La guarda espalda.

Cap.25

Capítulo 25.
"Hacke mate"

Narra Lauren.

Las pruebas incriminatorias estaban listas, Ariel de alguna manera muy intensa quería meter en prisión a Alejandro, tanto o más que yo.

Me preocupaba un poco el hecho de enfrentarlo pero si quería una vida con camila entonces debía asegurarme de que el se pudriera en prisión.

-Lauren-

Me gire, mi querida Camila ya estaba despierta. -Buen día cariño-

-¿A donde vas y porque estas tan arreglada?-

Me acerque a la cama, no estaba arreglada como ella decía. Simplemente saldríamos para obtener algunos informes sobre el asesinato de sinuhe.

-Saldremos cariño- toque su rostro -Nos iremos pronto de este lugar, es momento de enfrentar a Alejandro-

-No quiero- se lanzó encima de mi, abrazándome con dulzura. Su olor corporal natural era una delicia.

-Yo te voy a cuidar y lo sabes bien- susurre mientras la protegía con mis brazos -¿Quieres desayunar?-

-Quiero hacerte una pregunta nada más-

Camila estaba actuando un poco extraña. -¿Qué sucede cariño?-

Me miró fijamente -Esta tal Ariel.. ¿porque te ayuda tanto?-

Esa pregunta ya me la había hecho, también sabía la respuesta.

-Lauren eh notado que esa mujer te mira con ojos de deseo, trata de disimularlo pero no puede. Te ofrece su ayuda, sus recursos y demás pero ¿a cambio de que?-

Se levantó de la cama y fue al baño. La seguí hasta dentro y se lavo el rostro.

-Siento que al final te cobrará con creces y de solo pensarlo me molesto un poco.. quiero qué le preguntes ¿de cuanto es la deuda que tienes con ella por su ayuda? De esta manera yo saldare la deuda-

Me volvió a abrazar -¿Te has acostado con ella?-

Sabía que esa pregunta llegaría tarde o temprano.

-Lauren ¿Te acostaste con ella?-

-Si, fue cuando estuve con ese club de mala muerte. Sinceramente no quería pero-

-Entiendo.. sinceramente ya no importa- me tomó de la mano y llevo a la cama, me empujó a tal grado que caí acostada, se monto encima de mi y comenzó a moverse sobre mi polla.

Sentí como se calentaba rápidamente mi cuerpo, mi polla y todo mi ser.

-Escuchame Lauren- me tomó del cuello y siguió moviéndose encima de mi, sentía como mi polla se ponía dura y comenzaba a palpitar -Jamás debes acostarte con nadie que no sea yo ¿entiendes?-

Quería asentir, pero el deseo inexplicable de su intimidad rosandome me lo impedía.

-Debes repetir esto.. Le pertenezco a Camila- sus manos abrieron mi pantalón, bajaron el cierre y comenzó a tocar mi polla ya erecta con tal descaro que sinceramente no podía emitir palabra alguna. -Repitelo.. Le pertenezco a Camila-

-Le..pertenezco a- mi mente se nubló en deseo pues sus manos estaban empuñando mi polla, lentamente de arriba a abajo, sentía arder mi cuerpo entero. Sentí su saliva resbalar por mi glande y su dedo pulsar presionar con suavidad.