UN TOQUE DE COLOR

21UN BESO UN PROBLEMA

Una sensación cálida en los labios seguida por una fuerte corriente eléctrica que recorrió todo su cuerpo y culminó en un estallido nuclear. El mundo desapareció y solo quedó el silencio y el aroma mentolado del labial de Álex.

—O-otro... Dame otro, porfavor.

La urgencia por volver a sentir de nuevo sus labios lo impulsaron para besarla con una voracidad casi animal. Acunó su rostro con amabas manos y la atrajo hacia él para devorarla mientras su lengua, ansiosa, exploraba la boca de Alexa. La sujetó de los hombros y atrajo un poco más su delicado cuerpo hacia él. Sin dejarla respirar un segundo, deslizó sus manos por sus brazos hasta que reaccionó y la apartó— Mierda, lo siento... L-lo siento —su respiración entrecortada apenas lo deja hablar. Se cubrió el rostro con ambas manos y respiró hondo para controlarse.

Cuando Goo la suelta, Álex toma una bocanada de aire aprovechando que al fin puede respirar. Esta agitada y sonrojada.

—Oh, mírate, estás toda sonrojada, tus mejillas brillan de lo roja que estas. Que tierna eres, te vez más hermosa aún —se acerca y esta vez le da un beso tierno en los pómulos— Ahora eres completamente roja— frota su nariz con la de ella.

Alexa sonríe, y le devuelve el tierno beso es sus labios mientras él sujeta sus manos.

—¿Sabes? —dice Alexa desviando la mirada— tenía muchas ganas de besarte.

Una suave risa escapa de Goo—Eres... Eres increíble, estás llena de sorpresas. Tienes una dualidad increíble... Creo que en eso nos parecemos. —se queda callado por un momento pensando en su siguiente palabra. Tomó una bocanada de aire y lo dejo ir— Rojita, te amo.

Los ojos de Alexa se inundaron de ilusión y su pecho se lleno de una cálida sensación de bienestar— También te amo, Goo.

—Jaj, claro que me amas. Soy increíble —sonrie con arrogancia— Ahora mi querida novia a la que al fin pude besar, que tal si vamos por unos cafés, ese viejo no me dejó descansar un solo momento y necesito cafeína en mi sangre.

Fueron a una linda cafetería con temática francesa.

—Bonjour... —saludó la elegante dama— Bienvenidos a Fountain's co... Ah, eres tú.

—¿Ey, así me recibe?

—Ya le dije a tu otro amigo de ojos raros que... —Parpadea sorprendida cuando ve a una linda jovencita de cabello rojo oculta tras él, sosteniendo su mano— ¿La secuestraste?

—¿Que? ¡Claro que no! Es mi novia —replica con orgullo.

La madame ve a la chica de ojos curiosos asomarse tras él— Ay, pequeña... Goo Kim, ¿Hasta cuando dejarán de lastimar niñas inocentes?

—¡Yo no...! Agh, vieja loca. Mejor mándeme una mesera de verdad —refunfuño y jaló a Alexa hasta una mesa junto a la ventana.

Alexa le sonrió a la mujer como disculpa mientras era arrastrada— no le agradas a esa mujer.

—En realidad si, es solo que... Bueno, los viejos de este lugar no están pasando por un buen momento.

—Oh, pobrecillos.

—Yo acostumbraba venir a esta cafetería casi todos los sábados, tenían una media hora de show increíble y...

—¿Y?

— ...Nada, era divertido —fuerza una sonrisa.

Cuando era hora de volver, Goo llevo a Álex hasta su casa y la despidió con un breve y dulce beso en los labios. Alexa subió hasta su habitación flotando, como si sus pies no tocaran el suelo.