Definitivamente enamorado [RenMin]

29

― ¿Podría apresurarse señor?

― Lo siento chico, hay mucho tráfico y no puedo ir más rápido.

Renjun había salido de la universidad y tomado un taxi, pero las calles estaban totalmente llenas.

― ¿Podría detenerse allí? ―dijo el omega apuntando hacia una estación de autobuses.

― Lo siento pero todavía faltan unos carriles para llegar allá.

― De acuerdo, muchas gracias ―dijo extendiéndole el dinero.

― P-pero no hemos llegado todavía, no me pague-

― No importa, gracias por acercarme ―sonrió y bajó del taxi.

― ¡Adiós chico! Ha...que lindo, de seguro va a ver a su novia y por eso anda apurado, los niños de ahora son muy románticos ―dijo sonriendo y viendo la foto de su esposa.

Un claxon se oyó en la parte de atrás.

― ¡Ya voy, ya voy!

[....]

― Tranquilo Jaem, Dodo dijo que ya estaba en camino.

― Eso dijiste hace una hora y media.

Ambos alfas estaban ocultándose detrás de los arbustos esperando al omega.

― ¿Hay tráfico?

― ¿Y si no me recuerda? ¿Y si no le gusto?

― No seas sonso.

El menor lo miró confundido.

― Jaem creo que le fascinará que seas tú.

― Eso espero.

― Ahí viene.

Renjun caminaba sin aliento, todavía faltaban algunas calles para llegar, no tuvo que haberse bajado antes del taxi, miró al rededor buscando al misterioso chico.

― Vamos, ve. ―dijo Jaehyun empujando al menor.

Jaemin quedó en frente de Renjun, ambos se miraron a los ojos y el alfa agitó su mano en el aire como forma de saludo.

― ¿Por qué tienes un antifaz? ―preguntó sonriendo.

El más alto no quería hablar ya que temía que reconociera su voz, así que se encogió de hombros y le extendió el tulipán al omega.

― Oh, gracias ―dijo aceptando el detalle sonrojado ― Pero, ¿Podrías quitarte el antifaz? y ¿Por qué no hablas?

Jaemin apuntó a su garganta.

― ¿Te duele?

Detrás de los arbustos se encontraba Jaehyun.

― Qué tonto es, dios mío. ―negó con la cabeza.

― ¿Qué ocurre? ―preguntó Doyoung llegando atrás de él.

― Están hablando de cualquier cosa y Jaemin no le revela la verdad aún.

― Necesitan un empujón.