Notas de una mente Bizarra

Nota 16

Pregúntame

Yo sí.

Yo sí soy una insensible por no importarme la opinión de nadie, ni la misericordia.

A mí sí me da la gana de decirte tus cuatro vainas a la cara sin importarme lo que sientas. Llámame como quieras, la sinceridad nunca será bien recibida.

Yo sí me besé con el que era amor de una amiga mientras ella estaba sufriendo por él. Me di mil golpes de pecho, pero sí lo hice y hubiera pasado a mayores si hubiese querido.

Me sentía sola y nadie me acompañaba. ¿Que más daba un cariño de alguien que no le importaba lo suficiente? Con que me deseara me bastaba, y sí, soy una puta por hacerlo y peor que una cínica al pedirle perdón a mi amiga después de la cochinada que le hice.

Yo sí soy seca, distante, odiosa, jocosa y petulante. No me gusta contestar mensajes ni llamadas, no sé disimular cuando algo me molesta, me río en momentos serios, te respondo como me sale del culo sin importarme que te moleste o no. Voy a ser todo lo cortante y chocante contigo si me caes mal y osas de hablarme. Soy peor que una culebra o un perro con rabia; en el momento en que me sienta amenazada te muerdo hasta incrustarte todo el veneno que llevo por dentro.

Yo sí soy capaz de matar.

Te metes con mi hermana, te mato.

Te metes con mi madre, te mato.

No hay punto, razón, ni misericordia que valga, no hay súplica que apliques, no hay perdón que conozca. Ellas son el amor de mi vida y soy capaz de hacerte sentir mal, de denigrante a lo más hondo, de volverte una porquería, de sacarte los trapos al sol, de convertirte en una completa mierda si solo las haces llorar a cualquiera de la dos. Ya después del daño profundo me inclino a los golpes.

No me importa tu dolor, no conozco otro dolor además del mío. No me pidas que te comprenda, que te dé consejos, que sea tu apoyo, yo soy capaz de hundirte conmigo. Mi consejo siempre será la salida más fácil; que te pegues un tiro.

¿Y en el amor? Soy peor. Me desaparezco por semanas, algunas veces soy muy seca, otras muy cariñosa, lloro por todo, y no un llanto cualquiera sino de novela; eso que vienen con gritos desgarradores como si me estuvieran matando y ni siquiera seré capaz de decirte el porqué probablemente porque yo ni lo sepa. No te daré explicaciones, a la primera que vea un movimiento extraño me largo, no soy celosa, no soy posesiva, básicamente actuaré como si no me importas aunque me importes y te volverás un culo intentado entenderme.

No soy víctima de nadie, soy un victimario, asesinando corazones heridos por la vida porque tengo la sangre fresca del mío evidenciada en mis manos.

Yo soy así.

No me preguntes por qué, pregúntame si me importa.

Sí.