16 Forever ©

20. Todo sale a la luz.

Narradora.

-Vamos, Samara. -Michelle había estado molestando a la contraria todo el día.

-No, Michelle. No voy a decirte lo que vi ahí. -voltea a verla ya cansada de que le esté insistiendo. -Ya deja de estar cagando palo.

Ambas caminaban y estaban haciendo exploración en aquel bosque, acostumbrándose a su entorno. Buscaban alguna comida que sea comestible, alguna fruta, conejo o al menos un pez.

Todos estaban de malhumor, el hambre era fuerte y querían comer a la de ya. Se preguntarán porque ellas fueron las que van por algo de comer, una fue por voluntad y la otra por votación y porque aparte quería saber chisme.

-¿Por qué eres tan aburrida? -cuestiona mientras se queja e incluso se cruza de brazos.

-¿Por qué eres tan metiche? -Samara le imito el tono con otra pregunta para luego seguir caminando hacia un arroyo para poder buscar algún pez.

Ninguna decía nada y parecía que aquella atmósfera era algo tranquila y tensa a la vez, Samara le pidió a Michelle que atrapé algunos peces, ya que ella no ha hecho algo en aquella cabaña. Sólo les tomó algunos intentos y casi una hora, para el intento número quince cayó de espaldas por el susto que le dio una sirena.

Aquella sirena intentaba hablar pero ambas chicas no entendían, así que aquella sirena sale del agua y algo asqueroso comenzó a cambiar de aspecto para parecerse a ellas, como un humano.

-¿Sira? -el asombro de ellas al ver aquel chico, Samara se acerca para brindarle algo para que se cubra su cuerpo.

-¿Cómo es que siendo sirena se ve como una mujer pero así de humano parece un hombre? -aquella pregunta y curiosidad de Michelle hizo que Sira sólo se encogiera de hombros.

-Eso no importa ¿Qué haces aquí? -la castaña alzo aquel palo de madera que estaba filoso hacia Sira para que no les hiciera nada.

Sira sólo levanta ambas manos algo inofensivo mientras les daba una sonrisa nerviosa. Se mueve para luego ayudarlas a capturar algunos peces, eso que ya tenía algunos en una red y se los entrega mientras aún sonreía.

Ambas chicas se quedan sorprendidas por eso, Michelle los acepta al trancazo con una sonrisa de que ya estaba desesperada de comer algo, en cambio Samara, ella aún estaba dudosa de aceptar eso. Se acerca a la contraria para quitarle el saco de peces pero está retrocede.

-¡Woah! Alto ahí, querida. -pone el costal atrás de ella mientras veía a la otra. -¿Qué crees que haces?

-¿Inspeccionar aquellos peces? -responde algo dudosa, dándole una mirada de que no confiaba aún. -¿Por qué aceptar si antes nos quería atacar?

Michelle se encoge de hombros mientras la miraba, empieza a correr hacia la cabaña donde se encontraban todos, Samara le grita que regresará mientras la perseguía. Sira por otro lado sólo las seguía sin decir nada más. No era una persecución algo como tal de enojo pero uno está consciente de que recibir cosas de un extraño era de dudar.

Llegan a la cabaña entrando de repente, Ryuu se asusta por eso lanzando fuego hacia Henry quemándole el trasero, la pequeña dragona sólo se ríe nerviosa y se va corriendo hacia Kevin por protección. Los chicos dejan de hacer lo que estaban haciendo para estar alertas cuando ven a Sira entrar a la cabaña, tenía una sonrisa en su rostro como si se estuviera asombrando por todo lo que veía. Las chicas retroceden un poco mientras agarran algunas herramientas para poder defenderse.

Algo los detiene. Syrah se interpone en medio de todos mientras elevaba sus manos para que se detuviera. Su mirada se posa en Sira inspeccionando su actitud para ver si era de confiar, el contrario trata de hablar y señala el costal que tenía Michelle en manos y mientras se notaba que estaba contando algo.