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Después del entrenamiento de voleibol, caminé hasta la biblioteca donde encontré a Eunwoo recargado en la pared.

—¿Qué tal tu entrenamiento? —preguntó.

—Muy cansado, ¿y el tuyo?

—Igual —dijo con una expresión cansada.

Eunwoo abrió la puerta y entramos a la biblioteca, donde nos esperaba la bibliotecaria. Era una típica señora mayor con lentes en la punta de la nariz, tratando de mantener silencio en el lugar.

—¿Ustedes son los pequeños vándalos que vienen a trabajar para mí? —dijo con voz chillona.

Ambos asentimos.

—Síganme —dijo, dando pequeños y lentos pasos por los pasillos.

—Creo que mi tortuga camina más rápido que ella —me susurró Eunwoo, y yo reprimí una risa.

Él comenzó a caminar en cámara lenta tras ella, y no pude evitar soltar una pequeña risa.

La bibliotecaria se giró y con el dedo índice en la boca susurró: "Shhhhh".

Mordí mi labio mientras asentía y caminaba tras ella.

—Nos haremos viejos para cuando lleguemos a donde ella quiera —susurré.

—Ya me siento viejo —dijo él imitando a un anciano.

Volvimos a reír y ella nos volvió a callar. Llegamos a uno de los pasillos de la biblioteca donde se encontraban algunos carritos con libros, como los que te dan en el supermercado.

—Acomoden los libros en sus sitios y se pueden ir —dijo con su voz chillona.

Sonreí al ver que solo había cuatro carritos, eso significaba que si nos apurábamos, podría ir a casa de Joshua.

—Hay otros carritos al otro lado del pasillo, no se olviden de esos —dijo señalándolos.

Mi sonrisa se desvaneció al ver la cantidad de carritos que había; parecían unas cincuenta llenas de libros.

Empecé con un carrito. Cuando acabé con ese, fui por otro y luego por otro.

—¿Sabes dónde están las enciclopedias? —me preguntó Eunwoo.

—En la primera fila.

—¿Y los libros de medicina?

—En la segunda fila —dije confuso —¿Qué nunca has entrado a la biblioteca? —pregunté.

—Solo para dormir —dijo encogiéndose de hombros.

Reí divertido mientras tomaba un nuevo carrito.

Había pasado más de una hora desde que empezamos y no parecíamos acabar. Decidí sentarme un rato para descansar. Eunwoo caminó hasta donde yo estaba y se dejó caer a mi lado.

—Esto es realmente aburrido —dijo soltando aire.

—Y realmente agotador —dije cerrando los ojos.

—Vamos a hacer algo divertido —dijo en tono burlón.

Abrí los ojos y me giré para verlo.

—No podemos irnos.

—¿Quién dijo que una biblioteca es aburrida? —dijo subiendo una ceja. —Vamos, aparte ya vamos por la mitad —dijo parándose y dándome su mano.

Lo pensé por un instante, si de todos modos tendría que quedarme hasta la noche aquí, ¿por qué no jugar un rato?

Tomé su mano para que me ayudara a pararme.

My brother's best friend | JihanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora