𝗖𝗮𝘂𝘁𝗶𝘃𝗮𝗱𝗼. jaywon

capítulo 07 !

Después de esa noche, algo cambió. O tal vez todo estaba en la cabeza de Jungwon.

Ese 'dueño' burlón no debería haber cambiado nada, pero la palabra, una vez dicha, parecía estar constantemente presente en la habitación con ellos, como un elefante rosa gigante imposible de ignorar.

Dueño.

Dueño, dueño, dueño.

Jungwon ahora se sentía muy cohibido, muy consciente de que Jay era su dueño. Este hombre realmente podría hacerle cualquier cosa. Él ya lo sabía, racionalmente, pero el dueño de alguna manera lo había hecho mucho más real.

-Jihoon quiere reunirse contigo -dijo Jay, rompiendo el silencio que había caído desde que Jungwon llegó al comedor.

Jungwon levantó la vista, se encontró con la penetrante mirada marrón chocolate y tragó.

-¿Él está viniendo? -Su voz salió más aguda de lo que le hubiera gustado.

-No -dijo Jay. -Quiere encontrarse contigo en terreno neutral-. Sus labios se curvaron ligeramente y sus ojos brillaron con irónica diversión. -Dijo que quiere que te sientas cómodo en su presencia cuando hables.

-Así que tiene algo de decencia humana -dijo Jungwon. Jay tomó un sorbo de su café.

-No seas ingenuo. Básicamente significa que acepta mis condiciones pero primero quiere calmar su conciencia. Para darse una palmadita en la espalda por ser una buena persona.

-¿Siempre has sido tan cínico? -Dijo Jungwon, aunque esta vez no podía decir que no estuviera de acuerdo con él. Si Jihoon
realmente fuera una buena persona, se negaría a utilizar a una persona que había sido comprada para él, punto.

-No soy un cínico -dijo Jay. -Soy realista.

Burlándose, Jungwon puso los ojos en blanco.

-Entonces, ¿me llevarás a Dubai? -Su corazón se aceleró ante el pensamiento. Dubai significaba una oportunidad de escapar.

-Sí. Pero no te emociones demasiado-. Jay lo miró fijamente. -Te estaré vigilando, siempre.

El estómago de Jungwon se apretó, esa extraña timidez se hizo evidente de nuevo.

Dueño.

-¿Qué, vas a ser la tercera rueda? -Dijo, aclarándose un poco la garganta y riendo entre dientes. -Eso sería un poco
incómodo, ¿no?

Jay exhaló un suspiro.

-Teniendo en cuenta los rumores, a Jihoon no se le puede ver a solas con un hombre atractivo. Mi presencia eliminaría cualquier sospecha. No parezcas tan emocionado. Tampoco me entusiasma perder el tiempo en esto.

-Bien -dijo Jungwon. Francamente, no le importaba que Jay estuviera allí. Su presencia haría que Jihoon se comportara. No tenía idea de qué esperar de Jihoon. Al menos Jay le resultaba familiar.

-¿Dónde vamos a encontrarlo? -Miró su ropa. -¿Puedo ir allí con esta ropa? No tengo exactamente nada sofisticado-

La gente de Jay le había traído algo de ropa, pero era sencilla y no le quedaba muy bien. Jay frunció el ceño y lo miró.

-Nos encontraremos con Jihoon en un restaurante. Tendrás que ponerte algo decente-. Se levantó y salió de la habitación.

-Ven.

Un poco confundido, Jungwon lo siguió. Sólo a medio camino de la habitación de Jay se dio cuenta de que ni siquiera había cuestionado la orden de Jay. Eso fue más que un poco alarmante. Seguramente no le habían lavado el cerebro ya para que pensara que este hombre podía darle órdenes, ¿verdad?