𝑴𝒚 𝑽𝒊𝒍𝒍𝒂𝒊𝒏 / 𝕋𝕒𝕞𝕒𝕜𝕚 𝕪 𝕋𝕦

~Capítulo 19~

Pov Narradora 

Contuviste aquellas ganas de vomitar producto del nauseabundo olor que salió al abrir la puerta. Tantas veces que habías estado en ese pequeño bar proclamado "guarida" y seguías sin acostumbrarte a la penumbra que emanaba este. 

—Que alegria verte de nuevo, Samishī—. Habló este interceptándote al entrar. 

—No podría decir lo mismo, Dabi—. El pelinegro no pudo vislumbrar ningún tono de sarcasmo o jugueteo en tu voz. Lo dijiste con tal descaro que Shigaraki se puso alerta. 

—Creo que, dadas las circunstancias en la que estamos, deberás acostumbrarte a tus compañeros—. Dijo este, sentado en aquella silla de barra como siempre y una torre hecha de cartas poker a su lado. 

—Eso dependera de mi, Shigaraki. Muy bien sabes que nuestra relación es netamente profesional. 

Viste como el peliazul se apoyaba en su mano con mucho cuidado de no destruir su torre. 

—Vaya, pensaba que, ya que vamos a destruir a la sociedad juntos, un poco de cariño entre nosotros no vendría mal—. Su tono juguetón te irritaba, tanto que, en ocasiones, fuiste incapaz de contener tu enojo y lo atacaste verbalmente. Te contuviste. Miraste aquellos ojos rojos a través de esa tétrica mano y los sentenciaste; ahora tenías a quienes cuidar y ya que tus sentimientos no alcanzaban, tu vida si lo haría.

—Lastima que eso no sucederá—Comentaste con seria calma—. Ahora...—te cruzaste de brazos y miraste a todos los presentes—no tengo mucho tiempo, así que ¿para que me llamaste? 

Sentiste una mano acariciar la parte de tu pelo y luego el frío filo de una hoja rozar tu nuca y cortar unos cuantos vellos que se encontraban allí. Un escalofrío te recorrió la espalda.

—Tu siempre tan apurada Samishī-chan—. Sentiste como ella se acercaba poco a poco al lóbulo de tu oreja—. Compartamos mas tiempo juntas, ahora estas tan ocupada...—Sabías lo que iba a pasar, pero aun así los colmillos clavado es tu oreja provocaron un sobresalto en tu cuerpo— ¡Ahhh! ¡Extrañaba tanto tu sangre!—Sus tono de regocijo te irritaba. 

Te acercaste a Shigaraki y con una mirada retadora, acompañada de un fuerte golpe sobre el mesón, te sentaste en el taburete frente a él. 

—Que esto acabe rápido—. Le amenazaste. 

Él sonrió con malicia, pero luego aquella mueca desapareció. 

—Iremos a visitar la U.A—. Dijo sin más. 

Entendías perfectamente el significado de "visitar" un lugar. 

—Lo miraste con una ceja levantada—. ¿Ah, sí? Parece que te interesa mucho. 

Él soltó una risilla. 

—Tu sabes perfectamente que es lo que nos interesa allá...

—No es Eri, ¿verdad? Ya que le arrancaste los brazos a Chisaki. 

Si bien la distancia que los separaba era corta, Shigaraki se encargo de disminuirla aún mas. Ahora sus rostro estaban casi pegados. 

—Siempre te has empeñado en hacerte la imbécil cuando te conviene...en cierta parte—se alejó—es bueno. 

—¿Entonces cuál es el problema? 

—Que no puedo confiar en ti. 

Al escucharlo le sonreíste con suficiencia. 

—¿Acaso eso es necesario? Con amenazas consigues todo lo que quieres...

Viste como su mano se acercaba a tu cabello y, al tocarlo, un mechón de este se desintegró volviéndose polvo—. Me conoces tan bien...—. Alejó su mano y la regresó a su lugar inicial—. Lo conoces, ¿verdad? Has interactuado con él.