Jungkook realiza los preparativos para su declaración hacia el chico que le gusta sin tener la más mínima idea que su amigo Hoseok "salía" con el en secreto.
5 años después se encuentra con aquellas dos personas que lo dañaron por completo, así que...
Qué se supone que haría ahora. Estaba en un pozo sin salida, todo era sofocante. No hacía tanto que había vuelto de la casa de su Jungkook y quería volver con él.
Su gran casa ya no se sentía como un hogar, tan solo pisó la gran mansión su padre lo mandó a llamar, ya que quería hablar con él de algo sumamente importante. No se opuso, por lo que fue a su despacho y su padre hizo que tomara asiento para poder hablar. Tan solo se sentó y su padre empezó a reprochar su comportamiento en la cena que tuvieron recientemente con los Jung.
-¿Acaso no piensas en nosotros? -comenzó su padre- Pudimos haber perdido una gran inversión y por poco la arruinas.
Taehyung no sabía qué decir, se mantenía con la cabeza gacha mientras apretaba fuertemente sus puños sobre su regazo.
-No vas a decir nada -regañó el padre de Taehyung, ya molesto por no obtener respuesta alguna.- Todo esto lo hago por tu bien Taehyung, más te vale colaborar, el contrato dura 6 años a partir de ahora.
-N-No lo haré -se opuso fuertemente Taehyung- No me obligarás a hacer algo así, no me casaré con alguien que no amo.
-¿Amor? ¿Es acaso esto un chiste? El amor no es como te lo plantean en los cuentos Taehyung. Cuando se trata de negocios, uno se sacrifica, así como tu madre y yo.
-Por eso mismo no lo quiero de esa manera, no quiero vivir de engaños.
-Eres muy iluso hijo. Si no haces lo que yo te digo, olvídate de todo, hasta de tu amiguito ese que tanto quieres.
-NO -se levantó rápidamente de su lugar y se acercó más a su padre- Con Jungkook no te metas, él no tiene nada que ver en esto.
-Oh, ¿y lo defiendes? -dijo con tono burlesco- Pues ya dije, si no aceptas el trato olvídate de ese chico.
-No permitiré que le hagas algo. Es mi amigo -Taehyung comenzaba a molestarse más de lo que ya estaba.
-¿Amigo? Ja, es un chiste ¿verdad?. La manera en la que lo defiendes da a entender otra cosa, pero no diré más.- Se acomodó sobre su lugar.- Pero es aceptar el trato o perder lo que más quieres. Tú decides.
Taehyung se encontraba entre la espada y la pared. ¿Cómo se supone que aceptaría esa barbaridad? Tenía que pensar rápidamente. No quería que nada malo le pasara a su Jungkook, por lo que no quedaba de otra más que aceptar.
-Está bien, dame esos malditos papeles.
El padre de Taehyung agarró su carpeta y le acercó una pluma. Taehyung sin pensarlo más firmó, no sin antes leer las condiciones del contrato.
-Bien Taehyung, elegiste bien.
Taehyung salió rápidamente de ahí. Por alguna extraña razón se sentía como si le estuvieran arrebatando algo, como si alguien le faltara.
Lloró porque ya no era libre. Ahora estaba condenado por toda su vida a un matrimonio arreglado.
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