XXVIII. Oscuridad ante sus ojos

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Dos semanas habían transcurrido desde que Jungkook había entrado en celo, el lazo entre él y Taehyung se ha ido fortaleciendo e incluso el contacto físico sin la necesidad de aplicar el medicamento por completo, ha resultado beneficioso, sin embar...

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Dos semanas habían transcurrido desde que Jungkook había entrado en celo, el lazo entre él y Taehyung se ha ido fortaleciendo e incluso el contacto físico sin la necesidad de aplicar el medicamento por completo, ha resultado beneficioso, sin embargo, Seokjin observando desde una de las esquinas de la oficina, solo quiere que Taehyung esté ahí para calmar un poco el genio de Jungkook, porque justo ahora, la situación estaba tensa.

—Perdimos alrededor de cien mil millones de dólares —comenta Jungkook mirando a Seokjin—. ¿Quieres decir algo?

—Aurel está en la búsqueda para rastrear a donde se llevaron el dinero —explica Seokjin de brazos cruzados y Taeyang baja la mirada cuando Jungkook lo observa de manera intimidante.

—¡Aumenta la seguridad! —exige enfurecido—. Y te recomiendo que estés más pendiente de tu trabajo, porque si estás revolcándote con cuanta mujer se te atraviesa, dímelo y te largas de aquí.

Namjoon toca su frente frustrado y observa de reojo a Kai quien acariciaba una manilla que le había regalado Jimin. Hacía más de una semana que no veía a su esposo, la última vez que vio su sonrisa fue en el restaurante.

—No iba a contestar una puta llamada cuando ya me la estaba follando —expresa Seokjin un tanto incómodo—. Ese dinero te lo voy a reponer, así que baja tu maldito mal humor.

Los hombres en la reunión sintieron un bajón de azúcar al ver el tono en el que le respondió a Jungkook. Seokjin por dentro se reprende al haber dicho aquello de esa manera.

—¡Trae a Taehyung! —le grita histérico al alfa—, ¡Si quieres que mi puto mal genio desaparezca, haz que venga mi omega, pero como no está, te aguantas, imbécil! Porque yo no estoy trabajando con niños que dejan su puto celular en un motel y lo peor, borracho Seokjin ¿Cómo diablos se te ocurre quedarte en un maldito lugar así cuando el FBI está detrás de ti?

Seokjin agacha la cabeza y se queda callado, simplemente recibe el sermón como un merecido por su irresponsabilidad, pero esa noche no estaba bajo sus cabales, habían sucedido cosas y lo único que encontraba en su cabeza era ese beta...

—Dame dos días y tendrás el dinero de vuelta. Rastrearé la transferencia.

—¡Te daré solo un maldito día!

Namjoon le había advertido a Seokjin de que no saliera del país, pero con lo terco que era, prefirió ignorarlo y ahora estaba enfrentando las consecuencias. Hasta el momento el alfa ha mantenido reservado el motivo del porqué actuó de esa forma y lo que llega a pensar es que fue por Bela.

—Llama al coronel general de la Policía, le tengo una muy buena noticia —expresa Jungkook sonriendo mientras sirve una copa de Vodka. Los deseos de Taehyung se cumplían sin importar cuántas muertes se arrastren; no sería la primera ni la última vez.

Seokjin saca uno de sus celulares y marca el número, luego se lo entrega a Jungkook y este lo pone en altavoz, espera unos segundos hasta que escucha la voz gruesa del hombre.

Omega Pandillero | OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora