Al llegar rentaron una palapa para dos personas.
Por lo que ya no hizo falta la sombrilla que china trajo cargando desde la cabaña.
Luego de un poco de burla por parte de USA y un pequeño sape en respuesta de China, el rubio corrió feliz a la orilla del mar.
El gringo jugaba en la orilla de la playa, mojaba sus pies con las olas más pequeñas que llegaban a la playa.
El agua fría lo hacía dar saltitos y retroceder en busca de la fuerza suficiente como para adentrarse más y más en el agua.
China por su parte lo miraba enternecido desde su asiento a la sombra de la palapa.
Le daba ternura ver cómo el Omega rubio se reía y soltaba pequeños gritos por lo fría del agua.
—Realmente es hermoso.. — dijo para si mismo el asiático. Estaba encantado con las actitudes de USA.
Pasaron los minutos y ya por fin nuestro gringo se había aclimatado a la temperatura del agua.
China suspiraba al verlo sumergirse y aparecer en el mismo lugar, le encantaba ver la felicidad del americano al jugar en agua.
En más de una ocasión se atrapó a si mismo mirando como la ropa mojada se le pegaba al cuerpo del estadounidense.
El agua se encargó de dejar poco a la imaginación del asiático.
Se reprendió a si mismo por mirar a USA con ojos de deseó.
¡Pero no podía evitarlo!
Las longitas de Usa, su pecho abultado por el sobrepeso, sus mejillas rojas por jugar en el sol y su piel mojada que imitaba el sudor de ....
¡Relájate China!
Podía sentir sus pequeños colmillos cresiendo de apoco su boca.
Podía sentir incluso como su cuerpo soltaba feromonas. Pero el olor no le llegaba a USA ya que la brisa del mar hacia que el olor se dispersara en la distancia.
El asiático para calmar sus ansías, decidió dejar en su silla el sombrero y la bata con la que se cubría del sol.
Camino una distancia considerable, y se metió sin tomar se el tiempo de acostumbrar a su cuerpo a la temperatura del agua.
Termino temblando por lo fría del agua pero logro desaserse de la imagen mental del gringo que lo ponía tan mal.
Por otra parte, Usa se extraño al ver a china, a lo lejos.
¿Acaso no quería estar cerca suyo?. Pensó un triste estadounidense.
Se quedó unos minutos en su sitio hasta que se armó de valor y decidió acercarse a China.
En su camino miraba la arena bajo el agua, si encontraba una conchita bonita se la daría a china.
Pero ningúna le convenció.
A los pocos metros, se frenó, contemplando la delicada figura del asiático.
Su cabello negro suelto larguísimo, las puntas moviendose siguiendo las corrientes marinas.
El traje de baño que entallaba su cintura y el encaje de la blusa de baño que se señia mojado a su piel dibujando los patrones de flores.
USA solo pudo pasar un poco de saliba para intentar hacer se reaccionar a si mismo.
—C-china . . . — intento llamar la atención del asiático.
—hum?— volteo de inmediato el asiático, perdiendo se así mismo ante la persona que tenía enfrente.
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De "Puta Gorda" ha "Hamburguesita"
FanfictionEstá historia no va a tener un rumbo fijo, solo va a funcionar conforme me sienta. el protagonista.va a ser USA y a veces lo haré reír, otras llorar o sufrir uwu. entonces así que si quieres saber más o menos de lo que va a tratar, pues lo primero...