💋Capítulo 24💋

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Jimin se encontraba nuevamente en su salón de clases cuando recibió otro mensaje de parte de Jungkook, "¿¿¿Estás allí???. Lo leyó, pero no le tomó importancia así que nuevamente volvió a dejarlo sobre la mesa.

La puerta del salón fue abierta por la secretaria, quien entró con notaria preocupación en el rostro.

— Oh, lamento interrumpir.— dijo a la profesora.— Park Jimin.— le miró.— Tienes una llamada en la oficina.— le miró con obviedad.— Es tú padre, dice que es urgente.— al escuchar eso, Jimin rápidamente se puso de pie, tomó su bolso y siguió a la mujer.— El teléfono está por allá querido.— lo señaló.

— Okey.— se limitó a responder.

— Aish, espero que no sea nada serio.

Jimin tomó el teléfono y rápidamente habló.

— ¿Hola?.— al otro lado de la línea Jungkook se encontraba caminando.

— ¿Qué está sucediendo contigo?.— Jimin se sorprendió al escuchar la voz de Jungkook al otro lado.

— ¿Qué?.— preguntó avergonzado bajo la atenta mirada de la secretaria.— Ah, ¿de qué hablas papá?.

— ¿Por qué no contestas mis mensajes?.— preguntó Jungkook.

Jimin como pudo se alejó de aquella mujer.

— Pues... ¿qué?.— preguntó con fingida sorpresa.— Ah, por todos los cielos, es horrible... que mala noticia sobre la tía...— Jimin miraba en ditintas direcciones buscando inspiración para que algún nombre llegara a su mente rápidamente. A lo lejos visualizó un jarrón con rosas.— Rosa.— La secretaria se alarmó.

— ¿Está todo bien?.

— No.— respondió Jimin con obviedad. Aquella mujer le miró con preocupación.— ¿Podría darme un momento en privado?, por favor.— pidió señalando una pequeña oficina.

— Claro.— respondió asintiendo.

— Solo deme un instante. Voy a pasar a la oficina para procesarlo un momento.— explicó y sin más cerró la puerta.— ¿Por qué finges ser mi padre?.— preguntó seriamente a Jungkook.

— Es lo único que se me ocurrió para hacer que me respondieras.

— Que mentira tan grande.— dijo caminando un poco, inconscientemente jalando el teléfono que se encontraba al otro lado. La secretaria por ello se asustó.

— No, si es cierto, es cierto. Nunca me llamas y cuando escribes me envías unos extraños mensajes de dos palabras, como, no sé, cuídate Jungkook, hasta luego.— Jimin suspiró al otro lado de la línea.— ¿Quieres terminar conmigo?.— le preguntó preocupado.

— ¡¿Qué?!.— preguntó Jimin alterado.— No.— respondió rápidamente.— No, no, no, no. Es lo contrario.

— ¿Entonces qué?, ¿por qué me ignoras siempre?.— Jimin lo pensó un poco.

— No, no lo sé.— tomó una pausa.— Creo que estoy intentando ser maduro y no parecer asfixiante.— Jungkook suspiró.

— Pues ya te dije que quiero que esto funcione.

— Lo sé, pero siempre dice eso la gente cuando se va. Solo quería darte tú espacio, para que pudieras descubrir si esto es realmente lo que quieres.

— Espacio, espacio. Yo, yo no quiero espacio. Espacio no es lo que quiero, te lo dije, no quiero espacio.— dijo caminando de un lado a otro.— Te quiero a ti, te quiero cerca de mí todo el tiempo. Te quiero conmigo ahora, de hecho, yo te quiero, ¿okey?.— dijo recostándose sobre una pared.— Jimin sonrió ante lo dicho por Jungkook.— Escríbeme, llámame, envíame una paloma mensajera.— rió junto a Jimin.— Sea lo que sea, ¿okey?, sea lo que sea... pero no me des espacio.

— Okey.— respondió Jimin alegremente.

— Okey.— respondió Jungkook con una sonrisa.

Unas horas después Jimin se encontraba junto a Taehyung frente al consejo estudiantil.

Primero, tenemos a Park Jimin y Jeon Taehyung.— dijo sonriente una de las chicas encargadas del consejo estudiantil.

— Oh, hola a todos. Estamos emocionados por la recaudación de fondos de este año y la oportunidad presente.— habló Jimin leyendo sus fichas.— Con base a las ganancias del año anterior...— la mayoría de los encargados del consejo estudiantil mostraban caras de aburrimiento mientras escuchaban a Jimin hablar.— Creemos que sería muy bueno...

— Los que estén a favor de que el club de baile ponga un stand de besos para este año para la recaudación indíquelo diciendo sí.— habló uno de los encargados interrumpiendo a Jimin.

— Sí.— respondieron todos casi al unísono.

— Los que estén en contra digan no.— volvió a hablar.

— Noo.— respondió Taehyung desganado con una sonrisa. Todos los presentes le miraron, unos sorprendidos y otros simplemente le enviaban dagas con sus miradas. Taehyung se alarmó y rápidamente los miró a todos.— Esperen en realidad no sé porqué dije eso.

Ignorando a Taehyung. El chico siguió hablando.

— Que conste en actas que los sí, ganan. El stand de besos, se aprueba.— añadió, así terminando la reunión.

El resto aplaudió muy emocionado. Y una vez más Jimin volvió a lanzar sus fichas.

— Bueno ya que todo esta tan acordado, lo que nos causa curiosidad realmente es a quién eligieron para el equipo de besadores esta vez.— añadió una de las encargadas.

— Sin Jeon como estelar para atraer a gente que pague, creo que el puesto podría no ser un éxito este año.— habló Rose.

— A-ah, mmm, es un buen punto.— mencionó Jimin.

— El año pasado será difícil de superar.— mencionó Jennie.

— A-ah, pues...

— Es difícil.— apoyo Lisa.

— Es cierto.— habló nuevamente la encargada.— ¿Ideas?.

— Bueno, de hecho, las ideas...— Jimin tomó la paleta que Taehyung tenía en sus manos y la llevó a su boca para que este no articulara palabra alguna.

— Claro, está bien, es un buen punto. Excelente punto. Bueno de hecho, hemos decidido mantener la lista de este año en secreto. Pero tranquilos porque ya sé quienes están pensando muchos de ustedes y la respuesta es sí, sí van a estar ahí.

Los presentes asintieron emocionados por aquellas palabras y Taehyung giró a mirar a su mejor amigo, quien no dijo nada al respecto.

Al salir de aquel lugar, Taehyung inmediatamente le miró.

— ¿Entonces aún no tenemos a nadie, verdad?.

— Sí, es correcto.— respondió Jimin con simpleza.

Jimin ya se encontraba en casa luego de un largo primer día de escuela. Estaba en su cama muy cómodo hablando por vídeo llamada con Jungkook.

— ¿Y cómo está la tía Rosa?.— preguntó Jungkook en broma.

— Ay, por favor. — Jungkook empezó a reír. Jimin le miró tiernamente.— Te extraño, cretino.

— Yo te extraño más.

— ¿Y ya eres famoso en el campus?.— Jungkook rió.

— De hecho, la verdad, aún no. Bueno es algo diferente aquí.

— ¿A qué te refieres?.

— Bueno... mmm.

— ¿Qué pasa?.

— Nada, no pasa nada, solo que... no, no importa.— Jimin suspiró.

— Oye, la nostalgia es normal.

— Estoy, e-estoy bien de verdad. E-estoy bien, la v-verdad e-es que, estoy bien.— respondió Jungkook fingiendo indiferencia, Jimin rodó los ojos, lo conocía.

El Stand De Los Besos - [Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora