El hijo de la empresaria

Capítulo 19

Luego de una noche en la que por fin pudo descansar como era debido, Eunhyuk se enfiló al hospital para afrontar otra extensa jornada laboral. 

Tuvo que pensarlo dos veces antes de salir de la comodidad de su cama porque la realidad era que no quería ir. Sin embargo, al final de su reticencia sopesó en la balanza sus responsabilidades, entonces comenzó a prepararse antes de que se le hiciera demasiado tarde. 

Esto no era propio de él. No era que su trabajo le disgustase como para faltar. ¡Al contrario! A Eunhyuk le encantaba trabajar en el hospital. Lo que no le gustaba era lidiar con el caprichoso de Lee Donghae, que seguramente continuaba internado. 

El día anterior se había retirado con la insistencia de Yunho, pero con el disgusto severo del director. Éste no lo quería dejar ir porque sabía que Donghae no se tomaría a bien su ausencia, pero al final había cedido porque Eunhyuk de verdad se veía demacrado para la primera hora de la mañana. ¡Y cómo no, si casi no había dormido! Eunhyuk a penas había podido recitar coherentemente su informe acerca de la evolución del señor Lee, y eso que le pareció haber bostezado largamente en algunas partes. El director, al ver lo exhausto que se encontraba, finalmente tuvo que dejarlo ir pese a su renuencia. No obstante, le aseguró que Lee Donghae aun era su responsabilidad durante su ausencia, y le advirtió que si algo malo le sucedía durante esas horas, iría por su cabeza de todas formas. 

A esa altura de las circunstancias, a Eunhyuk ya no le quedaba temor a las posibles represalias. Muerto de sueño como se encontraba, registró en la historia clínica de Donghae el informe de su evolución, luego habló con Kyuhyun, el amigo de Donghae, que lo fue a visitar temprano en la mañana, y después, por fin se retiró a descansar. La amenaza latente que aguardaba tras el permiso del director quedó pequeña ante el enorme sueño que lo embargaba. Además... ¿Qué cosa mala le podía suceder a su "querido benefactor"? A Donghae le atribulaban problemas del tipo: "la comida está horrible", "estoy aburrido", "no puedo dormir". Y el más importante de todos: "tú eres Hyukjae".

Ésos no eran problemas reales; eran problemas de niño rico. Aun así, Eunhyuk decidió ir al hospital y enfrentar sus martirios. Eunhyuk ya se imaginaba las quejas que tendría Donghae para con él.

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Ni bien Eunhyuk llegó a la sala de pacientes, lo primero que hizo fue consultar a los residentes que habían estado de guardia acerca de Donghae. Tal como lo supuso, no hubo novedades significativas acerca de su estado de salud, pero respecto al comportamiento, Eunhyuk se sorprendió un poco al escuchar que el señor Lee no había causado problemas. No es que esperase que se portara mal, pero con los berrinches que éste hacía, se le hizo un tanto extraño. 

—¿No se quejó? ¿No protestó? —insistió algo incrédulo.

—Hasta la tarde el señor Lee estuvo muy irritable —contestó Taemin, un residente de primer año—. Incluso lo escuché gritar varias veces, pero Yunho lo atendió en aquellos momentos. No sé cómo lo hizo, pero logró apaciguarlo antes de irse. Desde ese momento, se portó bien y no volvió a gritar. 

—Aunque durante un breve momento creímos que se había molestado cuando le llevaron la cena, porque el personal de la cocina salió de la habitación con la bandeja de comida intacta —agregó otro residente de segundo año llamado Jongin—, pero cuando le consultamos al camarero, respondió que el señor Lee rechazó la comida porque había encargado su propia cena.