CAPITULO 14. LA ESENCIA DE LAS TRES.

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capitana Dareya.

Los cuerpos, estaban apilados unos encima del otros.

El espeso líquido rojo fluía hacia mi, formando un  charco bajo  mis pies. Charco causado por la sangre que destilaba mi cuerpo, sangre que no era mía.

Pequeños insectos revoloteaban alrededor de los cuerpos...

Algunos llegando a devorar la carne.

Y en medio de todo, como el final de un freakshow, estaba ahí.

La sangre, había cubierto hasta el último rincón de mi cuerpo y de cada metro de terreno, que tenía cada bulto de cuerpos muertos.

Su olor, se internaba hasta lo más profundo de mi ser y su sabor, se entremezclaba en mi boca.

Al fondo, unas figuras de enormes ojos, hablaban en una lengua que no alcanzaba a comprender.

Pese a que mis sentidos se habían agudizado... podía sentir todo... oírlo y verlo todo, aún con los ojos cerrados...

Pero, ni así alcanzaba a comprender, que sucedía en mi ser y a mí alrededor.

─ Devóralo todo ─ me decía.

─ Domínalos... Conviertete en el alfa, en la reina, en la tropa, en la luna, en Rashak.

Más que un susurro, aquella voz parecía más un grito.

Desesperación... Solo lo decía con desesperación.

En este punto... La verdad, ya no se qué es real y que no... es demasiado... mucho para que lo lidiase cualquiera.

Yo... Yo sola no...

¿Dónde estás?

Dante, ¿Dónde estás?

Ayúdame... ─ fue mi pensamiento ante esta masacre, ante este sanguinarismo.

Las piernas me tiemblan, el miedo sucumbe. Ella, nuevamente se está apoderando de mi cuerpo, de mi mente, de mi vida, su oscuridad me domina, me atrae, me guía.

Maleisha, mi otro yo.  ─ ¿Qué has hecho? ¿Por qué siento la oscuridad todavía en mi cuerpo?  ¿Dante dónde estás? Tú la controlas, yo no puedo, ella me domina, me consume, me doblega, como lo hace en este momento.

Siento mi cuerpo ser rodeado y retrocedo, no deseo más muertes, pero no puedo evitar el instinto de defensa, sin embargo, siento protección con esos brazos.

Mi olfato y el tacto me indican que no es Dante, su olor es fuerte, no se porque me atrae, debo retroceder, pero...

─ Soy yo. ─ Gruñe la voz masculina, su gruñido aún es felino, aunque reconozco el cambio humano, reconozco su olor, es el rey de la tribu Felina con gen de León.

Me huele con precaución, como buscando mi olor y...

─ No eres, Yaikai. ─ Musita como si sintiera pesar por ese hecho, como reconociendo un olor diferente en mi cuerpo, a pesar que Yaikai, Maleisha y yo; estamos en el  mismo  cuerpo y otras más, que han pasado en pequeños momentos y no les dieron tanta importancia como a nosotras tres.

No sé cuál es la verdadera dueña del cuerpo, quizás las tres, pero al sentirlo olfateando, comprendo que nuestras esencias son tan diferentes como nuestras personalidades. La esencia de las tres, nos identifica y diferencia al mismo tiempo ante las manadas.

─ Vamos ─ invita, llevándome a sus brazos, a su cuerpo, a su pecho; huele a hierro, a sangre, a felino, a seguridad y a  protección, no la que me brinda Dante, pero sí, para aliviar mi angustia.

UNIVERSE Of NEW SPECIES (Universo de Nuevas Especies) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora