Bangtan Chef

10

-Joder Jimin-el mayor supo que su hermano estaba profundamente molesto cuando escucho su nombre salir de su boca, no había un hyung, ni un Minie, nada, solo su nombre.

-Que bien estabas con la lengua cortada-bufo rodando los ojos.

-Dejate de tonterias, llevas doce dias sin mirar para nada tu hombro ¿quieres quedarte sin brazo o que?-gruño apretando los puños.

-No exageres-negó encendiendo la cafetera, tenia el estomago cerrado, siquiera quería desayunar, pero todo era mejor que mirarlo la cara de enfado del pelinegro.

-hueles a sangre, y te cuesta mover el hombro, no estoy exagerando-siseo conteniéndose a golpearlo.

-Eso no es asi, estoy perfectamente-nego moviendose como si las punzadas en la articulacion no estuviesen matandole.

-Jimin se toda esa mierda de sitio nuevo vida nueva-su tono bajo dos tonos intentando que dejasen de discutir.-pero hay cosas que no puedes dejar atras, menos si aun estan abiertas como esa herida.

Quiza no iban con ninguna mala intencion, incluso quiza trataba de consolarlo, pero esas palabras quemaron en su pecho. Si que podia dejarlo todo atras, claro que podia, él Jimin al que le desgarraron el hombro habia muerto en Busan, no existia en Seul, ahora era uno que podía devolver los gruñidos, que podia enfrentarse y gritar si se lo proponía, uno que no agachaba la cabeza. ese alfa no tenia una herida que curar diariamente.

-Jungkook, no te metas-dijo completamente serio.

Vio el dolor en los ojos de su hermano, siempre habian estado juntos, siempre se ayudaron y planearon las cosas, dos cabezas piensan mejor que una, pero Jimin no queria su lastima, ni la suya ni la de ninguna de las enfermeras que lo curaban diariamente. Estaba cansado de dar falsas explicaciones o de las miradas de lastima, él era un nuevo alfa, no el patetico que se dejo hacer esa aberracion.

-Lo siento, pero de verdad no quiero hablar del tema.

Podria decirse que la cosa con el paso de los dias se fue calmando, que ambos alfas aprendieron a trabajar juntos y la armonia se comenzo a respirar en la cocina, pero fue todo lo contrario.