Capítulo 17. El dementor (año 5)

122 15 4
                                    

Estaba por iniciar mi quinto año en Hogwarts, los TIMOS eran este año. Me había convertido en prefecta de Gryffindor y tenía nuevas obligaciones; debía de ir a el vagón de los prefectos para que los premios anuales nos dieran instrucciones sobre que debíamos de hacer. Este año Percy era uno de ellos, y estaba insoportable. Cuando alguno de los prefectos tenía alguna duda, Percy la respondía de una forma muy pretenciosa, utilizaba términos complejos y hablaba demasiado formal y hacía un montón de movimientos con las manos.

<<!Ya cállenlo!>>

—Ivy, eres una traidora.

—Como es posible que seas prefecta.

Dijeron los gemelos una vez que entre a el compartimento en el que ellos se encontraban. Estaban decepcionados de que una de sus amigas fuera nombrada prefecta.

—Qué vergüenza —dijo Fred tratando de acostarse dramáticamente sobre el asiento, pero no cabía, tenía que hacerse bolita, debido a que había crecido mucho, me sacaba dos cabezas, a pesar de que yo también había crecido en el verano.

—Primero mis hermanos, ahora mi mejor amiga —dijo George—. ¿Qué mal he hecho, Dios mío?

—Que no has hecho, más bien —dijo Oliver que iba entrando al compartimento.

—Cada año que pasa te pones más bueno —dijo Fred dándole un vistazo de arriba abajo a Oliver, mordiéndose el labio bruscamente. Oliver le lanzó a la cara el suéter que tenía en la mano, este se había sonrojado.

Fred tenía razón, cada año que pasaba se veía más atractivo y todo Hogwarts lo notaba. A finales del ciclo pasado, las chicas no paraban de hablar de Oliver, y lo guapo que se había puesto. Asistían a los partidos con el número de Oliver (número 19) pintados en las manos, cachetes; otras lo bordaban en sus capas, aunque Oliver aparentemente no se daba cuenta.

También hablaban sobre lo atractivos que eran Fred y George. Estos a diferencia de Oliver, (en especial Fred) si notaban la atención que recibían de las chicas. Después de que una chica coqueteara con ellos por los pasillos, estos ponían cara de estúpidos. Algunas chicas se acercaban a mi para preguntarme si era novia de alguno de ellos tres, al yo responderle que solo éramos buenos amigos, me empezaban a preguntar sobre ellos y como podían conquistarlos.

—Mira —dijo Oliver presumiendo su insignia de capitán. Él me había contado la gran noticia en las vacaciones, justo cuando le llego la insignia, pero aparentemente no sabían los gemelos.

—¿Qué? —exclamó Fred mirando atónito la insignia.

—¿Nuestro Oli? ¿Capitán? —preguntó George, quitándole la insignia a Oliver de las manos para revisarla.

—¿Es original o se la robaste a Lucas? —dijo Fred viendo de cerca la insignia.

—Idiota —murmuró Oliver, arrebatándole la insignia a Fred.

—Felicidades, Oliver, lo tienes bien merecido —dije estriando los brazos para abrazar a Oliver.

Oliver, a pesar de que nunca lo dijera en alto, siempre quiso el puesto de capitán. Este solía ayudar todo el tiempo a Charlie y Lucas con las jugadas que realizarían en los partidos, a pesar de ser muy pequeño. Este era el momento indicado para que explotara todas sus habilidades como líder y para que recibiera el reconocimiento que merecía.

Estaba tan feliz por él.

—Felicidades, Ivy, por ser prefecta —dijo Oliver devolviéndome el abrazo y levantándome un poco. Oliver estaba usando un nuevo perfume, olía mucho más varonil.

—¿Nuevo perfume? —pregunté con una ceja alzada. Oliver asintió y acercó repentinamente su cuello a mi cara para que pudiera oler mejor. No entendí por qué, pero me puso nerviosa este gesto.

What if... Ivy Potter? | Oliver Wood [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora