DxD: El Viaje del Jugador hacia la Necromancia (Hiatus)

Capítulo 72: La Princesa Carmesí

"CheckMate."

Miré al tembloroso Phenex cuyo rostro estaba aplastado contra la tierra bajo mis pies. Al final de la tercera ronda, apenas se atrevía a lanzar golpes.

Después de todo, las palabras todavía estaban en mi cabeza.

"Te dejaré paralizado sin posibilidad de recuperación".

Con lo dura que fue la paliza que le di, dudo que alguna vez pueda volver a asistir a un Rating Game. Después de todo, el simple hecho de ser golpeado por Issei fue suficiente para traumatizarlo.

Hice todo lo posible para traumatizarlo.

Si no puedes paralizar físicamente a un Phenex, entonces puedes hacerlo mentalmente. Al principio, estaba planeando detenerme en la segunda ronda, pero me decidí por la tercera ronda después de toda la mierda que habló. Y también quería ver si podía conseguir otro black flash sobre ese presumido hijo de puta.

Desafortunadamente, no pude, pero después de conseguir uno sentí que básicamente la forma en que manejaba mi energía maldita fue revisada y necesito explorar eso pronto.

Básicamente, antes era un artista daltónico que dibujaba sin siquiera saber qué significaban los colores y ahora era un artista no daltónico que realmente veía los colores con los que dibujaba.

No se me ocurre ninguna mejor explicación porque me duele la cabeza por usar tanta energía maldita. Pero sentí un alivio instantáneo cuando escuché a Grayfia declarar mi victoria.

Oh, se sintió tan dulce. El sabor de la victoria abrumadora e indiscutible.

La familia Phenex podría estar disgustada porque doblé a Riser como una manta y rompí su matrimonio, pero ¿y qué?

¿Quieren empezar una mierda? Ellos pueden. Déjalos intentarlo. No son ellos los que tienen el ejército de no-muertos en rápida expansión. Tengo a Azazel detrás de mí, un negocio de pociones en ciernes y pronto seré un gran éxito en la industria de las pociones.

A ver cuanto tardan en darme un golpe en la cabeza.

Pero después de que se declaró mi victoria noté algo en el rabillo de mi visión.

Rias estaba corriendo hacia mí, con una felicidad que sólo podía describir como contagiosa. Había lágrimas en las esquinas de ella que cayeron incontrolablemente mientras lucía una hermosa sonrisa. Honestamente, incluso mi corazón casi dio un vuelco al verlo.

"¡Akira!"

Ella saltó hacia mí y me tomó tan desprevenido que apenas la tomé en mis brazos. Sin embargo, en el momento en que estuvo en mis brazos, agarró el cuello de mi camisa con una fuerza que ni siquiera sabía que tenía antes de fijar sus labios en los míos.

Me besó con tanta ferocidad que básicamente estaba abusando de mi pobre boca. Nunca había tenido un beso tan intenso que apenas pudiera seguir el ritmo de tanta pasión.

Fue casi un minuto entero que ella juntó nuestros labios en su momento de pasión. Intensamente francés y saliva comercial. Ella sabía a fresas mientras que yo probablemente sabía a sangre.

Cuando nuestros labios se separaron por la única razón de que ella no podía respirar, todavía tenía los brazos alrededor de su cuello. Pude ver sus ojos azules mirándome con tanta pasión y esa pequeña curva de sus labios que se convirtió en una sonrisa sensual que casi me hizo sonrojar un poquito.

Yo, casi sonrojada. ¿Qué carajo pusieron en su estadística de encanto?

Pero ahora mismo, me preocupa que si no nos vamos ahora mismo, Rias me romperá las caderas frente al público. Ella ya me rasgó la camisa hasta la mitad.