Lost Revolution | RadioApple

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 4 | 𝘌𝘴𝘵𝘳𝘦𝘭𝘭𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘮𝘢𝘯̃𝘢𝘯𝘢

Habían pasado pocos días desde aquella gran discusión familiar y en la casa de los Morningstar la atmosfera era tan silenciosa, que a la hora de el almuerzo solo se escuchaban los balbuceos de él bebé de la beta. Nadie volvió a tocar el tema del matrimonio arreglado por conveniencia, aún que él alfa mayor sabia que se había ganado el desprecio de su menor hijo.

Pero como Sera lo había dicho, tenían un año para conocerse, por ello esta semana Adam empezaba ir casi a diario a recoger al menor para una que otra cita, Lucifer no tenia de otra que aceptar. No era que el rubio era mezquino o un anti-alfas, le agradaba el alfa, era divertido y atento, pero no lo que él buscaba tampoco era el momento o talvez era porque sabia que era una obligación y que si o si tenia que enlazarse, no tenia otra opción por más que alzara la voz.

La noche había caído y ambos jóvenes se encontraban en el carro del mayor quien llevaba al rubio como copiloto a su casa, el ambiente estaba callado y el menor parecía estar molesto. No era para menos, pues volvían de una reunión de sus amigos de Adam, quien cuando lo presento dijo que él era su omega, cosa que le hizo incomodar un poco y no se iba quedar callado, lo llamo para que le prestará atención, pues lo veía medio distraído.

-Adam  

-Dime, ya estamos cerca- En su interior ya quería llegar y ya dejarlo en su casa, para evitar conflictos con él, como aquel que tuvieron en el inicio de esta semana donde fue la segunda vez que se vieron después de el anuncio de su matrimonio. El omega le había reclamado del porque  había aceptado o porque no se oponía a casarse con un extraño, porque eso era lo que eran ahora. 

-Sabes que no estoy de acuerdo con esto, así que evita esos comentarios de decir que soy tu omega, tengo mi nombre sabias- La voz del rubio parecía darle jaqueca al mayor, nunca había salido con un omega así, usualmente las aventuras que había tenido, todos ellos era sumisos y se suponía que este era su enlazado, igual lo quería, quería domar ese reto y a aquel pequeño cuerpo. Ya estaban cerca de su casa así que se estaciono en un espacio libre, para poder hablar.

-No quiero pelear contigo, desde un principio te dije que quiero llevar la fiesta en paz, pero tu sigues igual de terco-volteo a verlo a los ojos el otro parecía estar molesto por el adjetivo de habían usado para describirlo.

-Y yo desde un principio te había dicho que hablaras con tu madre- cruzo sus brazos esperando a ver si el castaño había al menos hecho el intento de hacerlo.

-Entonce que es lo que quieres cariño, que Sera desligue el contrato con tu familia y que se queden en la calle-- De nuevo esas palabras que le hacían tomar conciencia y sentir ese enorme peso en sus hombros.Hubo un pequeño silencio por su parte y el castaño siguió hablando.

-Escúchame Lu, no quiero ponerte presión, ni hacer algo que tu no quieras, pero te vuelvo a repetir, hagamos que esto funcione  - tomo las manos de el omega para depositar un casto beso en ellas.

-Bien, ya debería irme se me hace tarde, gracias por este día- desvió la mirada avergonzado, se daba cuenta que el mayor estaba poniendo de su parte y él estaba a la defensiva, aunque no sabia las verdaderas intenciones del porque él quería continuar con esta farsa, pero decidió que ese tema le preguntaría en otra ocasión, se quito el cinturón de seguridad dispuesto a bajar, pero la mano del mayor en su muñeca lo detuvo.

-Espera, mañana habrá un festival de rock en el centro de la ciudad, me gustaría que me acompañaras - Él menor no sabia que contestar, no le gustaba ese genero de música escandalosa y menos estar rodeado de varias personas, él era más de escuchar música clásica o jazz, pero claro no culpaba al alfa de no saberlo, recién se estaban conociendo. 

Pero aun más importante era que mañana era sábado y le había prometido a Angel ir a verlo, pues ambos habían sonado como si se tuvieran mucho que decir y no quería cancelarlo como otras veces, que inventaba escusas para no ir, porque quería evitar todo contacto con él alfa de su amigo, ya que en varías ocasiones se le había insinuado y ofrecido trabajo en aquél cabaret.