Jimin se había mantenido totalmente callado luego de gritar a los cuatro vientos que no necesitaba ayuda y que era normal en él caminar descalzo y en pijama en medio de la noche cuando comenzaba a bajar la temperatura a menos 10º c. YoonGi por supuesto solo le interrogó un par de veces antes de obligarlo a entrar en su carro, estaba claro que el menor aun estaba molesto con él y no lo culpaba, él habría estado hecho un león si alguien lo hubiera siquiera intentado tratar como él trato a Jimin. No le importo lo tanto que rechazó su chaqueta, puesto al peli naranja nadie le decía que no, si bien esta no era por esencia de franela, el haber estado anteriormente en los hombros del mayor, puso a Jimin en una esfera de calor que abrazó con fuerza.
A decir verdad, no tenia intenciones de encontrarse con Jimin a esas horas, planeaba verlo por el patio al día siguiente o quizás en la aburrida iglesia haciendo un algún trabajo comunitario mientras fingía que eso era divertido. El chico parecía ido, su semblante oscuro y demacrado le decían muchas cosas, había estado un tiempo afuera semi desnudo, su pelo negro enmarañado era evidencia de que había salido recién de la cama y el temblor inevitable de sus labios era a causa del frio. Palpó su mejilla haciendo saltar al peli negro en su asiento.
-Estas congelado.-dijo. Y a Jimin le dio la impresión de que YoonGi estaba molesto.
YoonGi aparco justo frente a su casa y se quedó en silencio hasta que notó Jimin no tenia intenciones de marcharse.
-¿Entonces? ¿Eres sonámbulo?.-preguntó añadiendo un poco de humor.
-...
-O es que te dedicas a otras cosas.-agregó.
-...
Dejó caer su mano sobre el volante asustando al menor.-Sino dirás nada, entonces bájate de mi auto y vete a tu casa.-YoonGi había sonado demasiado directo y como si no le importara. pero Jimin no se había movido ni siquiera un milímetro, casi se sentía obligado a permanecer allí, después de todo nada le aseguraba que no hubiera nadie en su casa. Ni siquiera sus tíos habían llegado pensó.
Muy tarde, la puerta del auto había sido abierta y la mirada dura del mayor cayó sobre él.-Bájate.-Ordenó de nuevo. Ahora que estaba molesto, finalmente lo había hecho, ni siquiera volteo a verle cuando un carro desde la otra calle comenzaba acercarse a ellos. Jimin se quedó quieto, grave error, era el auto de Lee. Maldijo por lo bajo. Ahora ¿Cómo se suponía que le explicaría a su todo a su tía?
-¡Jimin!.-Su tía había bajado del auto.-¿Qué demonios haces en el patio y vestido así? ¿Por qué no te has puesto zapatos niño?.-Preguntó. Pronto su mirada cayó sobre YoonGi. El peli naranja se inclino un poco y luego miró al menor.
-Es mi culpa.-Intervino. Soon Hee frunció el ceño.-Le pedí a Jimin que me ayudara con el carro porque se le averió una llanta.-Mintió. Y ni siquiera se había arrugado pensó el menor. Y lo otro era, ¿Por qué estaba mintiendo por él?
-¿A esta hora?.-Preguntó incrédula.
-Si. Acabo de llegar también, Jimin tiene mi número, así que lo llamé para que me ayudara a llegar hasta aquí. Lo siento si la asusté.-Agregó. Soon Hee miró a su sobrino y Jimin bajó su mirada. Por supuesto que su tía no se había creído eso, ¿Quién sale ayudar descalzo y en pijama a altas horas de la madrugada? solo un loco y seguramente ella ya catalogaba a YoonGi como uno.
Aclaró su garganta.-Jimin, entra y ponte zapatos. Ya es un poco tarde, seguro que podrás arreglar tu carro mañana en la mañana.-alzó sus cejas.
-Seguro que si.-respondió. Lee bajó del carro observando al menor entrar sin decir ni una palabra. él por su parte cargaba a JungKook. YoonGi recibió un buenas noches por parte del.
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Seven《YM》
Hayran KurguBuscar respuestas se volvió un hábito para YoonGi y cada respuesta representaba una dolorosa cicatriz...Seven era su refugio, quizás el único que tuvo siempre. Luego de descubrir la infidelidad de su padre con un miembro de la iglesia, YoonGi se ve...