15. Él lo intenta
Tome en el ramo de flores que Reginal me ofrecía sin decir ni una sola palabra, lo acomode en uno de los floreros en el cual había uno ya casi marchito, no entendía el porque me traía tantas flores, no es como si eso me hiciera dejar de estar enojada con él.
Me senté en el sofá y cerré los ojos, me sentía tan cansada y eso que no había hecho ni la mitad de las cosas que estoy acostumbrada a hacer a diario, supongo que es por el hecho de que estoy creando una vida, pero en parte me enojaba sentirme tan cansada por nada, en especial siendo tan necesario que yo esté en constante movimiento y haciendo varias actividades.
Me perdí en mis pensamientos y de repente me encontraba dormida.
Me desperté cuando sentí como me movían ligeramente, abrí los ojos lentamente y me encontré con la mirada tranquila de Reginal.
— Hice la comida — me dijo regalándome una pequeña sonrisa.
Me di cuenta de que estaba acostada en el sofá con una cobija arropándome, me levanté con cuidado y caminé al comedor.
Los dos nos sentamos a comer, al principio en silencio, en mi mente solo había un pensamiento, ¿Cómo era posible que Reginal cocinara mejor que yo? Él era un hombre que en su vida había recibido tutoría para poder cocinar, mientras que a mi me llevaban intentado hacer aprender desde los cinco años, era raro.
— Estuve pensando — Regional empezó y se me hizo tan raro que fuera él quien intentaba iniciar una conversación — que tal vez hemos estado descuidando un poco el tema del bebé, ya sabes con toda esta pelea no hemos ido ni siquiera a ver cosas básicas para su habitación, creí que mañana podríamos ir y comprar aunque sea una cuna.
— No veo porque no — respondí después de unos minutos de silencio, a fin de cuentas, ¿Que culpa tiene el bebe de que su padre sea un idiota?
Reginal me sonrió, no dijo otra palabra el resto de la comida.
Yo estaba tan cansada que apenas terminé de comer subí y me acosté a dormir.
Nunca acuerdo con lo que sueño, es raro porque no hay ni una señal de ellos aunque esté recién despertada, se diferenciar si tuve un sueño o una pesadilla según la manera en la que me despierto, si me despierto con normalidad, se que tuve un sueño, pero si me despierto muy sudada y con muchas lagañas se sin ninguna duda que fue una pesadilla, pero esta vez no estoy muy segura, me desperté con normalidad, sin querer salir de la cama, pero con mucha hambre, mire la ventana, todavía no amanecía, una parte de mi quería cerrar lo ojos y seguir durmiendo, pero otra parte quería bajar a comer algo, pero no cualquier cosa, tenía antojo de algo en especifico.
Termine por levantarme de la cama, despertando a Lady que dormía a mi lado, las dos bajamos, me diriji a la cocina y busque en la nevera, al no encontrar lo que quería me dirigí a la sala, mire a Reginal que se encontraba profundamente dormido en el sofá, algo dudosa lo moví ligeramente.
— Reginal — murmure para despertarlo sin asustarlo — Reginal
Observé cómo lentamente abrió sus ojos, me miraba algo confundido.
— ¿Qué pasó? ¿Todo está bien? — me pregunto mientras se sentaba en el sofá.
— Si, pero necesito que salgas — responder
Reginal frunce su ceño, miró por la ventana y luego volvió a mirarme.
— ¿Salir? ¿A dónde?
— Quiero pescado — le expliqué — pero no tenemos por lo que necesito que me consigas uno.
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En Los Años 50
RomanceEn la década de los 50, Elen fue arrastrada a un matrimonio arreglado cuando tenia 15, su esposo nunca pareció amarla, pero de un momento a otro las cosas empezaron a mejorar para después caerse por un precipicio, ¿podrá Elen sobrevivir a todos los...