What if... Ivy Potter? | Oliver Wood [BORRADOR]

Capitulo 8. El mapa (año 1)

Después de más de cuatro meses, Fred y George habían sido castigados un sinfín de veces, pero en ninguna ocasión fueron mandados a la oficina de Filch. Oliver y yo notamos que eso frustraba a los gemelos. Fred y George intentaban de todo, pero nunca era suficiente para ser llevados a la oficina de Filch.

Me encontraba en la sala común, terminando un ensayo para encantamientos. Oliver estaba sentado en un sillón cerca leyendo por quinta vez Quiddich a través de los tiempos; George estaba haciendo anotaciones en una libreta sobre las reacciones en la piel que puede provocar cierto tipo de plantas; mientras que, Fred estaba tirado en el suelo con las piernas encima del sofá.

—Oliv...

—No. No te voy a ayudar en eso Fred —dijo Oliver.

Fred y George habían intentado convencer a Oliver para que este accediera a ayudarlos en sus travesuras, pero Oliver siempre se negaba. A mi nunca me lo pedían porque sabían cuál sería mi respuesta.

No.

Una cosa era ser castigada por explorar el castillo y parte del bosque prohibido; era natural querer explorar, pero era muy distinto buscar a toda costa ser castigada para ser llevada a la oficina de Filch solo para que los gemelos cumplieran una de sus más grandes fantasías.

—Por favor para llevar a cabo nuestro plan se necesitan cuatro personas y bueno... Fred y yo solo somos dos —dijo George dejando de lado su libreta.

—Pues como quiera faltaría una persona —dijo Oliver.

—¿Entonces si nos ayudaras? -preguntó Fred sentándose en el suelo.

—No.

—Vamos, ayúdanos —dijo Fred estirándose para zarandear a Oliver, pero este solo le lanzó un cojín—. ¡Auch!

—¿Cuál es tu plan? —pregunté, aunque me arrepentí al momento en el que vi que la cara de ambos gemelos se iluminó, seguido de unas sonrisas bastante maliciosas.

—Ivy, ¿Los ayudarás? —preguntó Oliver dudoso, una vez que ambos gemelos me terminaron de contar su plan y que yo accediera a ayudarlos.

—Si, total, el primer castigo no es, y dudo mucho que sea el último —dije, mientras trataba de convencerme de la tontería que estaba a punto de hacer.

Hoy llevaríamos a cabo el plan de los gemelos. En un principio no estuve tan convencida, pero, los gemelos habían hecho un plan bastante sólido, y si lo seguíamos al pie de la letra, por lo menos Oliver y yo no seríamos castigados.

El plan consistía en que George lanzaría una bomba fétida en el pasillo inferior de la oficina de Filch, Filch iría hacia allí y Oliver lanzaría otra en el pasillo superior, a esa iría la señora Norris. Por otro lado, Fred y George habían logrado duplicar la llave de Filch, no tengo idea de cómo lograron tener la llave de Filch, pero el conjuro que habían hecho para duplicar la llave era muy bueno. Fred y yo iríamos hacia la oficina de Filch y la abríamos con la llave duplicada, yo me quedaría en la puerta para cuidar que nadie venga o se acerque mientras que Fred revisa la oficina en busca de algo interesante y si encontraba algo interesante lo metería en mi monedero expandible, un regalo de navidad de la señora Moore.

George y Oliver se encontraban en sus puntos, lanzarían las bombas al mismo tiempo, a las 7:37 de la noche. Fred y yo nos encontrábamos cerca de la oficina de Filch.

—Esta en su oficina, junto con la gata —dijo Fred mientras se colocaba de tras de una pared.

—En 30 segundos las lanzarán —dije revisando mi reloj

¡BOOM! ¡BOOM!

Se escucharon ambas bombas. Filch y la señora Norris salieron de la oficina y cada uno tomo su respectiva dirección. Fred y yo corrimos hacia la oficina de Filch para cumplir nuestras misiones.