CAPITULO 5

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CAPITULO 5 - LA DANZA DE LAS MÁSCARAS

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CAPITULO 5 - LA DANZA DE LAS MÁSCARAS

Los niños se amontonaron y saltaron al rededor de la nueva cuidadora del hogar explorandola, su apariencia y carácter por el momento parecía ser agradable y amistoso, con un rostro amable y ojos bondadosos que inspiraban confianza. Mamá levantó la cabeza en un movimiento elegante con orgullo y firmeza, sonrió mientras cerraba los ojos dando lugar a su victoria sumamente satisfecha.

Mientras Mamá daba las órdenes de disfrutar del receso y jugar en el jardín desapareciendo en las escaleras con Matilda, Norman y Ray se quedaron quietos al ver hasta donde era capaz de llegar Mamá solo para ponerle fin a su rebelión descarrilada, ninguno de los dos pronunció palabra alguna y al compartir una mirada salieron de la casa camino al aebol de Ray.

—Es increíble, ella nos hizo preparar la habitación del nuevo enemigo, nos vió la cara de estúpidos —Ray se apoyó en el arbol y cruzó los brazos mirando al cielo, estaba frustrado por no haber previsto el movimiento, pero Norman...

Más que preocupado el se veía molesto, como nunca lo había estado.

Ray bajó la vista y vió a Norman levantar el puño contra el árbol, pero no lo golpeó al ver la herida en su mano, a penas estaba cicatrizando a paso ligero, como si no quisiera sanar.

—¡Si tan solo hubiera sido más atento, las pistas estaban ahí! —Norman caminó con desgano y la sonrisa más hipócrita en el rostro, conteniendo un tic nervioso en el ojo, como siempre y harto de esta dinámica, Ray siguió a Norman colina abajo perdiéndose en el bosque.

—Yo solo... creí que ya estaba listo para superar a Mamá... tengo que hacerlo a como de lugar.

Pero lo que más rabia le dió, fué notar que antes que cualquier cosa el orgullo herido de su mejor amigo iba primero.

—Ella solo quiere que nos rindamos, pero obviamente no le vamos a dar el gusto, solo tenemos que dejarnos llevar y algo surgirá —balbuceó Ray frotando su región occipital de la cabeza, tenía la leve impresión de que últimamente estar cerca de Norman le afectaba no solo emocionalmente.

—¿Qué? No te entiendo —de un forma cortante y altanera le respondió Norman, se veía más cansado de lo habitual e incluso podría jurar que tenía bolsas en los ojos.

Ray se mordió la lengua antes de arremeter contra su amigo ante su terrible carácter y continúo —Miralo de esta forma, ahora tenemos nuevas fuentes de información, y eso es todo lo que necesitamos para asegurar la victoria.

En el jardín, saliendo la puerta principal con una sonrisa en el rostro y entusiasmo de por medio Sherry corrió con todas sus fuerzas al árbol donde usualmente se encontraba Ray, pero algo era extraño, esta vez estaba al lado de Anna y Thoma.

THE GARDEN OF DANDELIONS | TPNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora