CAPÍTULO XV - RECUPERAR

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Mariana salió corriendo de aquel lugar, aquel que en algún momento llegó a considerar su hogar, abandonando todo lo que había construido, reformado y creado todos estos meses, dejando de lado sus animales y responsabilidades con tal de regresar con el amor de su vida: Foolish.

—¿Por qué tenía que romper todos mis transportadores?— se maldecía al estar corriendo entre la inmensa tormenta. —Ojalá me hubiera dado cuenta antes, así podía haberle pedido uno a Vegetta...— bufo pesadamente, ya había avanzado un buen tramo, así que el regresar ya no era opción. —Me tomará horas llegar a-... ¡Puta madre!— estaba tan metido en sus quejas que no se había percatado del lago delante suyo.

Estaba por maldecir una y otra vez a su mala suerte, pero al darse cuenta de que en realidad no valdría mucho la pena, terminó por agarrar bien sus cosas antes de nadar hacia la orilla, esperando que ningún monstruo estuviera cerca o sino podría ser perjudicial.

—¿Debería ir a un pueblo hasta que pase la tormenta o debería hacer lo que ya había planeado?...— pensó al refugiarse debajo de un árbol, exprimiendo su ropa completamente mojada mientras temblaba de frío, mirando a su alrededor esperando poder ver algo cercano a su entorno, pero gracias a la tormenta no podía distinguir mucho, aunque sabía que en realidad nunca estuvo cerca de nada ni nadie. —¿Qué es eso?...— sin embargo había algo nuevo, algo que no había visto antes, tomando la decisión de acercarse hasta ello para ver de qué se trataba. —¿Son vías de tren?— una ola de esperanza comenzó a invadir su ser, parecía que quizás no tenía que recurrir a los extremos y para su buena fortuna el tren estaba por pasar frente a él. —Es ahora o nunca...— estaba dispuesto a saltar y así poder ser llevado a su destino... Sin embargo una nueva duda se sembró dentro de su ser. —¿Y si no va en la dirección que necesito?...— se quedó estático, pensando si de verdad valía la pena arriesgarse o solo seguir con su plan anterior.

Los segundos pasaban, el tren se acercaba y con ello nuevas dudas llegaban, haciendo que sus nervios aumentaran más de lo esperado, al final fue más su duda y solo pudo observar como el tren se alejaba cada vez más de él hasta que por fin lo perdió de vista.

—No puedo arriesgarme...— suspiro resignadamente antes de sacar un objeto de su mochila. —Menos mal que tome esto de las cosas de Vegetta— susurro mientras miraba aquella botella con un líquido azul dentro de ella. —Si es por Foolish, todo vale la pena...— sin esperar más destapó aquel objeto antes de comenzar a beber el líquido con desesperación, sintiendo como su cuerpo comenzaba a temblar apenas terminó de beberlo por completo. —Es ahora o nunca...— tomó fuertemente sus cosas antes de comenzar a correr con una rapidez inhumana.

Ya que la poción que había degustado era de rapidez, aquella que puede sacarte de un apuro y así poder llegar pronto a tu destino... Sin embargo seguía teniendo sus contras, ya que al gastar toda energía en correr podría agotarse e incluso llegar al grado de desmayarse por cortos periodos de tiempo en el peor de los casos, pero eso era algo que Mariana sabía y aun así quería correr el riesgo con tal de ver por fin a su amado.

—Ya voy Fool, ya voy...—




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Habían pasado horas en las que Mariana sólo se dispuso a correr y correr, algo que lo dejaría agotado en cuestión de minutos, pero para su buena fortuna aquella pócima no había perdido el efecto.

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