𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐄, 𝐂𝐔𝐋𝐋𝐄𝐍 ¦ 𝐂𝐀𝐑𝐋𝐈𝐒𝐋𝐄 𝐂𝐔𝐋𝐋𝐄𝐍

26

ADVERTENCIA:
Capitulo con contenido fuerte, mención de drogas, abuso sexual, abuso físico y mental, mención de muerte, leer bajo tu propia responsabilidad.

Y aunque parecía un poco raro, pronto comenzó a salir el sol en Forks, algo que según ella no ocurriría pronto,

Y ahora que lo pensaba, tenía la curiosidad de preguntarle a su pareja el por qué no podía salir a la luz del sol, tenía miedo de que él se incendiara como se presentaba en los programas de televisión. Aunque, según parecía no ser de esa manera.

La oficina de Carlisle era grande, casi pareciendo un propio consultorio, ya que estaba repleto de libros de medicina, sus títulos de diferentes años de medicina, y sobre todo, fotos familiares.

En algunas de ellas pudo observar a una mujer de cabellera castaña y algo grande, lo curioso de todo era el cómo tomaba el brazo de su pareja, y eso solo le dio a entender que posiblemente ella había sido su pareja tiempo atrás.

Su mirada seguía recorriendo el lugar, nunca había estado ahí, normalmente sus visitas a su novio eran interrumpidas por Rosalie y Alice, quienes siempre acaparaban la atención de la mujer, otras veces, Emmett y Jasper la acaparaban.

Y no malentendamos, a Alya le encantaba pasar tiempo con ellos, ya que podía conocerlos más de lo que podía hacerlo, incluso podría decirse, que ellos comenzaban a considerarla una madre.

—Cariño.— escuchó a Carlisle llamarla.

Se dio la media vuelta, sonriéndole levemente, a lo que él se acercó a ella, solamente para observar lo que ella había estado observando minutos antes.— ¿Ya terminaste tus pendientes?.

Y con ello realmente se refería a que si ya había terminado de alimentarse, cuando ella llegó a la residencia, quien la recibió fue Edward, él le notificó que su padre salió a cazar, pero que podía esperarlo en su oficina, a lo que ella no se negó y dejó que la llevara ahí, incluso platicaron unos minutos y después él se marchó.

—Ya, perdona por no recibirte yo.— la abrazó por la cintura, pero ella le restó importancia.

—Está bien, igual no tengo mucho aquí.— respondió de manera simple, besando su mejilla al terminar.— ella es muy linda.— habló mientras dirigía su mirada nuevamente a la foto de la pared.

Carlisle miró el retrato, y ella pudo ver en su cara una expresión de tristeza y de dolor, por lo que no quiso preguntar al respecto.— Lo era.

—Perdona cielo, no quería hacerte recordar.

El negó, dirigiendo la mirada a su pareja.— No te preocupes, igual iba a decirte.— regresó su mirada al retrato, y después de un minuto, habló.— Su nombre era Esme Anne Platt, yo la conocí cuando ella tenía dieciséis años, lo recuerdo perfectamente, cuando la vi al entrar al consultorio supe que ella era mi Tua Cantante, su sangre era demasiado atrayente para mí, así que después de eso no la volví a ver.

Alya escuchaba atentamente todo, analizando cada facción en el.— Después, creo que fue cerca de 1921 cuando la volví a ver, tenía un hijo, pero ella estaba cansada de su vida, entonces ella se trató de suicidar, la ayude a que no lo hiciera, y a los meses comenzamos a salir. Fue así durante unos meses, hasta que ella se enteró de mi naturaleza, perdí el control, ella estaba sangrando, yo...no pude ayudarla, bebí su sangre hasta que ya no pude más.

—Cuando vi su cuerpo inerte supe lo que había hecho, no pude con la culpa, fue la última vez que yo bebí sangre humana, desde entonces me volví cerrado, trabajé mucho más en mi autocontrol, y ahora soy mejor de lo que fui en su momento.