18 de febrero de 2012.
— Ven aquí pequeño demonio.— Llamo a mi bebe mientras este se esconde entre las cortinas.
— Aleky no ta.— Dice el entre risas.
— Oh, ¿Qué hare yo sin mi bebe? — Escucho como ríe.— ¡Llamen a la policía! ¡Aleksys no está! — Comienzo a reír con el, finjo llorar un poco y tomo a tortuguin, la tortuga de felpa del pequeño.— Oh guin, Aleky no está.
— Nu mami, no llode.— Dice mi bebe haciendo pucheros y corriendo hasta mi.
— ¡Aquí estas! — Le grito y comienzo a hacerle cosquillas.
— ¡Ya! — Grita el entre risas.
— Muy bien pequeñín, ahora hay que cambiarte porque no tarda en llegar Collin.
— ¡Ti! ¡Lin! — Grita el intentando desvestirse.
Le quito su pijama de batman y le pongo unos jeans y una playera de pececitos.
— No mami, baman.— Dice mi pequeño enfurruñado.
— Bebe, ayer te puse una playera de batman, no puedes vestir siempre de él...— Le digo.
— ¡Quelo baman! —Lloriquea viéndome con sus ojazos grises.
— Ya pues, ya.— Retiro la otra playera y le pongo una gris con el logo de su personaje favorito
— ¿Están listos?— Pregunta Steven entrando a la habitación.
— Ti, litos.— Dice mi pequeño pidiéndome brazos.
— No pequeño, mami no te puede cargar.
— Tu no carga, mami si.—Dice el enfurruñado.
— ¿Caminas conmigo? — Le pregunto tomando la manita.
— ¡Ti! — Grita entusiasmado y salimos de ahí.
Últimamente Aleksys rechaza a Steven y no le dice "papi" como antes, siempre se enoja con él o cosas así, según muchas páginas de internet es normal en los niños celar a sus madres así que no me preocupo.
Entro a mi cuarto para terminar de alistarme y pongo a mi pequeño sentado en la cama.
— ¿Este o este otro? — Le pregunto mostrando dos vestidos, el primero azul eléctrico, el segundo negro, ambos sencillos y a la rodilla.
— ¡Ete! — Dice mi pequeño señalando el negro.
— Muy bien.
Termino de cambiarme y me maquillo rápidamente, escucho como suena el timbre y la voz de mi mejor amiga inunda la casa y cabe aclarar que es enorme.
— ¡Ya llego por quien lloraban!
— Sube.— Le grito desde la habitación y segundos después entra junto con Collin.
— ¡Lin! — Grita mi bebe bajándose de la cama.
— ¡Aleky!.— Grita Collin corriendo hasta Aleksys y ambos se abrazan como si no se vieran todos los días.
— Ya los quiero ver cuando tengan dieciséis.— Dice mi amiga riendo.
— ¿Cómo me veo? — Le pregunto girando sobre mi propio eje.
— Hermosa.— Murmura.
— Ya lo sé.— Le guiño un ojo.
— ¿Ya se fue Steven? — Pregunto mirándola atreves del espejo.
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Mi hermosa estupidez. #1
Roman d'amourAlessia McFare a sus cortos 19 años cree haber cometido la peor estupidez de su vida ¿Sera esto cierto? Tras alejarse del lugar que la vio crecer y volver a su ciudad natal, cree tener por fin un poco de estabilidad para su hermana, para ella y s...