By Tom
-¿cariño?
Me sobresalto un poco por la sorpresa que me causó el llamado de Bill.
Nervios se reflejan en mis ojos.
-¿q-que ocurre ,amor?
Levanto una ceja, se sentó cruzado de brazos e inflo sus mejillas.
-Bill... ¿Que ocurre?
-¿que que ocurre?
Mi cuerpo flaqueo y el sudor frío, se hizo presente en mis manos, frente y espalda.
-Amor yo...
-ni creas que te lo voy a perdonar.
Una sensación indestructible, recorrió mi cuerpo, de pies a cabeza.
-se supone que deberías estar aquí... Abrazando y besandome después de haber echo el amor.
Dijo con un tono enojado y triste a la vez.
Esa sensación se esfumó de mi cuerpo, así como nubes obscuras después de llover, dejando un hermoso y colorido arcoíris.
-amor...
Me acerque para poder abrazarle. Enredo sus brazos a mi cuello y sus piernas a mis caderas, colgándose cual oso panda.
-¿por que tienes que ser tan tierno?. - elevó y descendió sus hombros, acompañado de una sonrisa juguetona. -¿quieres otro round? Por que te recuerdo que soy un hombre que esta dispuesto a atender los deseos de su lindo Secretario.
-mmmm. -ronroneo. - Se nota que amas a tu Secretario.
-a MI sexi Secretario, si.
-enseñeme lo que tiene para mi, jefe.
☯∘☯∘☯
-Tom...
Nos encontrábamos en el sofá-cama, yo recargado y el entre mis piernas, con su espalda pegada a mi pecho mientras le acarició el cabello.
¿Mencione que amo su cabello? ¿No?
Pues lo amo.
-¿Tom? .- pregunté.- ¿que ocurre? ¿Ya no soy "cariño"?
-si, solo... ¿Vamos a casa?
Mire sus ojitos, había algo distinto. Cansancio, tristeza y ternura. ¿Que le preocupa?
-Falta una hora pero... Esta tranquilo ¿quieres que nos vallamos ya?
-sip, tengo hambre.
-bueno, entonces iremos a un restaurante a cenar.
Sus ojitos se iluminan de Nueva cuenta.
-¿como una cita?. -asiento, acariciando su mejilla. -¡yeeeei!
Nos pusimos nuestras ropas y sin más, salimos tomados de la mano.
Ya no importan las miradas. Quiero disfrutar de el y que el disfrute de mi.
☯∘☯∘☯
Abrí la puerta de Co-piloto y tome su mano, ayudándole a salir de mi Cadillac.
Al cerrar la puerta y colocar la alarma, el se lanza a mi y engancha sus brazos a mi cuello para llenarme el rostro de cortos besitos.
-Te amo Tommy.
Sin poder contestar, me tomo de la mano y jalo dentro del lugar.
-mesa para dos.
-en seguida, señor Trümper.
Nos encaminó a una mesa, justo a lado de una ventana con hermosa vista al anochecer por las luces que ilumina Alemania.
-jamás hemos tenido una cita... Esto es realmente especial.
Dijo con una hermosa sonrisa.
-si... Lo es, amor.
-¿listos para ordenar?
-si. Yo quiero una ensalada. -Bill, me hizo ojitos. -para mi esposo, lo mismo. -sonrió satisfecho y conmovido. - a, y una botella de champán.
El mesero anoto en su libretita y se retiró con una sonrisa dirigida a Bill.
-debería despedir a ese mesero.
-solo ha sido una sonrisa.
-mmm.
Subió su mano y la poso sobre la mía, mirándome con total atención.
Verle tan contento, me hace sentir mal.
¿Como puedo ser tan cruel y robar a este Ángel del cielo?
El solo pensar lo que podría pasar mal a mi lado...
Lágrimas silenciosas, salen de mis ojos.
-no llores ,amor.
Esas palabras... Esas mismas palabras, me tocarán decirselas cuando le cuente la verdad.
Prefiero morir, antes de hacerlo sufrir.
Algo corto, solo es un capítulo de...
¿Relleno?