BLACKFOREST || Vkook

✧Capitulo 9 ✧

Pasado parte 4

Tres meses habían pasado desde la llegada de Hoseok a sus vidas. Hoseok era muy querido por Jungkook; siempre que tenían la oportunidad, salían a dar un paseo o simplemente iban a la casa del menor.

En este tiempo, los tres eran muy unidos, al menos desde el punto de vista de Taehyung y Jungkook, ya que Hoseok pensaba todo lo contrario. Para él, era nefasto escuchar la voz de Jungkook. En los últimos meses, Jungkook se la pasaba hablando de su Taehyung.

La simple idea de que estos dos fueran pareja le daba asco. Él solo quería a Taehyung para él, y haría lo que fuera necesario para que así fuera.

Jungkook, en cambio, comenzaba a abrir más sus sentimientos a su querido Hyung. En los últimos meses, sus pensamientos se centraban en Taehyung. Ya no tenía duda alguna: estaba enamorado de su Hyung, pero tenía miedo de confesar sus sentimientos y no ser correspondido.

Hobi le había abierto los ojos para darse cuenta de que sentía algo más por su Hyung. En los pocos meses que llevaba conociendo a Hoseok, él se había vuelto un buen amigo en el cual podía confiar.

Ahora ellos dos se encontraban caminando por un gran centro comercial en dirección a una tienda donde vendían collares.

Se acercaron para ver la gran colección de collares hasta que los ojos de Jungkook captaron unos hermosos collares que se complementaban.

—Señorita, ¿nos podría mostrar esos collares?

La joven que atendía asintió con la cabeza y fue por los collares señalados.

Cuando los colocó sobre el mostrador, Jungkook no dudó en tomarlos y verlos de cerca.

—Son hermosos. ¿Qué opinas, Hobi?

Hobi quedó cautivado. Sí que eran bonitos los collares, y se complementaban de manera que conformaban una luna rodeando una estrella.

—Sí lo son, Kook.

—Deberíamos llevarlos. ¿Qué dices?

—Claro —sonrió. Por primera vez era una sonrisa que no era fingida.

Jungkook sacó dinero de su billetera y le pagó a la vendedora.

Les entregaron los collares y salieron de la tienda. Jungkook sacó ambos collares de la bolsita y extendió la luna a Hoseok.

—Toma, la luna es preciosa. Quiero que la tengas porque eres especial para mí —Hoseok lo agarró entre sus manos y se lo colocó.

—Gracias, Kook.

Hoseok comenzaba a sentir una pizca de cariño por Jungkook por dentro, pero todos esos pensamientos quedaban en el olvido al pensar en Jeon junto a su Tae.

Esa tarde pasó lo más rápido posible y era momento de regresar a su hogar, así que se despidieron y Hoseok subió a su coche.

Jungkook se quedó parado ahí. Le habían ofrecido llevarlo a su casa, pero él quería despejar un poco su mente, así que se negó; quería disfrutar la tarde.

De repente, sus pensamientos se centraron en Taehyung, su Hyung. Ahora que sabía que le gustaba, su corazón no paraba de palpitar descontroladamente y una fuerte sonrisa se formó de cachete a cachete.

No se percató en el momento en el que llegó al pequeño bosque que suele frecuentar con su Hyung, se sentó en una roca y se quedó viendo la vista que tenía. Soltó un gran suspiro y vio el atardecer.