Semilla [Goyuu]

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El impacto fue muy grande, no podía moverse, y el suceso que Satoru presenciaba era sorprendente. ¿Qué o quién causaba que Yuuji estuviera en tal estado?, quitándole su tierna y brillante sonrisa.

Cualquier rastro de dolor en el cuerpo de Gojo fue reemplazado por una creciente preocupación. Quería estar ahí para Yuuji, ayudarlo, hablar con él y prestarle su hombro para llorar si así lo quería. A pesar de sus buenos deseos cuando al fin tomó acción, el menor ya estaba subiendo en el autobús.

Satoru no sabía qué hacer. ¿Llamarlo y preguntarle cómo ayudarlo o simplemente pretender que no había pasado nada? Meditando entre estas dos opciones, camino hasta su auto.

«¿Cómo sigues? No pude verte, pero puedes pedirme ayuda en cualquier cosa que necesites. Y si quieres que te lleve algo, solo pídelo. Estaré muy pendiente.»

No quería invadir su privacidad y mucho menos forzarlo a hablar de algo que no quisiera, por lo que prefirió enviarle un mensaje para que se sintiera apoyado y que no estaba solo.

Encendió el auto y condujo hasta casa. En el camino, su mente lo llevó al momento en que por primera vez vio su cabellera rosa, tan suave y brillante, que llamó su atención, pero no más que esa cálida y hermosa sonrisa. Desde lo lejos podía ver cómo todo se iluminaba a su alrededor.

Estaba en la entrada de la universidad junto a Nobara, Megumi y Toudou, todos en armonía se reían. Satoru estaba saliendo de la universidad, pero en ningún momento apartó la mirada del chico.

—Es un tono de cabello poco común —mencionó Ieri, que estaba a su lado, mientras sacaba un cigarrillo.

—Es muy lindo — Anonadado. Gojo no apartaba la mirada.

—Bueno, tengo que irme, hablamos luego — Se alejó la chica mientras encendía el cigarrillo y agitaba la mano.

Gojo solo la observó alejarse por unos segundos mientras agitaba la mano, luego metió sus manos entre los bolsillos del pantalón y giró para ir hacia su auto. En ese momento vio nuevamente al chico de cabellos rosados. En ese momento estaba solo junto a la entrada revisando su celular.

Un impulso lo guio a ir junto al chico —¡Hola! Qué lindo color de cabello tienes, ¿es natural?

El chico pelirrosa abrió los ojos con sorpresa por unos segundos, pero después esbozó una enorme sonrisa, tanto que sus ojos también se curvaron un poco. —¡sí!

Los bellos de su brazo se levantaron y un pequeño choque eléctrico recorrió su espalda. —Qué lindo — dijo inconscientemente.

—Muchas gracias, ¿eres Satoru Gojo?

—¿Sí, me conoces? —preguntó con algo de curiosidad mientras una de sus manos se acercó a la cabeza del más bajo y la tocaba suavemente.

—Como no conocer al chico más popular, rico e inteligente de la universidad — indicó entre burlas el pelirrosa sin apartarse del toque del mayor.

—Tienes frente a ti al hombre más importante del lugar, deberías estar agradecido.

—Por supuesto, le agradezco al destino por este momento — Yuuji cerro sus ojos mientras asentía con la cabeza mientras se reía — ¡Ah! La película sale mañana — mencionaba el más bajo mientras miraba su celular.

Ese día Satoru pregunto por el filme y descubrió que los dos habían estado esperando por esta, hablaron del director por un rato frente a la universidad, la conversación fluyo así que siguieron en un café cercano por una hora más hasta que Yuuji tenía que irse.

Los dos se sentían cómodos con el otro, así que no tuvieron problema en comenzar a salir para ver películas, después de esto Gojo introdujo al chico de cabello rosa en sus raras películas, pero contrario a lo que esperaba le gustaron. Desde ese momento su amistad se fortaleció y pasaban más tiempo juntos.