My Lovely Enemy (Renesmee and Alec)

CAPITULO 8

-Sigueme-Dijo al cabo de un rato, caminamos atravez de mas pasillos hasta que Alec se detuvo yo sin esperarmelo seguí caminando de modo que choque con su espalda, sorprendentemente no me reprimió, saco un pañuelo rojo y lo extendió.

-Alec, lamento desilusionarte pero no va a venir ningún toro-Dije sabiendo para que quería en realidad utilizar el pañuelo.

-Date la vuelta-Lo mire con el seño fruncido pero hice lo que me pidió, no pude evitar estremecerme sintiendo su fornido cuerpo solo a unos centímetros del mio, puso el paño alrededor de mis ojos y rápidamente hizo un hábil nudo.

-¿Que haces?-Pregunte nerviosa al sentir como me cargaba sobre su hombro.

-Si lo prefieres puedo bajarte y dejar que encuentres sola el camino-Resignada me quede quieta.

-¿Para que el paño?-Sentí como Alec se detenía bruscamente.

-¿Como que para que? Obviamente no puedo permitirte ver la salida hacia el bosque-El sabía perfectamente que no me refería a eso.

-Pero pudiste habértelo ahorrado y simplemente bloquear mi sentido de la vista-

-¿Quien te lo dijo?-Pregunto molesto, contuve una sonrisa.

-¿Que? ¿Que desarrollaste tu don de manera que ahora puedes no solo bloquear los cinco sentidos sino también escoger solo bloquear uno? Mmm digamos que a la lista de Chelsea se le escapo mientras teníamos una pelea y me presumía lo "impresionante" que eras-Murmuro algo en italiano que por su tono probablemente no fuera un cumplido.

-Más te vale mantener cerrado el pico-Amenazo, antes de bajarme bruscamente al suelo y quitarme el paño de los ojos.

-Nada me impide no abrirlo-Conteste desafiante levantando mi mentón. Y Alec hizo algo realmente inesperado, estampo sus labios contra los mios, el beso comenzo lento y suave hasta que fue subiendo de tono, me sorprendí a mi misma correspondiendo el beso, apoye mi mano en su cuello y mordí ligeramente su labio inferior .Alec por su parte deslizo su lengua habilmente por mi boca, había tantas emociones contenidas en ese beso odio, emoción, sorpresa pero sobretodo deseo.

Y es que después de todo no dicen que del odio al amor hay un solo paso.

Pero lo nuestro no era amor, simplemente era imposible ¿Un vulturi y una Cullen? Ni en la mejor licuadora se mezclan.

Abrí los ojos hasta ese momento me di cuenta que los había mantenido cerrados.

-Cullen, por tu propio bien no deberías ser tan deseable-Suspiro yo aun seguía en un estado de shock ¿Que acababa de ocurrir? Me sentía en un universo alterno donde todo estaba al reves. -Ni una palabra de esto a nadie-¿Acaso lo avergonzaba haberse besado conmigo? ¡Auch! Golpe para mi ego.

-Mmmm...-Fue mi única respuesta.

-Cullen hablo en serio si...-Lo interrumpí bruscamente

-Dejemoslo en eso Vulturi, pese a lo que crees tus metodos para hacerme callar no son tan placenteros-Por su mirada supe que habia herido su orgullo.

-Hace unos momentos no hubieras dicho eso-Lo ignore y me puse a olfatear el aire buscando alguna presa.

Para cuando habiamos regresado al castillo ya eran las ocho de la noche, Alec se fue sin decirme ni una palabra, segui su ejemplo, hasta que una mano me detuvo, esto ya se les estaba haciendo una mala costumbre a los Vulturis.

-Félix-Dije a modo de saludo, me miro socarronamente y puso un brazo alrededor de mis hombros justo cuando iba a pedirle que lo apartara me percate de que Alec nos obserbaba.

-Me preguntaba si querías salir conmigo-Lo dijo de una forma que no sono como pregunta, si le decía que no el estúpido de Alec creería que su beso había influido en mi decisión, así que me veía obligada a aceptar.

-Por supuesto, ¿Cuándo?-Pregunté forsando una sonrisa.

-Hoy ¿Te veo aquí a las once?-

-Es algo repentino...-Escuhe un bufido por parte de Alec asi que me apresure a agregar.

-Estare encantada, nos vemos a las once-Dije antes de irme

Félix no merecia no que me cambiara el atuendo, lo unico que hice fue retocar mi brillo labial y aplicarme perfume, mire el reloj las once.

-¿Te hice esperar?-Pregunte fingiendo como si no lo hubiera hecho a proposito.

-Que va, acabo de llegar-Entorne mis ojos.

-Y bien ¿A donde vamos?-Ya habiamos salido del castillo y nos encontrabamos en un bosque, reconocí que no era el mismo en el que Alec y yo habiamos estado cazando.

-Solo quería caminar-Maldeci internamente por haber venido, habia un silencio incomodo y ya llebabamos mas de una hora caminando.

-Félix ¿Estas seguro que esta permitido estar aquí?-Pregunté nerviosa, ahora realmente nos habiamos alejado y no recordaba como regresar.

-No, pero ¿Desde cuando has tu seguido las reglas? ademas esta oscuro y aquí nadie puede encontrarnos-Hubo algo en su tono que provoco un escalofrio en mi.

Supe inmediatamente que sus intenciones no eran decorosas.