Capítulo 10: Ven al condominio.

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Pov: Yoo

¿Qué estoy haciendo aquí?
Esa es una pregunta que me he estado haciendo desde que vi la cara confundida de Khampan cuando regresé al bar.

Solo pude preguntarme toda la noche, porque no salí o volví a mi casa. ¿Por qué sigo sentado aquí viéndolo cuidar de su amigo? Y si no fuera suficiente incluso lo llevé a su apartamento a dormir, pero no terminó ahí. Incluso tuve que volver a usar mi moto para
recoger a su amigo, sin saber si su amigo estaba realmente borracho o no.

Khampan ni siquiera me dejo subir a su apartamento todavía. Le preocupaba que su amigo estuviera esperando demasiado.

“¿Has regresado otra vez?” preguntó el chico cuando regresé a la tienda.

“Hmm… Vámonos de aquí. Ya tengo sueño...” Le digo y asiento.

“Pero Dios…” Me llamó y me dio su dulce sonrisa, aunque era bastante dulce pero no tan dulce como la de Khampan, No le prestó atención solo a Khampan, porque solo lo estoy comparando.

“¿Qué pasa ahora?”

“No puedo encontrar mi billetera y no he pagado por esta comida…” dijo señalando la comida en la mesa.

“Hahh…” Solo puedo suspirar y caminar para pagar la comida.

Todavía me pregunto en mi cabeza. ¿Qué estoy haciendo aquí?,
¿para qué estoy aquí y qué estoy haciendo aquí?

Condominio de Khampan.

Esta es mi tercera vez aquí. En el pasado, solo conduje hasta el frente de su condominio, pero ahora es el momento de que entre en su condominio.

Inmediatamente estacioné mi moto y me dispuse a subir las escaleras. No tengo el número de celular de Khampan, solo estamos en contacto por mensajes de Facebook.

Ahora voy a seguir a su amigo llamado New Year. Que no parece
demasiado borracho, pero ya estaba tres pasos por delante de mí y se giró para mirarme. ¿Qué pasa ahora?
Rápidamente lo miré de nuevo.

“¿Por qué me estás siguiendo?”

“¿Eh?”

“¿Por qué me seguiste y por qué no volviste a tu casa?” preguntó el chico, su voz era clara a pesar de que su pronunciación parecía más lenta de lo habitual. Pero demostró que no estaba realmente borracho.

“Yo…” ¿Realmente tengo que irme a casa?, son las dos de la mañana.

Volví aquí de nuevo con la excusa de que podía subir. En realidad, realmente no me importa el dueño de la habitación y tampoco tengo malos pensamientos. La razón por la que lo seguí fue porque los ojos del niño frente a mí se veían tan increíbles. No creo que le haga nada a Khampan. Solo… He venido aquí tres veces. ¿No
puedo pasarme un rato?

“Ah… ¿P quiere orinar?”

“…”

“Oh… así que quieres ir al baño, vamos, te llevaré…” Él mismo dijo eso y volvió a caminar para guiarme sin decir una palabra.

Ahora solo estoy caminando desde el estacionamiento. No sé por qué quería subir las escaleras porque al final solo seguí a su amigo hasta las escaleras. En realidad, a mis amigos también les gusta hacer esto cuando están borrachos, y se quedan en uno de los condominios de mis amigos que este más cerca del pub.

Toc.. Tok.. Tok..

“¿Estás aquí? Oh...”

Khampan inmediatamente abrió la puerta cuando su amigo llamó a la puerta.

No Me Llames Khampan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora