Capitulo ocho "Acuerdos y malos entendidos"

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Era normal que por las noches no durmiera, pero su mente no dejaba de darle vueltas al mismo asunto. Quería encontrar la mejor forma de hablar con Lucifer, pero todo lo que pensaba no le gustaba para nada.

- ¿Tú qué crees que deba hacer?

Se dirigió a su sombra que no estaba presente pero se manifestó ante el llamado de su amo.

- Siempre dices lo mismo, ir y hablarle solo así no es fácil.

Se levantó de la cama para arreglarse, la silueta le puso la camisa y fue a buscar su característico saco rojo.

- Pero a decir verdad tienes razón...

Se abotonó su saco, invocando su bastón.

- ¿Me quieres acompañar?

La sombra sonrió emocionada, Lucifer le caía muy bien y que se reconciliaran era algo que de verdad ansiaba.
















Caminó decidido hacia la habitación del rubio, pero al llegar a la puerta se detuvo por unos diez minutos, jugó con su bastón de manera inquieta y cuando se dispuso a tocar la puerta,esta se abrió.

- Hola...

Le dijo sonriente y con un leve sonrojo ya que el rubio no tenía camisa ni pantalones, solo su bata rosa, ropa interior y sus pantuflas de patito. Pensó por un momento que no lo había escuchado caminar a la puerta, pues aquellas pantuflas hacían un chirrido algo molesto.

Lucifer frunció el seño y le azotó la puerta en la cara.

- No espera!!

Alastor empujó la puerta con fuerza quedando esta entreabierta.

- No quiero verte lárgate de aquí!!!
Empujó más fuertemente, pero no tanto ya que no quería que los demás escucharon el escándalo.

- Permíteme hablar por favor!!!

La puerta se abrió de golpe, el rubio chasqueo los dedos y una gran barrera se formó al rededor de la habitación. Lucifer lo jaló al interior y azotó la puerta para cerrarla.

- Guarda silencio que no quiero que Charlie te escuche!!!

Le gritó, su barrera era a prueba de sonidos y como se estaba aguantando el gritarle a Alastor.

- Te pido que te retires, no quiero verte ni si quiera sé por qué estás aquí.

El pelirrojo intentó tomar sus manos pero Lucifer no se dejó y dio un par de pasos hacia atrás para alejarse de el.

- Luci yo...

- YA PARA DE LLAMARME ASÍ!!!!

Dejó ver sus cuernos por un instante y sus ojos tenían un color rojo muy intenso.

- No tengo nada que hablar contigo, ya lo dejaste todo muy claro.

Caminó al rededor de su habitación de manera ansiosa, antes de seguir hablando.

- No sientes lo mismo y está bien, yo no te pido que me correspondas.

- Pero fuiste un imbécil!!, siempre has sido un imbécil!!, durante todo el tiempo que fuimos amigos jamás mostraste una pizca de empatía.

Tomó aire sintiendo los latidos de su corazón al mil, miró a Alastor a los ojos que mantenía una expresión inquieta.

- Así que no vengas con esa mierda de querer disculparte ahora, porque tuviste siete años para pensarlo.

Acomodó su bata algo apenado al notar que estaba medio desnudo, le hizo un nudo dándose vuelta para que el pelirrojo no le mirase.

- Seré cordial contigo cuando estemos frente a los demás, con Charlie. Ella te quiere demasiado y jamás interferiria en su amistad.

A Tú Merced- AlastorXLuciferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora