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Capitulo 23

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Capitulo 23

Ese fin de semana Claudia bajó a la cocina y lo encontró  peleándose con una gran cesta de picnic.

—¿Qué estás haciendo?

—Te voy a llevar de picnic.

Ella se rio.

—¿Se ha ido corriendo la cocinera después de prepararte toda la cesta de picnic para un sábado por la mañana?

Él se la quedó mirando.

—Oportunamente, hoy no ha venido a trabajar.

—¿Has hecho tú lo que sea que hay en esa cesta?

—Aja

Ella se estaba riendo cuando él cogió la cesta de picnic con un brazo y la

manta con la mano contraria, y ambos salieron por la puerta.

—¿Tu chófer también está libre ? Deberías haberle llamado para que viniera.

Él la miró con los ojos entrecerrados.

—Me parece ofensivo que no confíes en que puedo llevar a mi novia de padeo sin necesitar a la cocinera y al chófer. —Le sostuvo abierta la puerta para que subiera.

—¿Enserio tambié tiene el día libre?

—Sí. Él tampoco ha venido a trabajar hoy.

Claudia no se lo creyó ni por un instante, y cuando él se metió en el coche junto a ella, en el lado del conductor, su expresión dejó claro que estaba mintiendo.

—¿Estás lista?

—Sí. Vamos allá. —Se frotó el abultado vientre.

Bruce estiró la mano para hacer lo mismo, deslizando la palma por encima.

—Me muero de ganas de que estén aquí.

Cuánto llegaron Bruce busco un lugar tranquilo donde tender la manta.

—Este vestido es precioso.

—Te queda precioso a ti.

—Qué bien se te da complacer a tu novia.

Él bajó la vista y se rio como si tuviera alguna broma secreta de la que ella no estuviera enterada.

—Complacer a mi novia.

—Sí. —Lo miró de cerca—. Estás tramando algo, ¿verdad?

—Un hombre lleva a su novia de picnic y la novia piensa que está tramando algo sospechoso.

—Ay… —Ella sonrió—. No dudo de ti. Es solo que te conozco, cariño—dijo con voz cantarina.

—Vamos a comer. Me muero de hambre.

Claudia le ayudó a sacar las cosas— realmente se había esperado había metido media despensa.

—Vaya, esto es muy alentador, ¿no?— Murmuró ella viendo a los niños llorar en algunas partes y a sus madres tratando de calmar a esas pequeñas fieras.

Estoy embarazada del Ceo #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora