MY YOU [kookv]

「capitulo veintiséis - antojo II」

BAEKHYUN

Fui directo hacia él y su mirada se posó en mí antes de darme una gran sonrisa.

─ Mi amor, todavía estás despi... ─no lo deje terminar la frase.

─ ¿Dónde estabas? ¿Estás bien?

─ Si, me encontré con unos amigos y se me fué el tiempo platicando con ellos... Yo...

Me dí la vuelta y subí corriendo las escaleras con Jungkook siguiéndome.

─ ¡Baekhyun! ─gritó pero no me detuve y corrí dentro de la habitación antes de cerrarle la puerta en la cara.

¡Toma eso!

─ ¡Lárgate!

─ Baekhyun... Joder. ¡Abre la puerta! ─empezó a golpear pero lo ignoré.

Con mucho gusto puede irse a la mierda.

─ Baek, cariño, abre la maldita puerta. No es lo que crees. ─suplico mientras yo me sentaba en la cama y me acostaba, con la mirada fija en la puerta.

─ Bueno, ahora tengo sueño y no abriré la puta puerta, así que puedes dormir en la sala. ─dije lo suficiente alto para que él me escuchara y lo escuché suspirar fuertemente.

─ No me moveré de aquí, Baekhyun. Asi que abre la maldita puerta.

─ Buena suerte durmiendo en el suelo frío, porque no vas a entrar aquí. ─cerré los ojos con una sonrisa de perra en mi cara.

─ Contaré hasta tres y si no abres...

─ ¡Oh, deja tus amenazas Jeon Jungkook y vete a dormir! Estoy cansado de tanto llorar y estar preocupado por tí toda la noche, y no me quedan energías para caminar hasta allí y abrirte la maldita puerta. ─dije para girarme hacia su lado antes de agarrar su almohada y abrazarla inhalando su aroma. Incluso si él no está aquí, al menos su almohada con su olor si.

Respiré hondo y estaba a punto de dormirme, cuando escuché la puerta abrirse y abrí los ojos de golpe. Me senté  y ví a Jungkook entrando a la habitación sonriéndome de lado antes de cerrar la puerta.

Levanté las cejas y él se detuvo en seco antes de sonreír más amplio y quitarse la camisa y tragué saliva, mirando descaradamente su cuerpo tonificado.

¡Malditas hormonas!

─ ¿Qu-qué estás haciendo Jungkook? ─pregunté mientras caminaba más y más cerca, hasta que se estuvo justo frente de mi.

Se arrastró hacia mí antes de inclinarse a mi altura.

─ He sido muy paciente contigo, bebé. Pero ahora no puedo. Ya no puedo controlarlo. Necesitas un castigo. ─él susurró antes de morderme el lóbulo de mi oreja y solté un gemido inesperado.

De inmediato, me presionó sobre el colchón, con él flotando sobre mí y mis mejillas se calentaron.

Me quitó la camisa, la arranco mejor dicho e instantáneamente comenzó a dejar besos húmedos por mi cuello antes de detenerse en mi lugar sensible y gemí. Empezó a chupar allí mientras sus manos moldeaban mis pechos y yo arqueaba mi espalda de placer.

─ Jungkook... ─gemí su nombre y él dejo escapar un suspiro.

Sus ojos se oscurecieron por la lujuria y el deseo mientras me miraba con avidez, haciéndome retorcer, y quererlo más.

─ Dime cuando quueras que me detenga, Baekhyun. ─me susurró al oído provocando escalofríos por mi columna.

En lugar de responder, lo rodeé con mis brazos por su cuello y lo acerqué a mí.

─ No pares. ─le susurré antes de dejar un beso en su mandíbula.

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Sus manos ardientes recorren mi cuerpo de arriba hacia abajo. Sus labios calientes, besan mi boca y siento un calor enorme y un infernal deseo por él; tenía mucho deseo ya reprimido por mi hermoso esposo. Cuándo mis manos empiezan a imitar a las suyas y acarician su cuerpo, pienso que seguro es el diablo mismo y me está llevando con él al infierno.

Pero este camino ya no tiene retorno, sobre todo cuando su mano empieza a despojarme de mis pantalones y bragas e instintivamente yo hago lo mismo con su pantalón y boxer.

Desnudos por fin, nuestras manos recorren la piel del otro. El calor del fuego que nos envuelve ha aumentado.

Después de todos los enojos y mal entendidos, ahora sólo me importan sus besos, sus caricias  y calmar este calor que tengo por él.

El embarazo me tiene súper hormonal.

Nuestros cuerpos  se envuelven el uno al otro, nuestras pieles se rozan, siento su polla dura pegada a mi muslo que se humedece a manchas forzadas. Mi respiración se acelera al compás de sus manos que ahora me rozan y hacen que me estremezca.

Cierro los ojos y las sensaciones del placer se intensifican, siento sus labios sobre mis pezones, intercambiando lamidas de uno al otro y todo mi cuerpo tiembla.

Dejo que sus manos me acaricien , que sus labios me besen, porque en este momento él es mi perdición y sus besos me guían al infierno mismo.

─ Si quieres parar, dime...

─ Continúa, solo no te recargues sobre mi vientre. ─asintió y continuó.

Se sitúa con cuidado sobre mí, ahora su dura polla chocó contra la mía, cuando la agarra, masturba un poco y la desliza por mi pliegue, ya estoy muy pero muy mojado allí atrás. Con paciencia va entrando en mí apretado culo.

Sus labios recorren mi cuello, sus manos acarician mis muslo, hasta que una mano se situa en mi cintura... Sus embestidas comenzaron de lento a rápido, después lo siento masturbar mi pene mientras sigue penetrandome con estocadas profundas y todo mi cuerpo se estremece del placer. Gimo cuando toca mi próstata. Y aumenta las embestidas más rápido.

Después de un rato, lo siento correrse dentro mío y segundos después yo también estallo en un maravilloso orgasmo que me eleva hasta el cielo y caigo en el infierno.

Me hizo el amor toda la madrugada.

Cuando terminó conmigo ya eran las cinco de la mañana y yo estaba dolorido y agotado.

Plantó un beso en mi frente antes de tirarme a sus brazos.

─ Duerme bien, mi amor. ─susurró y antes de que me diera cuenta ya estaba en brazos de morfeo.

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¿Qué tal van con la historia bellezas?

Estoy tratando de buscar un poco más de tiempo para editar los capítulos. Tenganme paciencia .

Adoro a ustedes💗