor y más a mí ya que fuí la causa del separó entre mamá y él...
- No vamos a hablar con Hefesto, vamos a hablar con su esposa - me dijo empezando a caminar hacia allí, yo lo seguía casi a la misma altura - si queremos saber de la prometida esposa futura de papá, ¿Quién mejor que su hermana menor? - sonrió y empezó a correr un poco
Ambos llegamos al templo de Hefesto, tocamos la puerta y nos abrió Aglaya, entramos y ella nos llevó al jardín, se la notaba confundida, pero igual se calmó al ver a Anteros hablar con señas, tengo que aprender ese idioma en cuanto antes
- ¿Así que Zeus está obligando a la menor de mis hermanas a casarse con Ares por el simple hecho de que no quiere que sea feliz? - ella preguntó y ambos asentimos - Y ustedes quieren que yo vaya y le diga a Talía que no se case con Ares ¿Verdad? - volvimos a asentir
- Esperamos que funcione, papá se está enamorando de Atenea y si le hacen la vida miserable, volverá a empezar con las guerras mortales - Anteros hablaba ya como si papá y él hubieran tenido una charla personal entre padre e hijo
- ¿Y si engaña a Talía? Aunque Zeus o Talía no vayan a romper el compromiso, no quiero que la engañe, es la menor de todas y no me gustaría verla sufrir - volvió a hacer señas, yo lo mire indignado, ¿De qué no quería que me enterará? - ¿Cómo puedo confiar en su padre? - Aglaya se levantó y Anteros volvió a hacer señas pero está vez más complicadas - Bien, trato hecho y ahora vayanse, mi esposo está por llegar - ambos asentimos y nos fuimos
Por el camino nos encontramos a Hefesto al cual saludamos y nos devolvió el saludo, raro en él, durante el camino sentí la mirada de Apolo, la forma en la que me miró cuando no recibí ningún castigo por lo de Daphne, Anteros agarró mi mano y siguió caminando hacia el templo de papá
ESTÁS LEYENDO
¿ℙ𝕠𝕣 𝕢𝕦é 𝕥𝕖 𝕕𝕖𝕤𝕖𝕠? - 1st -
RomanceAtenea, siempre fue la hija favorita de Zeus, opacando a muchos otros hijos del mismo Pero cuando se da cuenta que su vida tiene sentido gracias a un dios que siempre trataba de eliminarla, dejará su lado egoísta y se enamorará de él Aunque los conf...