17 06 15

37 13 2
                                    


Ahora el muerto, el fantasma, se encontraba más vivo que a quien le latía el corazón.

Cuando la joven se fue, después de haberla dejado bajar unos minutos al sótano y que ella depositara las flores en la habitación del número 2510, Hyunjin se cruzó de brazos frente a Seonghwa y torció los labios, mostrando su descontento y su espera por una indicación de Seonghwa.

-¿Qué? -Preguntó el mayor con una mueca mientras se dejaba caer contra el sillón, cubriendo su cabeza con ambas manos. -Deja de mirarme así y comienza a hablar.

Hyunjin suspiró profundo y prolongado, tomando asiento a un lado para mirar directo a la televisión.

-Hay fantasmas. -Pronunció sin más, manteniéndose relajados y aflojando su tenso cuerpo. -Ellos existen.

Seonghwa casi suelta una risa amarga, pero esta se ahogó dentro de su cuello, suprimiéndose y regresando hasta su pecho donde se extendió como un nerviosismo. Estaba buscando una respuesta, aunque pareciera inútil o absurdo, el seguía buscando una contestación que le diera sentido a todo eso.

-Estamos sugestionados. -Seonghwa se limitó a responder, enderezando su espalda sin mirar a su hermano. -Los números en la habitación ahora tiene sentido, no fue ningún fantasma.

-Ya, y supongo que los mensajes de mi celular venían incluidos con la casa. Se te están acabando las excusas.

-Pudo ser un conocido de Lee Minho... -Murmuró. -Alguien que enloqueció con su muerte y ahora se dedica a molestar a cada inquilino que llega aquí.

-Poco creíble.

-Es más creíble que un puto fantasma. -Se puso de pie con molestia, tratando de convencerse sobre sus propias palabras.

-No le digas así.

Seonghwa giró el rostro desconcertado por la petición del menor. Lo observó varios segundos tratando de descifrar su postura, notándola relajada, casi tan calmada como la actitud de niño.

-¿Te da miedo el supuesto fantasma?

Hyunjin negó.

-Todo este tiempo pensé que estaba enloqueciendo, por eso estoy aliviado de saber que al menos yo no soy el problema. -Hyunjin elevó sus labios, mostrando esa sonrisa gatuna que estuvo desaparecida durante un buen tiempo. -Ahora dormiré tranquilo sabiendo que hay un fantasma rondando y no soy solo yo siendo paranoico.

Hyunjin se puso de pie, caminando fuera de la sala sin interés alguno en la respuesta de Seonghwa. Al parecer ambos habían tenido suficiente con la reciente visita de la joven, ninguno sabiendo que pensar al respecto y solo colapsando.

Wooyoung corrió hasta Seonghwa, alzando sus brazos como un niño de dos o tres años esperando a ser cargado. El mayor lo levantó sin chistar, abrazándolo con cariño notando que el pequeño había estado rondando en la habitación por varios minutos hasta que se acercó.

Dejó que Hyunjin se fuera, observando sus lentos pasos alejarse, pareciendo ajeno de la situación. Woonie dejó caer su cabeza contra su hombro, acurrucándose con cariño.

Fue todo por ese día.

17 06 15

"Minho"

3:45 p.m. Hyunjin no se levantó de la cama ese día, ni siquiera cuando escuchó el claxon de la vieja camioneta de Chan, tampoco cuando escuchó a Wooyoung correr por el pasillo arrastrando a San para asistir a la escuela, tampoco se levantó cuando Seonghwa le gritó que se vistiera para ir a clases. Él permaneció con el rostro cubierto por las sábanas.

𝐄𝐋𝐋𝐎𝐒 [𝐀𝐃𝐀𝐏𝐓𝐀𝐂𝐈Ó𝐍]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora