Where are you, Bobby?

12

Roier estaba anotanado. ¿Porqué estaba un superior en el lugar donde debería estar un trabajador?
Vio como Cellbit agarraba su pistola, aún sin sacarla.

— Buenos días.

[ A partir de ahora cambiamos de perspectiva:) ]

En otro lugar...no tan lejos.

Un niño estaba acostado,postrado sobre un suelo sumamente frío y duro,
Su ropa estaba sucia y algo rota, sus brazos con marcas de haber sido sometido muchas veces, suspiraba aburrido.

No sabía cuánto tiempo había pasado desde que confio ciegamente en ese oso blanco con moño chistoso, al recordar ese momento su cuerpo se lleno de rabia, dando pataletas al aire.

A unos cuantos metros de el se encontraba su amigo, un amigo que había hecho en ese lugar y que compartían habitación, habitación de prisión.

Este mismo estaba jugando con una piedra que encontro en el suelo, más sucio que el y más mayor que el, pero sentía que era más pequeño que el por como se comportaba.

Se presentó hacia el como "Richarlyson"
Era lo único que recordaba de el mismo.

El niño también se presento como "Bobby", ahora teniendo que compartir una celda.

Bobby le enseñaba a contar a Richarlyson, ya que el niño debido al larguísimo tiempo en esas cuatros paredes, había olvidado (o nunca aprendio) cosas comunes como números.

— Así se escribe el Uno.. y se dice  u n o. U-n-o

— U..no.

— Boa Richas!

También descubrió que la lengua materna de su amigo, portugués, estaba aprendiendo algunas palabras para no incomodar tanto a Richarlyson, además que así empezaban a confiar en el otro.

— Bobby, eu..preguntar a ti.

— ¿Si? ¿Que pasa?

Bobby dejo de hacer lo que estaba haciendo para poner su mirada en Richas, este jugaba con sus manitas.

— Tus..Pais, ¿quienes son?

Bobby no quitaba la sonrisa de encima, mirando hacia el piso, agarrando el lápiz que encontraron una vez porque se le cayó a un señor que lo vino a dar de comer,
Empezó a dibujar lo que recordaba de su papá y mom en el piso.

— El..es mi papá, Roier, es un pendejo, pero es mi papá pendejo.
— pen..dejo?
— ¡No digas esa palabra richas! Jajaj

El menor soltó una carcajada, para después hacer otro dibujo, ahora de su madre.

— Y ella..es mi mamá, my mom, ella es la mejor mamá del mundo, ella me cuido desde que estaba en su pancita y desde que nací.

La voz de bobby empezaba a ponerse apagada, no había pensado a profundidad sobre sus padres, solo los extrañaba, pero no como se sentía en ese momento.

— Los extraño mucho. . .

Lágrimas empezaban a salir de los ojos del pequeño, empezando a hacerse Bolita y abrazando sus piernas, Richarlyson no sabía que hacer, tenía a su mejor amigo llorando alado suyo y no sabía que hacer, asique, solo se acercó y lo abrazo, era significativamente más grande que Bobby, asique podían Acurrucarse sin problemas.

Richas no dijo nada, se quedó abrazando y acariciando la cabeza de Bobby hasta que el mismo se tranquilizara.

Ese momento se arruino cuando patearon la puerta con una fuerza desmiritada,

Más gritos.
Ya era algo normal para ellos.
Pero esos gritos se escuchaban más agudos, parecían ser de un niño mucho más joven que Bobby.

Bobby se limpio las lágrimas y fue hacia una pequeña ventana que estaba en la puerta, logrando mirar a un hombre con máscara blanca, sujetando con fuerza del brazo de un pequeño, no parecía tener más de 5 años.

— Sueltame!! Quiero a mi mamá!! Mamá!!

El niño lloraba desconsoladamente, se veía su cara roja y lágrimas sin parar.

— ush..que irritante! Dios como quisiera meterte con los cadáveres. Pero seré uno de ellos si lo hago.

Bobby no entendía a que se refería, ¿Que son los cadáveres?¿Será alguna comida hechada a perder? Eso pensaba el niño.

Aunque dispersó sus pensamientos cuando vio que aquel trabajador se acercaba mucho a su puerta, retrocedió y se puso en pose defensiva, su padre le había enseñado algunas cosas sobre defensa personal y esperaba que fuesen útiles.

Richarlyson se ponía atrás suyo, escondiéndose (sin mucho exito) por su gran miedo a esas personas, sabía de las cosas que hacían y lo aterraba.

Se abrió la puerta con fuerza, también entrando un pequeño niño con blusa roja y blanca y lentes, al caer se hizo bolita tapando sus oídos, al parecer también le molestaba el ruido que provocaba la puerta.

— Saluda a tus nuevos amigos.

Dijo el maldito señor de marcara blanca, sabían que sonreía de manera macabra bajo la máscara.
Después de eso cerró la puerta con la misma fuerza bruta con la que la cerró.

Bobby se acercó al nuevo inquilino, dándose cuenta que era sumamente pequeño, más que ellos dos.

— Hi..? Hola??
— Oí?...

— ¿Quien es usted y que hace aquí?

— Buenos días.

Ese hombre llevaba diciendo la misma frase durante varios minutos, no sacaba respuesta ninguna.

— Buenos días..

Simplemente dijo roier, sentándose en la silla enfrente suyo.

— Soy un superior de la compañía encargada de "Cucurucho's Party."
Mi nombre es...

Espero les guste, cada vez más cerca del final:)