Capítulo 4

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***







La noche llegó rápido. Todos los demás estaban cenando en las mesas y yo solo me limité a ir con sartén por mi plato de comida.

Newt y Winston me llamaron a una mesa donde estaban ellos, Ben y Minho. No estaba segura si debía ir o no, aún así, no tenía a donde más ir así que me acerqué con ellos y me coloqué a un lado de Ben y quedé en frente de Newt y Minho.

- ¿Que tal tu segundo día, novata?

Nadie ahí sabía que ya recordaba mi nombre y agradecía mentalmente que Minho no dijera nada. Además, ¿por qué diría algo?

- Si, ¿cómo te fue? - pregunta animado Ben.

- Bien, aprendí mucho con los docs, realmente me gustó mucho lo poco que hice hoy con ellos. Y con sartén estuvo bien, intento saber que hacer para mañana - todos asintieron sonriendo.

- ¿En el laberinto que tal les fue? - me atreví a preguntar. Varios callaron y Ben empieza a decir - Nos fue como todos los días, terminamos muy cansados.

- También no es algo que sea mucho de tu incumbencia - avisa Minho.

- Bueno, solo quería saber - dije con un tono apenas molesto - Quería preguntarles también de su día como ustedes a mi.

- Nos preguntaste a los corredores, faltan ellos - apunta a los restantes - ¿Están pintados o que?

- Iba a hacerlo cuando terminara con ustedes - dije de mala gana.

- No pareciera, ¿no ocupas a hacer cosas de chicas o así?

- ¿Cuál es tu maldito problema? - me enojé por la manera en la que llevaba contestándome desde que inició la plática, o desde que llegué aquí - Intento adaptarme.

- No tienes que - grita estresado - ¿Por qué tenías que venir, Annie?
Nadie te ocupaba aquí.

Ahora todo el claro, y todos los que estaban cerca se callaron. Voltearon a verme y Newt fue el primero en preguntarme si yo ya recordaba mi nombre a lo que asentí.

Minho rió por la nariz y mencionó - Lo recordó por la tarde, gracias a mi.

Lo miré mal y le saqué el dedo. Él me miró de una extraña manera que no se descifrar, dolido, nostálgico, enojado, ansioso. No lo sé.

Abandonó las mesas yéndose a un lugar más apartado y oscuro del bosque.

- ¿Qué fue todo eso? - agaché mi cabeza comenzando a comer mientras negaba con los hombros - Bueno pues, bienvenida al claro, Annie - Newt alza un vaso y todos los demás le siguen haciéndome sonreír y que por un momento se me fuera aquel momento amargo que pasó hace unos segundos.

- Bienvenida, Annie - menciona Gally sonriendo junto con Alby.

Después de eso, no estuvo tan mal, pude hablar con todos los demás de una manera pacífica y muy divertida, todos ahí son adolescentes, somos adolescentes, cuyos tuvimos la mala suerte de estar ahí.

Eso ya no importaba, lo que tenía relevancia era que estábamos ahí atrapados todos juntos y lo haríamos funcionar como lo que ahora soy, parte de la familia.











*****

- Tenemos que ayudarlos, no podemos seguir así - el castaño me veía sin saber que hacer - Thomas, ellos son nuestros amigos, es nuestra familia.

- No podemos salvarlos a todos, Annie.

- Eres un maldito egoísta, igual que tu maldita novia - dije enojada yéndome del cuarto sin luz.

- Annie - volteo de dónde viene la voz y me asusto de inmediato.

- Minho no debes estar afuera, regresa a la habitación - le jalo del brazo para que me preste atención pero me detiene - Por favor ve, no quiero que te manden.

- Incluso si lo hacen, jamás lograrán que te saquen de mi mente. Siempre estarás ahí, preciosa.









- ¿Qué no ves lo que estamos haciendo? Debemos hacer algo, y si no lo haces tú, lo haré yo

*****

Me desperté de golpe de nuevo por la noche, mi respiración era demasiado agitada, no entendía del por qué de esos sueños y por qué los tenía, o de quiénes eran esas personas que mencioné o el por qué estaba Minho ahí.

A mi lado escuche un carraspeo, era el asiático nuevamente - Sigues sin dejarme dormir con tus quejidos - suelto el aire de una gran bocanada y me levanto de la hamaca haciendo que él haga lo mismo - ¿Todo bien? - carraspea - Porque si te pasa algo y yo estuve despierto seré el responsable - ruedo lo ojos y me adentro al bosque.

- ¿A dónde vas? ¿Buscas Narnia?

- Tu que sabes de ese lugar, además, a donde vaya no te incumbe, déjame en paz.

- Lamento como te trate hoy, realmente ni siquiera yo sé por qué lo hice - menciona deteniendo su andar a lo que lo volteo a ver.

- ¿Algo más? - niega y se da la vuelta yéndose. Suelto una risa estresada por su cambio de humor.

De todos modos sigo mi camino adentrándome más y más, logro visualizar un pequeño lago, demasiado pequeño pero muy lindo de apreciar, me senté por la orilla en las rocas y me puse a ver de mejor manera la luna y las estrellas, el reflejo en el agua de igual manera.

¿Qué mierda está pasando ahora? ¿Qué pasó con mi vida antes de esto? ¿Por qué puedo recordarlo como si fueran mis memorias? ¿Es eso? ¿Son memorias? Sinceramente no confío ya ni en lo que sueño, ¿qué tal si me hacen soñar esto? Eso no es posible, no creo.

Me tomo la cabeza de una manera muy estresante, no sabía que hacer ya.

Después de que mis pies tocaran el agua, me di cuenta que el lago si era profundo. Y ahora que lo pensaba bien, no me había duchado desde el momento en el que llegué.

Como era de noche y todos estaban dormidos, decidí quitarme la ropa y quedarme en ropa interior, me sumergí en la profundidad de ese lago esperando que no haya nada malo dentro o algo que me pueda perjudicar.

Dejé que el agua helada conectara con mis pensamientos, me quedé quieta, dejando que el pequeño viento golpeara mi cara y moviera la sintonía del agua.

Podía sentirlo, podía sentir un poco de paz desde que subí por esa caja, tal vez las cosas aquí no son tan malas, debo acostumbrarme, debo adaptarme y debo dejar lo que ya pasó en el pasado, ¿quién fui? No lo sé, eso ya no importa.

Concéntrate en ti - me dije a mi misma ¿Qué hay de Minho? Cierro los ojos con fuerza y los abro para evitar pensar en él, ni siquiera sabía por qué lo hacía, pero el asiático comenzaba a tener más tiempo en mi mente en el día que todos los demás.

Podía ver que he estado al pendiente de cuando se va a cuando llega, solo llevo dos días aquí, pero ese chico se esta robando toda mi atención.

Soy una adolescente y él es muy atractivo, puede ser eso, pero no lo era. Había algo más, algo en sus ojos que quería volver a descifrar, algo en su cuerpo que quiero tocar, rato y tiempo con él que quiero pasar, definitivamente ese chico comenzaba a tener cierto control en mi y lo más importante, poder.

No quería que eso pasara, pero vamos, Minho me odia. Es más fácil que Gally me de su receta secreta a que Minho me sonría y me trate bien.
































Gomixkill_43

The Maze Runner - MINHO - Donde viven las historias. Descúbrelo ahora