17

1K 51 2
                                    

MARCO

Por fin pude averiguar que era lo que había sucedido durante todo el tiempo que no estuve. Me partió el corazón saber todo lo que Azul había pasado pero aún peor pude descubrir lo gilipollas que he sido. Desde que me había alejado de Azul, ella comenzó una guerra tanto interna como externa. Tuvo que volver a pasar por aquella enfermedad que poco a poco le fue quitando a sus seres queridos. Además durante ese tiempo paso por una depresión que le dejo muchas consecuencias que con el tiempo sanaron pero volvieron cuando me volvió a ver. Y joder, como no iban a volver si yo había sido en gran parte el culpable de ellas.

Al terminar aquella conversación que merecíamos, sentía que Blu no me estaba contando algo pero sabia que ya había sido suficiente por el momento así que decidí descontracturar un poco el ambiente y invitarla a bailar un rato allí mismo. Fue un lindo momento pero que termino con un silencio incomodo tras decirle que aún recuerdo aquel día que pasamos en este lugar hace casi once años atrás como si fuera hoy.

Luego de aquello volvimos juntos a la casa y nos recibió Bea con unos ricas galletas que eran nuestras favoritas. Tuvimos una tarde agradable en la que me sentí como en casa. Jugamos a las cartas y charlamos toda la tarde. Cuando llego la noche, Bea le pregunto a Azul hasta cuando se quedaría y su respuesta me sorprendió, dijo que mañana se iría.

- ¿No era que nos quedaríamos durante una semana? - Dije confuso

- Creo que ya ha sido suficiente tiempo para aclarar las ideas - Respondió con una tez angelical en su voz

- Vale. Pues nos iremos cuando usted me diga señorita - Dije con un deje de felicidad y orgullo

Hacia tiempo que miraba a Azul y no notaba ese brillo en sus ojos y hoy lo he vuelto a notar después de mucho tiempo. Además de sorprenderme con aquello me sorprendí por su respuesta por lo que decidí cumplir con sus deseos y ordene todo para salir hacia Nueva York mañana por la mañana. Realmente cuando nos marchamos de Nueva York le avise al señor Blaker sobre la situación y le pedí por favor posponer una semana mas el inicio formal de la campaña aunque para ser precisos no se lo dije a Blu así que cuando lleguemos a la ciudad tendremos ambos una semana de descanso que le vendrá muy bien sobretodo a ella.

Ya habíamos cenado y decidimos irnos a descansar ya que al día siguiente saldremos temprano hacia Madrid para poder estar allí al mediodía para que Azul pueda ordenar y coger algunas cosas que le han quedado en Madrid y tomar el vuelo a eso de las seis de la tarde para llegar a eso de las ocho de la noche a Nueva York. Así que a la mañana siguiente nos despertamos a eso de las ocho para desayunar y coger mi coche para emprender el viaje hacia Madrid.

Cuando llegamos, fuimos primero al hospital a buscar unas cosas que Azul tenia en su oficina y necesitaba, luego nos marchamos hacia su piso que dicho sea era muy de su estilo. Tenia todos los muebles blancos con toques de color madera como siempre le habían gustado. Además pude apreciar una estantería donde había un montón de libros que a Blu siempre le han gustado leer. Por último, nos marchamos del piso y la invite a almorzar a un lugar cerca del aeropuerto donde hacen las mejores pastas para asegurarme que Azul coma. Compartimos un almuerzo pacifico en el que no intercambiamos muchas palabras pero nos encontrábamos en un silencio cómodo.

Pronto nos fuimos hacia el aeropuerto para tomar el vuelo. Al entrar al avión deje que Azul se sentara primero mientras yo iba al baño antes de despegar pero cuando volví la vi sentada al lado de la ventanilla mirando atreves de ella con los ojos llorosos.

- Ey Blu, ¿qué sucede? - Pregunte preocupado acercándome a ella y poniéndome de cuclillas enfrente suyo corriendo aquel mechón de pelo travieso que siempre se atravesaba por su cara

- Tengo miedo Marco - Respondió con la voz quebrada y con un a lagrima deslizándose por su mejilla

- ¿De que Blu?

- De no poder superar jamás estos ataques de ansiedad y

- No sigas Azul, no hace falta que sigas cariño, tu eres la persona mas fuerte que conozco y se que lo superaras y yo estaré ahí para ayudarte - La interrumpí

- Es que ese es el problema Marco

- No entiendo lo que me quieres decir - Dije confuso

- Que tengo miedo de no poder hacerlo a tu lado - Dijo tragándose un sollozo

- Ven aquí. Lo lograremos superar juntos - Dije rodeándola con mis brazos - Ahora me quedare a tu lado durante el vuelo y tu descansa

- Vale. No sabes cuanto he extrañado estos putos abrazos reconfortadores

- Pues prepárate por que ahora no te soltare jamás - Dije acompañado de una carcajada de ambos

El vuelo fue largo pero acogedor. Pude dormir luego de asegurarme que Azul lo hiciera. Fue muy agradable volver a tenerla entre mis brazos y ver como dormía tranquila sobre mi pecho tanto que hasta yo me quedo dormido un rato después. La azafata tuvo que venir a despertarme cuando estábamos por aterrizar por lo que tuve que despertar a Azul aunque me daba pena porque se la veía tan tranquila durmiendo pero cuando lo hice, joder, claramente Blu me volvía loco. Tenia ese brillo al despertarse en sus ojos y esa sonrisa tan bella que tuve que pestañar tres veces para no hacer locuras.

- Buen día señorita Cantini - Dije con un deje de chiste - Estamos apunto de aterrizar y necesito que se abroche el cinturón

- De acuerdo señor Morgan. A sus ordenes - Contesto riéndose

El aterrizaje fue tranquilo aunque en un momento Azul se asusto un poco y me tomo mi mano que con gusto la recibí. Nos bajamos del avión y fuimos al aparcamiento a buscar mi coche.

- ¿A donde la llevo señorita?

- A mi piso por favor

- De acuerdo, allí vamos. ¿Quiere que ponga algún tema en particular para el trayecto?

- ¿En serio me esta dando este privilegio señor Marco?

- Si señorita Blu

- Pues déjame pensar

Luego de unos segundos comenzó a sonar Dive de Ed Sheeran. Pude notar como iba disfrutando la melodía.

- And I could live, I could die. Hanging on the words you say

Comenzó a cantar y sabía que gran parte iba dedicada a mi pero la siguiente canción la elegiría yo y le respondería. así que decidí y puse Gotta be you de One Direction

- ¿Desde cuando a Marco Morgan le gusta tanto One Direction? - Pregunto confusa

- Desde que me sirve para responderte y describir nuestras historia - Dije respondiendo a su pregunta - And no woman in the world deserves this but here I am asking you for one more chance

La canción se cortó de repente y quedamos los dos sorprendidos.

- Mucho coche pero poco sonido - Dijo riéndose al cabo de unos segundos

- Es que ya hemos llegado - Dije tras ver que por suerte ya estábamos a una cuadra del piso de Azul

Al llegar me baje con Azul para acompañarla hasta la puerta pero cuando llegamos a esta vi que azul estaba muy pensativa.

- ¿Qué sucede Blu?

-Emm ¿Te quieres quedar esta noche aquí?

Entre tantos, tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora