— ¿Por qué no esperaste a que fuera por vos a tu casa? - digo dejándola entrar a la casa

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— ¿Por qué no esperaste a que fuera por vos a tu casa? - digo dejándola entrar a la casa

— Tenia que venir a dejarte el carro, mi papá no está contento, con que yo lo tenga y menos en el barrio en donde vivo, dice que solo me meteré en problemas si le pasa algo 

Si supiera que el carro lo compre para que ella lo usara, pero sabía que no le iba a parecer, asi que prefiero guardarme ese secreto para mí, al menos por ahora, y le vamos sumando secretos a la lista. 

—Está bien, ya le pedí a Magy que alistara tus cosas, de hecho estaba por salir, para irte a buscar 

—Perfecto, entonces vámonos - dice volviendo a salir de la casa, salgo y sin fijarme termino chocando con ella 

Que se ha quedado quieta al pie de la puerta, alcanzó a agarrarla de la cintura para que no caiga, dejándonos a una distancia muy corta, puedo ver sus mejillas colorarse, ella quita mis manos, sé su cintura toda cohibida 

—Perdón - digo, ella niega 

—Fue mío el error, no debí de quedarme ahí - alza sus manos, con las llaves del carro - A lo que vine, toma, gracias por prestármelo, te puedo asegurar que lo cuide 

—Estoy seguro de que fue asi - guardo las llaves en mi bolsa del pantalón. — Antes de irnos vamos a ir a otro lado 

—¿A dónde? 

—Tenemos que ir a hacer algunas compras - ella hace una mueca 

—Odio ir de comprar - sonrió, es tan diferente al resto 

—¿Por qué odias ir de compras? 

—Creo que viene más de la frustración de ver los aparadores llenos de prendas lindas y saber que no me puedo dar el lujo de comprar esas cosas, además de que soy demasiado indecisa y nunca sé qué elegir. Aunque ahora ya sé más cosas que antes no sabía, esa asesora es muy buena 

—Me alegra que ayas aprendido algo, porque hoy vamos a poner en práctica esos aprendizajes - ella me mira con cara de horror 

—¿Qué? ¿Por qué? 

—Por qué vas a tener que elegir un vestido de gala, zapatillas, accesorio y todo lo demás que necesites - hace una mueca 

—Te odio Ruggero - sonrió, porque sé que es mentira 

—Yo sé que en fondo me amas - ella rueda los ojos 

—Sí, claro, pero muy en el fondo - terminamos de bajar los escalones de la entrada de la casa y subimos al carro 

(...)

—¿Era necesario? - sonrió y asiento 

—Oh claro que es necesario. Es el más reciente, aquí está el cargador, te compre una carcaza, los AirPods y el cargador de ellos. También le compré un chip, el cual tiene un plan que pagaré cada mes, asi que vos no te preocupes. Vos solo disfruta de él 

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