Thunder

26. El trueno que te ilumina

Ahora mismo me encuentro en el edificio donde trabajamos Killian y yo. Hace semanas que no lo veo y no viene a la oficina a trabajar, pero hoy si que a venido, su coche esta en el parking y voy directa a si despacho a hablar con el. Necesito saber que le pasa. Cuando llego me planto delante de la secretaria.

-Necesito ver a Killian
-Ahora mismo no es un buen momento- Me dice sin levantar la vista del ordenador.
-No me voy a ir de aquí hasta que no hable con el- Tenia toda la intención del mundo de quedarme ahí a esperar hasta que saliera.
-Ahora lo llamo- Se levanta y se dirige a su puerta -Killian, Leah esta aquí y insiste en verte.

No llego a escuchar la contestación de Killian pero la chica asiente con la cabeza y se gira hacia mi, me hace una señal con la mano para que pase.
Cuando entro lo hago restregándome las manos por los bolsillos, no sabia que estaba tan nerviosa que me sudan hasta las manos. Cuando entro cierro la puerta tras de mi y lo miro.

Ese no es Killian.

No se que cojones le pasa pero ese no es el chico irónico y alegre que conocía.
Tiene la mirada mas oscura de lo normal, tiene las ojeras marcadas y no lleva su sonrisa de siempre. Esta serio.

-¿Necesitas algo?
Me acerco a la mesa y pongo las dos manos encima de ella.
-Necesito saber que coño te pasa conmigo- Le digo con el ceño fruncido
-Nada- La tensión podía cortarse con un cuchillo
-¿Te he echo algo?- Tenia ganas de llorar
-Tu no- Nos estamos mirando a los ojos casi sin pestañear y en ese momento me sentí mas frágil y pequeña que nunca
-¿Entonces? Han pasado semanas y no me contestas al teléfono, ni si quiera lees los mensajes, ¿Me he equivocado en algo? ¿Te he echo algo? Joder Killian aprecio mucho tu amistad y te echo de menos- Al decir eso ultimo se me rompió la voz y me cayo una lagrima, quería morirme de vergüenza allí mismo. A el se le ablando la mirada.
-Leah no es nada, cosas mías.
-¿Porque siempre tengo la sensación de que soy la mala?- No podía mas y me senté en la silla frente a el. -¿Tantos problemas te doy? ¿Tan dramática soy?- No se que vio en mi cara pero se levanto y se arrodillo frente a mi. De cerca le vi mucho mejor la cara. Parecía cansado y le faltaba el brillo de sus ojos.
-Leah... Tú no te equivocaste, no hiciste nada malo, nada te faltó, no eres mala, no aburres, no exageras, no eres intensa, no eres dramática, no eres tóxica, deja de torturarte, tu no eres el problema. -Levante la mirada y nos quedamos unos segundos en silencio.
-Entonces, ¿Cuál es el problema?
-El, el es el problema. -No sabia muy bien a que se refería pero el instinto que me decía que me quedara allí con el, para siempre, que estaría bien y nada me haría daño. No me sentiría menos y me valoraría como me merecía.-Necesito que te alejes de Logan, portavoz Leah, no quiero verte con el, no estoy celoso, estoy aterrorizado, después de todo... no quiero pensar en lo que... -Se callo de golpe
-¿En que?

 
Su mirada se intensifico y parecía estar librando una batalla en su mente.

 
-No quiero que vuelva ha hacerte daño, de ninguna de las formas que te lo hizo en el pasado..- Parecía muy sincero y se instalo un miedo en mi corazón que nunca había sentido. Podía ser verdad, hace nada me hizo daño, y si pasa una vez, siempre vuelve a pasar. -Estoy acojonado, aterrorizado, me da terror que te pase algo, pero yo no puedo alejarte de el si eso no es lo que quieres, yo quiero que seas feliz. Y creo que cometí el error mas grande de mi vida alejándome y dejándote con el, cuando lo único que me decía mi instinto era que te cogiera y a rastras te sacara de allí, te alejara de el de una vez por todas. Porque aunque no te acuerdes Leah, yo te quiero, y estábamos perfectamente bien juntos, pero ahora se que puede que no estuvieras preparada para estar con alguien, es más, no te quiero, estoy enamorado de ti hasta los huesos, te has metido de lleno en mi alma y no vas a salir nunca, pero quiero que estés bien, quiero que brilles, tu sola, sin nadie, y luego cuando estés preparada quiero que me elijas si eso es lo que te hace feliz y si no me elijes, si no me quieres y eso te hace feliz, adelante. Estaré siempre a tu lado, pase lo que pase. Seré el puto trueno que ilumina tu oscuridad en mitad de una tormenta.-Me acaricio la mejilla con los dedos.

Me quede petrificada. Mi corazón dio una voltereta y no pude contestar. Joder, este chico iba a darle la vuelta a todas y cada una de las cosas que yo tenia. ¿Cómo cojones se enamoro de mi?

Necesito recordar.