Los hijos de AFO

15

Un bicolor estaba cepillando sus dientes, mientras pensaba en todo lo que había pasado el día anterior. Seguía sin creer que ese peliverde tierno, a la vista de muchos, formaba parte de la liga de villanos y que él, alguien "destinado" a ser héroe, aceptará unirse.

—¡Shoto! El desayuno está listo.—La voz de su hermana mayor lo saco de sus pensamientos, volteando ligeramente a la puerta de su habitación.

—Gracias, en un momento bajo.—Escucho pasos alejándose, termino de cepillar sus dientes, secó con una toalla su rostro y salió de su habitación en dirección al comedor.

—Shoto, ¿te puedo hacer una pregunta?.—Dijo emocionada Fuyumi, apenas vio entrar a Shoto.

—¿Cuál?

—¿Hiciste amigos nuevos? Ayer llegaste tarde y me emocioné pensando que fue por haber ido con tus nuevos amigos.—Termino de acomodar todo sentándose en el proceso, siendo imitada por Shoto.—¿¡Y bien!?

—Eh... ¿Puede ser? Apenas empezamos a hablar, pero ayer me invito a su casa a cenar. 

—¡Qué emoción! ¡Le contaré esto a mamá en mi siguiente visita al hospital, estará tan emocionada como yo de seguro!

«Mamá...»

—¿Cómo está?—Ante la pregunta, la albina cambio su expresión a una sería y melancólica. 

—Va mejorando, pero... Aún no está preparada para ver a papá o a ti, los doctores piensan que lo ve en ti, es por eso que le daría un ataque de tan solo verte.

El bicolor apretó la cuchara con fuerza, al diablo las dudas que aún tenía, Enji Todoroki se merece la peor venganza que alguien le podría dar, y él se encargaría de cobrarle uno por uno todo lo que les hizo. Se colocó sus zapatos y salió de su casa en dirección a la U.A., aún tenía mucho que pensar, pero de algo estaba decidido y era en que sí o sí le daría una lección a Enji Todoroki. 

Llego a la U.A. y se dirigió a su salón, tenía suerte de llegar temprano, así no vería a sus compañeros hasta que se le pasará el enojo. Llego a su salón, se sentó en su lugar y comenzó a ver su celular mientras esperaba a que las clases empezaran.  Denki llego corriendo minutos después, respiraba por la boca tratando de estabilizar su respiración. Al ver al bicolor sonrío de lado y se dirigió a donde se encontraba. 

—¡Hola, Todoroki!—El nombrado volteo.

—Kaminari... ¿Se te ofrece algo?

—Uy... Solo quería saludarte, has llegado temprano, ¿eh? ¿Te encuentras bien? Estás más serio de lo normal y eso ya es mucho para ser tú.—El bicolor soltó un suspiro.

 —No es nada Kaminari, solo recordé unas cosas, es todo.

—Oh... Bueno, no preguntaré por más. Por cierto.—Shoto lo miró.—He notado que a veces estás solo en el receso, ¿puedo estar contigo? Bakugo sigue enojado conmigo, no quiero salir explotado. 

—Pero, ¿ayer no estabas con Mido...?—Se detuvo, ¿será que a él también le hablo de la liga?.—Kaminari

—¿Sí?

—Midoriya...

—¿Qué... qué pasa con Midoriya?—Pregunto con miedo.

—¿Midoriya no te ha dicho nada raro? 

—¿Raro? ¿Raro en qué sentido? 

—Olvídalo, imagino cosas. Claro Kaminari, puedes estar  conmigo en el receso, pero, ¿no estabas con Midoriya ayer?

—Ah, sí, pero me dijo que hoy estaría ocupado en el receso.

—Ah... está bien. 

—Cambiando de tema, ¿podemos ir a la azotea?