CAP 10

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-Hola, claro adelante-.

-Gracias es realmente horrible entrar a una escuela nueva cuando ya empezaron clases hace un buen tiempo-.

-Por cierto es un gusto soy Gabriel-. Le extiende la mano.

-Lo se, estas en mi clase, un gusto Aziraphel-. Le estrecha la mano para responderle.

Al rato entra en la cafetería Crowley y se hiba a dirigir junto a su ángel pero antes noto que el tipo de esta mañana estaba sentado hablando con él, y realmente parecían llevarse bien, Aziraphel se miraba muy feliz, lo que hizo que una pequeña chispa de celos se encendiera en Crowley, él quería que su ángel estuviera alegre pero no pudo evitar tener esos sentimientos.

-Hola ángel, ya volvi- se sentó al lado de Aziraphel y justo al frente de Gabriel.

-Crowley, él es Gabriel, Gabriel el es Crowley-.

-Un gusto-.

-Si, igual-. Dijo con un poco de molestia, una así muy disimuladamente lo que hizo que Azira no lo notará.

Crowley solía ser muy sobreprotector con sus cosas y con las personas que le importaba asi que que Gabriel estuviera allí le molestaba un poco, no sabía porque exactamente pero le daba vibras de haberlo conocido ya hace muchísimo tiempo y de que no era alguien al cual estimara mucho.

Lo cual se le hacía extraño era una sensación rara, pero estaba seguro que no lo había visto antes, no era de olvidar caras.

Después del breve encuentro en la cafetería, Crowley intento ignorar sus sentimientos de celos y molestia hacia Gabriel.

Quiso intentar mantener una actitud neutral y observar más de cerca la dinámica entre los dos.

Con el paso de una semana, Crowley comienzo a notar que Aziraphel y Gabriel se estaban haciendo amigos rápidamente. Aunque inicialmente le molestaba, también se dio cuenta de que Gabriel parece ser una buena influencia para Aziraphel, haciendo que piense menos en los problemas relacionados con sus padres, aun asi lo siguió vigilado de cerca.

-Crowley Junior no crees que tu papi a estado actuando un poco raro, no lo sé, lo siento algo diferente- le decía Azira al lindo peluche de serpiente que su novio le había regalado en su primera cita.

-¡Ángel ya llegué!-

Aziraphel bajo rápidamente a la sala donde estaba su novio, al cual abrazo apenas estuvo a su lado.

Aún seguían en ese tierno abrazo cuando sonó el timbre de la casa, Crowley quería ignorarlo pero seguían insistiendo así que decidió y a ver.

-Azi, ve a desempacar las compras por favor, te traje unas fresas puedes comerlas si quieres mientras voy a ver quién rayos es-.

Aziraphel sonrió y asintió con la cabeza para dirigirse a la cocina con la bolsa de las compras.

-¿Quien es?- dijo apenas abrir la puerta.

-Valla sé que no nos hemos visto en un tiempo pero aún así no puedes reconocer a tu linda, elegante e inteligente hermana mayor- dijo una mujer de aproximadamente unos 25 años.

-Que mierda haces en mi casa-.

-Pero que falta de respeto hacia tu hermana mayor que maleducado, además, ¿no me invitas a pasar?.

-No, la verdad no me apetece dejar entrar a una pequeña mosca molesta a mi casa Beelzebub-.

-Ash, ya te lo dije es Beel ese nombre no va para nada conmigo, fue una ridícula decisión de papá, lo hizo solo para molestar supongo yo-.

-Si claro, finjamos que no te queda como anillo al dedo, en fin que es lo que quieres, para que has venido a mi casa-.

-No me importa si me dejas entrar o no, aún así lo voy a hacer- con esto empujó a Crowley abriéndose paso hacia el interior de la casa.

-¡Pero bueno! Debo admitir que no está nada mal aún con tus horrendos gustos- dijo para sentarse en el sofá, el pelirrojo de puso en frente con una cara de molestia.

Se notaba que ya estaba bastante fastidiado ante esta situación.

-¡¡Que puta mierda quieres!! ¡Lárgate de una buena vez si solo piensas molestar!

Crowley ya estaba en el límite de su paciencia, y al gritar de esta forma alertó a Aziraphel el cual aún se encontraba en la cocina.

-Que temperamento, pues bien,. papá quiere que lleves tu culo ante su presencia lo más pronto posible-.

-No tengo porque obedecer a ese viejo, así que ya te puedes ir llendo por donde llegaste-.

Beel se levantó y se acercó a su hermano -No es una petición, ni una sugerencia, es una orden, ve la más rápido posible por las buenas o ya sabes que tendremos que llevarte por las malas.

Beel estaba apunto de salir ya estaba en la puerta cuando se detuvo y se giró para verlo.

-Por cierto dile a tu noviecito que es de mala educación no salir a saludar a las visitas y encima espiar a los demas, aparte de que no debería dejar su ropa en un lugar tan visible-. Señaló una camisa celeste que está en una silla.

Con esto último por fin se terminó yendo.

La situación entre Crowley, Aziraphel, y la inesperada visita de Beelzebub se volvio tensa y preocupante. Aziraphel, al escuchar la puerta cerrarse, corrió hacia la sala donde estaba el pelirrojo.

Crowley, aunque molesto y frustrado, trataba de mantener la compostura frente a Aziraphel, pero es evidente que la presencia de Beelzebub lo había perturbado profundamente.

-Crowley ¿Estas bien? Yo, escuché un poco la conversación, no era mi intención pero estaba preocupado de que algo pudiera pasar-.

-Estoy bien, no te preocupes- se dejó caer en el mueble y Aziraphel fue a sentarse a su lado.

...

-Recuerdas cuando mencioné que tenia 2 medio hermanas, bueno esa qué acabas de ver es una y la mayor-.

-Cuando me preguntaste no quise hablar ya que mi familia no es un tema que sea de mi agrado, además que creí que no volverían a meterse en mi vida, tengo una relación no tan buena con ellos y sobretodo con el hombre que se hace llamar mi padre-.

-Esta casa es mía y de hecho lo que tengo lo conseguí con mis medios y con ayuda de mi madre, ya que quería evitar tener que verlos, verlo a él, pero al parecer ahora quiere algo de mi-.

-Cuando ella... Cuando murió me dejó una buena cantidad de dinero, supongo que lo dejo pensando en que sería de mí si ella faltara-.

-Oh querido-. Aziraphel abrazo a Crowley.

*No puedo creer todo lo que me está contando, yo me sentía mal por mis problemas familiares, cuando él tenía ese pasado con su familia*.

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