UNIVERSE Of NEW SPECIES (Universo de Nuevas Especies)

CAPITULO 32 EL CORTEJO DE LOS HIBRIDOS. Parte I.

Narrador Omnisciente.

Las estrellas brillantes marcaban el cielo y se desplegaba de ellas el aire hieloso, el manto de oscuridad entre el hielo y la arena blanca de un bosque, donde los árboles tenían hojas cubiertas de una espesa neblina muy blanca y señalaban una noche que no ocultaba el manto de oscuridad, que desprendía la excitación, que se propagaba entre  los ojos brillantes y blancos como la nieve de las criaturas que lo habitaban. Esta vez, sin embargo, el bosque cubierto de hielo, no resonaba con los rugidos de los machos, sino con los agudos chillidos y los gruñidos guturales de las hembras híbridas, tan excitadas como los machos de cada Tribu.

La tradición dictaba que, después de cada batalla entre los machos, las hembras se enfrentaran en una competencia brutal, para determinar su destino. Las ganadoras de cada tribu, tendrían los honores de elegir a su Rey, sus jerarcas y sus parejas y, por ende, de influir en el futuro de su Tribu y hasta llegar a convertirse en su reina o obtener un cargo de Jerarquía, en el mandato de las bestias femeninas.

La arena blanca como la nieve, pero bañada por la luz de la luna, estaba dividida en tres secciones, cada una correspondiente a una de las Tribus. En cada sección, las hembras se enfrentaban con una ferocidad que eclipsaba incluso a los machos. Ellos, eran eclipsados con los olores femeninos de las bestias híbridas, conformadas por mujeres. En las luchas ellas coqueteaban unas a otras, llamando la atención de los machos híbridos. Sus caderas se movían sin comtemplación, enseñando sus coños lubricados por la ansiedad del juego sexual. Los machos, se lamían los labios ansiosos por penetrarlas con fuerza. Sus vergas se enfurecían dolorosas por la atracción del olor femenino, sus pechos subían y bajaban observando el espectacular ritual femenino.

Las hembras Nkrillz, eran las más venenosas de las tres Tribus y escupían ácido.

Las Carmilions, eran corpulentas y se golpeaban con sus poderosas garras y...

Las Arkouda, con las habilidades de las Camilions, pero estas eran más ágiles y letales. Ellas,  se movían como sombras entre los árboles.

A medida que pasaba el tiempo, las hembras perdedoras caían una a una, heridas y exhaustas. El aire estaba cargado de tensión, el olor a sangre y adrenalina era casi palpable. En cada mirada, en cada movimiento, se podía sentir la determinación de estas guerreras híbridas.

Finalmente, solo quedaban tres hembras: las ganadoras para los Reyes. Pero..., el Rey de los Nkrillz, gozaba del galardón del apareamiento con la ganadora Arkouda y la Nkrillz, ya que los Arkouda, no tenían a su Rey, ni jerarquías.

Pero..., esa noche las hembras Camilions, al llegar al campo de batalla, que luego acostumbraba a relucir con la gran orgía híbrida, las hembras se consiguieron sin el olor de los machos Camilions. Sus olfatos de alzaron y, el olor de los Camilions, estaba mezclado con los Arkoudas. Ya no existían machos Camilions, porque ahora, todos ellos eran Arkoudas.

Las hembras Camilions, se observaron unas a otras. Una Tribu, había desaparecido en menos del transcurrir de una noche. Las demás hembras de las otras tribus, no pasaron desapercibido el hecho que ya no eran tres Tribus, sino dos de ellas y el olor del Rey Camilions, lo poseía el nuevo Rey Arkouda.

La majestuosidad de la hembra, enseguida instuyó que una de las profecías se había cumplido, pero todavía faltaba la integración de las tres Tribus.

Las hembras Camilions, se acercaron nerviosas y Dante el nuevo Rey de los Arkodas, se levantó de sus aposentos de Rey Arkouda. Su instinto le dijo que debía contagiarlas, de lo contrario ellas, no aguantarían que cualquier Arkouda, las poseyera en un futuro muy cercano. Dante, dirige la visión  a su tribu y observa que los nuevos Arkoudas contagiados por él, son más poderosos que hasta  los Arkoudas más antiguos. Dante, tomó la decisión de contagiar a su nueva Tribu, con su propio gen Arkouda, mucho más fuerte que el anterior, sin darse cuenta que ese gen tenía mucho de los Nkrillz y seguiría evolucionando mucho más letal. Con su contagio, su tribu está evolucionando a una Tribu mucho más poderosa y letal.

Dante, dió la orden de contagio  y los colmillos Arkouda, se clavaron primero en las hembras Camilions, unificándolas a las filas de los ejércitos de la Tribu Arkouda.

Las híbridas Camilions, en transformación, esa noche pasarían genéticamente por contagio a ser Arkoudas, con tan solo una orden de su Rey.

Él Rey de los Nkrillz, observó el contagio que se propagó a gran velocidad en los Camilions y los propios Arkoudas antiguos, y... este hecho Arkouda, le preocupó sobremanera, porque ninguno en su Tribu, tenía esa habilidad de contagio tan profunda y al mismo tiempo ligera, letal y rápida.

Dante, observa a sus hombres, sabe que el instinto animal por el apareamiento, puede hacerlos irracional para luchar por la hembra que desean, pero todo ese tiempo a estudiado a las tribus y sabe que deben esperar a la lucha de selección ofrendada, después de una batalla.

Él Rey de los Nkrillz, ordena a su Tribu, mantener la compostura y...

Las hembras, se enfrentan en un combate final para el apareamiento, una danza sangrienta entre fuerza sobrehumana, colmillos puntiagudos  y garras filosas. Cada golpe de las híbridas hembras era certero, cada esquivación perfecta. Ellas, eran unas excelentes guerreras y podían elegir al macho que deseaban las dominara.

Al final,  las más fuertes de las  Arkoudas y las Nkrillz, eran las que poseían su tributo de copular con los Reyes,  Coroneles y Capitanes.

Con un rugido triunfante, la híbrida Arkouda, se dirigió hacia la sección de la Tribu macho Arkouda.

Dante, gruñó con fiereza cuando la híbrida se paró frente a él y luego se arrodilló tomando su verga a punto de reventar.

Los gruñidos bestiales se escucharon en todo el campo que antes, estaba en una gran guerra combatiente.

Dante, observa a su tribu y todos tenían la verga en las garras de las hembras que estaban dispuestas a devorarlas.

Mientras tanto, en las otras secciones de la arena congelada, las hembras derrotadas se lamen las heridas y aceptaban su destino y...

Las filas de los machos se lanzan sobre las hembras dispuestos a reventar sus coños.